Redacción El País
Brasil es uno de los motores externos de la economía uruguaya, ya que el país vecino es el segundo destino en exportaciones de bienes, es uno de los principales orígenes de inversiones y también de los turistas que arriban a Uruguay. Pero, el problema es que ese motor no está a toda potencia y además Brasil está "barato" para los uruguayos, lo que genera efectos negativos a la economía del país.
En el Monitor de Coyuntura del Observatorio de la Coyuntura Económica de la Universidad Católica (UCU), que lidera Javier de Haedo se enfocó en el vecino: "Brasil, que crece poco y está barato, no empuja a la economía uruguaya", se tituló.
"Brasil mantiene una situación estable en los últimos años, con relación a nuestro país: está claramente más barato y además crece poco, por lo que no tracciona a la actividad económica en Uruguay. Al costo de tasas de interés muy altas, la inflación viene cediendo, pero eso tiene un impacto claro sobre la producción", analizó el documento.
El monitor señaló que "más allá de que los ojos de los uruguayos suelen estar posados sobre la realidad argentina (no sólo en materia económica y política), también deben atender a la realidad de nuestro otro gran vecino, Brasil".
"Es claro que el turismo de ida y vuelta es decisivo en la relación con Argentina, pero también lo es que en materia de comercio exterior la mayor importancia (junto a China) la tiene Brasil", agregó.
"Viene al caso entonces repasar la situación de los principales indicadores de nuestro vecino norteño", planteó De Haedo.
"El IBC Br, equivalente a nuestro IMAE (Índice Mensual de Actividad Económica), creció 3,2% interanual entre los segundos trimestres de 2024 y 2025, y sólo 0,3% en términos desestacionalizados entre el primero y el segundo de este año. En los últimos cinco y más años el Producto Interno Bruto (PIB) creció a una tasa media del 2%, una magnitud parecida a la esperada para 2025 (2,2%) y 2026 (1,9%). Mientras tanto, la tasa de desempleo se ubicó en 5,8% en el segundo trimestre", recordó el reporte.
"Con una meta de inflación de 3% (con una tolerancia de más y menos 1,5%), los precios crecen por encima de ese rango. En los últimos 12 meses a julio el IPCA creció 5,23% mientras que la inflación subyacente, que excluye ítems con precios muy volátiles, alcanzó a 5,25%", expresó el informe.
"No obstante, las expectativas apuntan a algo menos de inflación: 4,9% en este año y 4,3% en el próximo. En este contexto, la tasa de interés de la política monetaria (Selic) se mantiene muy alta. Dicha tasa se ubica en 15% y se espera que al final del año próximo apenas baje hasta el 12,5%", agregó.
Respecto al tipo de cambio, De Haedo analizó que "el dólar ha oscilado en agosto en torno a 5,45 reales, después de haber promediado diciembre pasado en 6,10 reales. Las expectativas apuntan a que cerrará este año en 5,59 reales y el próximo en 5,64 reales".
"En el mes de agosto, el tipo de cambio real bilateral de Uruguay con Brasil se ubica 37% por debajo del promedio en lo que ha transcurrido del presente siglo", afirmó.
Por último, sobre la situación fiscal del vecino, el monitor expresó que "las finanzas públicas han seguido mejorando en la primera mitad del año, alcanzándose un leve superávit primario (0,15% del PIB) mientras que los intereses nominales sumaron 7,45% del PIB, en ambos casos en los últimos 12 meses. Mientras tanto, la deuda bruta del Gobierno General se ubicó en 76,6% del PIB en los 12 meses a junio, un nivel similar al de diciembre pasado".
-
¿Cómo se comportó el poder de compra de los salarios de los uruguayos durante el último mes?
Productores de Conaprole denuncian que tuvieron que tirar más de 9.000 litros de leche y 95.000 litros de suero
BPS emitió un comunicado acerca del pago de sus prestaciones para jubilados en setiembre de 2025