COPA LIBERTADORES

En el fútbol todo tiene que ir de prisa, según el pensamiento del hincha, claro está. Ellos quieren todo y ya. Nada de esperar. Es como una regla de tribuna: que vengan victorias, buen juego, lucimiento de las figuras y todo de una. Pues bien, el Nacional de Alejandro Capuccio, aunque exhibió algunos detalles para tener en cuenta, lo real es que no pudo cumplir con esas premisas.

Lo que debe aceptarse, como supo destacarlo de forma inteligente Óscar Tabárez, es que el camino es el que enriquece. O si se quiere, es ese recorrido lo que permite ir ajustando aspectos esenciales para que los jugadores alcancen el nivel al que se promete llegar por las condiciones que calzan. Y con ello, no hay dudas, aparece el mejor juego colectivo y se cosechan los buenos resultados.

Ahora bien, qué dejó el estreno de Nacional. O, mejor dicho, que ofrecieron los nuevos fichajes del Tricolor que tuvieron su posibilidad de empezar a caminar con el Nacional 2021.

Alejandro Capuccio: El técnico dejó traslucir que pretende tener un equipo que domine el juego. Que asuma el protagonismo y transmita sus intensiones firmes de que va a ir siempre hacia adelante. La utilización de la figura táctica inicial (4-2-3-1) y hasta los riesgos que adoptó para montar una línea de 3 en al búsqueda del empate confirmaron su idea. Asumió riesgos como DT de equipo grande. En el debe está el hecho de que demoró muchísimo la realización de modificaciones. El partido le exigía a Nacional potenciar su ataque y dejó en cancha a D'Alessandro, Bergessio y Leandro Fernández cuando se necesitaba un revulsivo. No debieron salir Brian Ocampo y Joaquín Trasante.

Ángelo Gabrielli: No fue el mejor estreno. Dejó una cuenta pendiente, que puede cumplir por sus características. Es que debió darle más profundidad a sus incursiones ofensivas. Tratar de llegar hasta el fondo, asociarse mejor con Brian Ocampo. Darle la chance de poder tirar una diagonal porque él pasaba por detrás suyo para irse por afuera. Tampoco estuvo preciso en los pases. 

Camilo Cándido: En líneas generales una aparición que promete. Fue levantando el nivel con el paso de los minutos y lo mejor lo entregó en la segunda mitad. Con todo, ya en el primer tiempo había logrado entregar buenas combinaciones con Leandro Fernández y atacó espacios para recibir las habilitaciones de D'Alessandro. Lo bueno es que se soltó con convicción.

Andrés D'Alessandro: Demostró que va a ser una pieza importantísima en el crecimiento futbolístico de Nacional. Su manejo de los tiempos, su inteligencia para moverse y quedar en libertad de acción, su capacidad para ser siempre un buen receptor y sus toques de primera van a contribuir para que el equipo evolucione en dinámica. Quizás se pudo esperar algo más de un tiro libre que tuvo cerca del área y debió ser sustituido mucho antes porque el cansancio fue notorio.

Leandro Fernández: Empezó bien. Picando, leyendo el juego y metiendo grandes cambios de frente. Presionó arriba, procuró asociarse con Cándido y D'Alessandro. Pero también fue evidente que le gustó tirarse mucho hacia el medio, más que tratar de ir por afuera. También con el avance del partido fue perdiendo fuerza de ataque. Ejecutó de gran forma un tiro libre, lo que confirmó su buena pegada. Se puede esperar mucho de su juego.

Christian Almeida y Gonzalo Vega: Pocos minutos en cancha como para poder realizar una descripción más concreta.