Sombrío panorama para la izquierda radical española y para la reelección de Pedro Sánchez

El resultado en los comicios del domingo pasado fue “muy malo para el conjunto de la izquierda a la izquierda” del Partido Socialista (PSOE).

Pedro Sánchez, primer ministro español
Pedro Sánchez, primer ministro español.
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La debacle de Podemos y otros partidos de izquierda radical en las municipales y regionales españolas los deja golpeados para las elecciones generales del 23 de julioy aleja al socialista Pedro Sánchez de la posibilidad de reeditar su gobierno de coalición.

El resultado en los comicios del domingo pasado fue “muy malo para el conjunto de la izquierda a la izquierda” del Partido Socialista (PSOE) de Sánchez, resumió a la AFP Antón Losada, profesor de Ciencia Política de la Universidad de Santiago de Compostela.

Podemos, socio de los socialistas en el gobierno, se desplomó en las municipales y desapareció en varias regiones, entre ellas Madrid y Valencia, tercera y cuarta región del país por población.

Tampoco fue una buena jornada para la esperanza electoral de ese espacio, Yolanda Díaz, número tres del gobierno. Pese a no haber estado en ninguna papeleta, hizo campaña por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el alcalde de Valencia, Joan Ribó, y ambos cayeron derrotados.

Para Lluís Orriols, politólogo de la Universidad Carlos III de Madrid, el domingo pasado constituyó la “fotografía final” del “fracaso” de una izquierda que no logró en los últimos años conformar un proyecto unido que ilusionara a sus votantes.

Podemos, partido surgido a partir del movimiento de los Indignados y que llegó a ser tercera fuerza política en 2015, emocionó a sus seguidores al entrar al gobierno en 2020 con los socialistas.

Un logro que se fue desdibujando en los últimos tiempos con fracasos electorales y legislativos, con polémicos proyectos que abanderó como la llamada ley del “solo sí es sí”, que buscaba reforzar la protección ante agresiones sexuales, pero paradójicamente produjo reducciones de penas de condenados por violencia sexual.

El fracaso de los partidos a su izquierda es una mala noticia para Pedro Sánchez. Los socialistas perdiendo a manos de la derecha seis de las diez regiones en disputa que gobernaban (en solitario o coalición), y retrocediendo en 400.000 votos a nivel nacional en las municipales (obtuvieron 6,3 millones frente a los 6,7 millones en 2019).

Con las encuestas sugiriendo que el 23 de julio ganará la derecha, con la duda de si logrará junto a la extrema derecha de Vox una mayoría absoluta para gobernar, Sánchez necesita que la izquierda radical consiga un buen resultado para reeditar su coalición.

“Para que la izquierda (en su conjunto) tenga un buen resultado, es obvio que tiene que haber una izquierda unida a la izquierda del partido Socialista”, señaló Oriol Bartomeus, politólogo de la Universidad Autónoma de Barcelona.

“Sálvese quien pueda”

Consciente de que el sistema electoral español premia la concentración del voto, Yolanda Díaz lucha contra reloj para unificar su espacio Sumar, pero tiene hasta el 9 de junio, fecha tope para registrarse.

El principal escollo es el encaje con Podemos, que hasta ahora había exigido un papel destacado. Pero su pésimo resultado en las municipales y regionales puede haberlos suavizado. “Tenemos que asumir el resultado. Toca ser humildes”, concedió el lunes Pablo Iglesias, líder histórico de Podemos que dejó la política pero sigue siendo la voz más influyente dentro del partido.

Aunque logren ir unidos, la pregunta es si este “acuerdo de última hora” producirá “una plataforma atractiva, que capte la atención”, dijo Lluís Orriols. “Perdieron el tiempo durante dos años”, y “ahora mismo es un sálvese quien pueda ya”, agregó.

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