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Cuantos miles de millones de dólares destinaron los uruguayos (familias y empresas ubicadas en el país) y los no residentes a pagar impuestos en 2022? ¿Qué tributos son los que más ingresos generan a las arcas del Estado uruguayo?

En 2022 la recaudación de la Dirección General Impositiva (DGI) creció 5,4% frente a 2021 en términos reales (es decir, al quitar el efecto de la inflación) y totalizó $ 584.224 millones (US$ 14.205,7 millones).

Los ingresos de la DGI crecieron durante casi todos los meses de 2022. La excepción fue la casi estabilidad en noviembre (suba de apenas 0,2% en términos reales) y en diciembre (caída de 0,2% en términos reales, ver aparte).

Por su parte, la recaudación neta (los ingresos que recibe el organismo menos las devoluciones de tributos que hace) aumen- tó 3% en 2022 respecto a 2021 en términos reales, para totali- zar $ 504.182 millones (unos US$ 12.259,4 millones).

Los impuestos al consumo totalizaron $ 326.518 millones en 2022 -unos US$ 7.939,5 millones-, significando más de la mitad de la recaudación del fisco (55,9% del total exactamente) y sus ingresos subieron 5% en términos reales en relación al año anterior.

Lo que más pagaron los uruguayos en 2022 fue el IVA. Este impuesto al consumo recaudó $ 273.476 millones (unos US$ 6.649,7 millones) un 5,4% más en términos reales que en 2021. Hubo incrementos en los ingresos por el IVA interno (+7,4%), por el IVA a las importaciones (+1,8%) y por del IVA mínimo que paga la pequeña empresa (+0,7%). El IVA es el principal tributo que administra la DGI al aportarle $ 46,80 de cada $ 100 que recauda.

A su vez, subieron 3,5% los ingresos por Imesi al recaudarse $ 53.042 millones -US$ 1.289,7 millones-. En este caso, aumentó lo recaudado por Imesi a venta de naftas (+12%), aunque hubo un cambio en la forma de imposición. En efecto, desde enero de 2022 “el Imesi combustibles separa la porción correspondiente a emisiones de CO2, por lo cual el cálculo de las variación real resulta distorsionado respecto a 2021”, indicó la DGI. Así, el Imesi a combustibles recaudó $ 18.049 millones en 2022 y el Imesi a emisiones de CO2 recaudó $ 10.482 millones. Sumados dan esa diferencia de 12% real frente a lo que recaudó el Imesi a combustibles en 2021.

En el resto de las categorías del Imesi, hubo alza en los ingresos por ese tributo a las bebidas (+2,1%) y caída en las otras: automotores (-6,5%), tabaco y cigarrillos (-4,6%) y el resto de productos gravados (-7,3%). El Imesi representó el 9,1% de la recaudación total de la DGI en 2022.

Por los impuestos a la renta ingresaron $ 211.760 millones (US$ 5.149,1 millones) a las arcas de la DGI durante 2022, con una suba en términos reales de 5,6% frente al año previo, y representando el 36,2% de la recaudación del fisco.

Esa mayor recaudación se explicó por todos los impuestos a la renta.

El Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE, que pagan las empresas) recaudó $ 80.671 millones (US$ 1.961,6 millones), un 4,8% más en términos reales que en 2021. El IRAE explicó el 13,8% de los ingresos del organismo en 2022.

En tanto, el tributo que grava las enajenaciones de bienes agropecuarios (Imeba), tuvo un alza de 2,6% en sus ingresos con un total de $ 3.386 millones (US$ 82,3 millones), el 0,6% del total.

En cuanto a la renta personal, el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) aumentó 6,3% sus ingresos en términos reales para totalizar $ 102.098 millones (US$ 2.482,6 millones) en 2022. Este tributo fue el segundo en importancia recaudatoria para la DGI, ya que representó el 17,5% de los ingresos.

Dentro del IRPF, la categoría I (rentas del capital) tuvo una recaudación 16,2% superior que en 2021 con un total de $ 17.787 millones (US$ 432,5 millones). El IRPF categoría II (rentas del trabajo) elevó 4,4% sus ingresos hasta $ 84.311 millones (US$ 2.050,1 millones). Mientras el IRPF por rentas del trabajo explicó $ 14,40 de cada $ 100 recaudados por la DGI, el IRPF por rentas del capital supuso $ 3 por cada $ 100.

Los ingresos por el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS) crecieron apenas 0,7% en 2022 para un total de $ 14.893 millones (US$ 362,1 millones). El IASS que paga el 20% de jubilaciones más altas explicó $ 2,50 de cada $ 100 que ingresaron a la DGI. El último impuesto a la renta es el que se cobra a los no residentes (IRNR), que embolsó $ 10.712 millones (US$ 260,5 millones) millones en 2022, un 19,5% más en términos reales que en 2021. El tributo representó 1,8% de la recaudación total.

Por su parte, los ingresos por impuestos a la propiedad fueron los que menor aumento de la recaudación tuvieron en 2022 respecto a 2021: 4,8%. Los ingresos por estos tributos alcanzaron a $ 36.121 millones (US$ 878,3 millones), el 6,2% del total.

La mayor parte correspondió al Impuesto al Patrimonio que recaudó 4,4% más en términos reales, para totalizar $ 28.363 millones (US$ 689,7 millones, el 4,9% del total de ingresos de la DGI).

El Impuesto de Primaria embolsó 1,2% más en 2022 para un total de $ 4.208 millones (US$ 102,3 millones).

El Impuesto a las Transmisiones Patrimoniales tuvo 13,7% más ingresos que en 2021 para un total de $ 3.551 millones (US$ 86,3 millones).

En tanto, por otros impuestos (incluye adicionales de Imeba, Impuesto a los Ingresos de las Entidades Aseguradoras, Fondo de Inspección Sanitaria, Detracciones a la Exportación) la DGI recaudó $ 4.773 millones (US$ 116,1 millones) en 2022, un 2,5% más real que en 2021. Estos impuestos apenas explicaron $ 0,80 de cada $ 100 que recaudó el organismo.

Por su parte, por multas, recargos y convenios de financiación de deudas tributarias la DGI tuvo 24,1% más ingresos para un total de $ 5.050 millones (US$ 122,8 millones). Las multas, recargos y convenios explicaron 0,9% de los ingresos del organismo.

Del otro lado, la DGI desembolsó por certificados y devoluciones de impuestos 22,8% más en términos reales que en 2021, para un total de $ 80.042 millones (US$ 1.946,3 millones). En 2022 la DGI devolvió $ 13,70 por cada $ 100 que recaudó.

El organismo aclaró que en todos los casos, las cifras son “preliminares y pueden diferir” de las publicadas luego en las series de datos.