Redacción El País
SEG Ingeniería (consultora de reducción de costos energéticos del Uruguay) lanzó su informe de indicadores energéticos de cara al primer mes del 2024. En ese marco, señalaron que varios precios de la energía local mostraron cambios. El gas natural, por ejemplo, bajó 9,6% durante enero, sumado a que también se registró una caída del 3,5% del gasoil.

En contrapartida -gracias a datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE)- el informe de SEG Ingeniería indicó que la leña se encareció un 0,9% en promedio en todo el país, mientras que la electricidad también subió, en este caso en un 3%. En este caso, cabe destacar que el aumento de la electricidad varía según la categoría tarifaria. Mientras que la tarifa industrial Grandes Consumidores 2 aumentó un 2,4%, las residenciales lo hicieron en un 3,6%. Dentro de este último, la tarifa Simple subió un 3,2%, las tarifas Doble y Triple Horario un 3% y la de Consumo Básico un 8,2%.

Con estos cambios, el Índice de Precios de los Energéticos Industriales (IPEI) mostró un encarecimiento del 1,42% en el mes. Por ello, el IPEI alcanzó un registro de 1,33% por encima del observado un año atrás, en enero de 2023.

En tanto, el Índice de Precios de los Energéticos Residenciales (IPER) registró un incremento mensual de 9,7%. Según el informe de SEG Ingeniería, dicho incremento se puede desglosar en dos partes: en primer lugar, por la interacción de las variaciones anteriormente expuestas y, en segundo lugar, gracias al efecto del plan “UTE Premia”. Este plan comercial implicó una caída del 9,3% en la tarifa eléctrica del sector residencial por única vez durante diciembre de 2023, según datos del INE. Al no aplicarse dicho descuento al mes siguiente, esto se manifestó como un incremento del precio de la electricidad durante enero. En esa línea, este incremento del IPER de enero de 2024 fue el más bajo para enero desde el año 2012 (cuando entró en vigor el plan), derivando en una caída de la variación interanual del Índice hasta el 5,33%.

El informe también destacó que en el mundo hay un intenso crecimiento en la demanda de aires acondicionados (de hecho, el 50% de los equipos de aire acondicionado etiquetados en Uruguay son categoría A, según SEG Ingeniería). El aumento de las temperaturas globales incentiva esta tendencia. En ese marco, la acelerada incorporación de unidades de este tipo está aumentando la presión sobre los suministros de energía locales, dificultando los esfuerzos por reducir la dependencia de los combustibles fósiles y comprometiendo los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero del sector energético.