Cómo le fue a Nacional cuando cayó en la ida por Copa Libertadores: dos antecedentes y lo positivo para Recoba

El equipo tricolor deberá remontar la serie ante Always Ready, pero sabe que ya no tendrá en contra el factor climático.

Ruben Bentancourt en el partido entre Always Ready y Nacional por Copa Libertadores.
Ruben Bentancourt en el partido entre Always Ready y Nacional por Copa Libertadores.
Foto: AFP.

Álvaro Recoba fue muy claro en la conferencia de prensa tras el partido de Nacional ante Always Ready en El Alto a más 4.000 metros de altura sobre el nivel del mar. Es cierto que perder nunca puede dejar conforme a ningún equipo, pero por el contexto y por cómo quedó parado el tricolor de cara a la vuelta, se puede considerar que no fue un mal resultado.

El Chino -lo propio hizo antes de enfrentar a Puerto Cabello- sabe que no puede subestimar a su rival, pero también es consciente del potencial de su plantel y que el próximo jueves (21:30) contará a su vez con el apoyo de sus hinchas en el Estadio Gran Parque Central en el partido de vuelta.

Y es al potencial de su plantel, a jugar en casa y a contar con sus hinchas en las tribunas, detalles a los que se debe aferrar el tricolor luego de la derrota 0-1 que deja a Nacional por tercera vez en la historia de la Copa Libertadores en esta situación.

La primera ocasión en la que le ocurrió fue en la Copa Libertadores 2014 también ante un equipo boliviano aunque en ese caso se trataba de Oriente Petrolero. El local se impuso en Santa Cruz de la Sierra por 1-0 gracias al gol de Gualberto Mojica, pero el tricolor logró revertir la serie en su casa.

Con goles de Iván Alonso y Carlos de Pena, Nacional dirigido por Gerardo Pelusso eliminó al elenco boliviano y así se metió en fase de grupos de la Copa Libertadores.

La segunda ocasión en la que Nacional llegó comprometido en una fase previa de Copa Libertadores fue un año después porque en 2015 le tocó enfrentar a Palestino de Chile que, como local, se quedó con el triunfo por 1-0 gracias al gol de Diego Rosende.

La vuelta fue muy especial para el tricolor porque a pesar del triunfo por 2-1 gracias a los goles de Germán Lanaro (en contra) y Gastón Pereiro, no fue suficiente para avanzar porque en ese momento todavía estaba en vigencia la regla considerada como “gol de visitante”. La misma desapareció del reglamento y, sin ir más lejos, si Nacional supera 2-1 a Always Ready la definición llegará a los penales.

¿Cuál fue la otra particularidad de ese cruce? Que a Nacional le tocó jugar a puertas cerradas por una sanción que Conmebol le había aplicado lo que sin duda influyó teniendo en cuenta la presión que puede generar en el rival el aliento del hincha, así como también el envión para los propios.

Dos antecedentes con distinto resultado, pero también con diferente contexto. El próximo jueves, Nacional sabe que en condiciones parejas desde lo climático la historia puede ser muy distinta a lo que se vio en El Alto, pero también, como se suele decir en el ambiente del fútbol: “No puede hacer el segundo gol, antes que el primero”.

Salvo el resultado global, que por el momento lo tiene abajo, tiene varios detalles que le juegan a favor y a ellos debe aferrarse porque de hecho los antecedentes también lo acompañan, sobre todo si se tiene en cuenta que el resultado obtenido en 2015, hoy no lo eliminaría, más allá de que sí forzaría los penales.

El tricolor sabe que primero tendrá que enfrentar la cuarta fecha del Torneo Apertura ante Defensor Sporting, pero es inevitable mirar, al menos de reojo, lo que será la vuelta por Copa Libertadores donde podría acceder a fase de grupos.

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