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El juicio político contra Donald Trump divide a Estados Unidos

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El presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, tomó juramento a los 100 senadores que ejercen de miembros del jurado. Foto: AFP

EL TERCERO EN LA HISTORIA DEL PAÍS

Los senadores juraron y quedó abierto el tercer juicio político a un presidente de EE.UU. Pero, a partir del martes comenzará el “proceso”.

El juicio político contra Donald Trump ha arrancado ayer jueves en el Senado de Estados Unidos con nuevas pruebas contra el presidente. El organismo de control del Gobierno, una agencia independiente dentro de la Administración, ha presentado un informe en el que asegura que la oficina presupuestaria de la Casa Blanca violó la ley al retener los fondos destinados a reforzar la seguridad en Ucrania. Esta partida está en el centro del impeachment contra Trump por abuso de poder al condicionar el desembolso de estas ayudas a una investigación de Kiev a las actividades del potencial candidato demócrata a la presidencia, Joe Biden, y su hijo en aquel país.

La oficina, que depende del Congreso, asegura que la decisión deretener los fondos tuvo carácter político, no técnico. “El cumplimiento de la ley de buena fe no permite al presidente cambiar sus prioridades políticas por aquellas que el Congreso haya convertido en ley”, sostiene el texto, hecho público precisamente el mismo día en el que la Cámara alta se convierte en un tribunal. El presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, tomó juramento a los 100 senadores que ejercen de miembros del jurado.

Este juicio político, el tercero en la historia de Estados Unidos, llega a punto de cumplirse tres años de una Administración instalada en la tormenta y con la sociedad partida por la mitad.

El equipo de fiscales nombrado el miércoles por la Cámara de Representantes, siete congresistas demócratas, se presentó sobre el mediodía en el Senado (las 14:00 horas de Uruguay) para leer en voz alta formalmente la acusación contra Trump, los llamados artículos del impeachment. Después entró en escena Roberts, que tomó juramento a los senadores para que administren una “justicia imparcial”.

¿Imparcial? ¿Es eso posible?

El líder de los republicanos en la Cámara alta, Mitch McConnell, ya advirtió hace semanas que estaba coordinando los detalles del proceso con la propia Casa Blanca. McConnell ha sido muy crítico con la acusación a Trump por parte de la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, y prometió que la situación será diferente en el Senado.

“Fue una evidente actuación partidista de principio a fin”, sostuvo McConnell. “Pero el proceso será diferente. El momento de la Cámara de Representantes ha terminado. Es la hora del Senado”.

Ayer, el sargento de armas del Senado, Michael Stenger, abrió el tercer juicio político a un presidente en la historia con una advertencia a los 100 senadores. “Todas las personas tienen orden de guardar silencio, so pena de prisión, mientras que la Cámara de Representantes presenta al Senado de Estados Unidos los cargos contra Donald John Trump, presidente de Estados Unidos”, afirmó Stenger.

Activistas protestan contra Trump en el Capitolio. Foto: Reuters
Activistas protestan contra Trump en el Capitolio. Foto: Reuters

Después de cumplir ayer con el juramento de los senadores y la lectura de las acusaciones, se abre un paréntesis hasta el próximo martes, a las 15:00 horas de Uruguay, cuando el Senado “comenzará de veras el juicio”, indicó el senador McConnell.

Este será el primer impeachment de la era Twitter, también el primero que juzga a un presidente que busca la reelección y que bloqueará durante semanas a cuatro senadores que luchan en unas primarias. También, el más partidista de los llevados a cabo hasta ahora.

Hasta ahora, los demócratas carecen de los 67 votos necesarios para destituir a Trump.

El abogado de la Casa Blanca, Pat Cipollone, encabezará la defensa del presidente en el juicio, si bien el equipo completo no ha sido anunciado.

Trump se declara víctima de una “caza de brujas” de un “fraude” por parte de los demócratas, y sostiene que sus peticiones al propio presidente ucranio, Volodímir Zelenski, para que anunciase investigaciones que perjudicarían a los demócratas “no tenían nada de malo”, sino puro interés en contra de la corrupción.

El papel de su abogado personal, Rudy Giuliani, maniobrando con Kiev y usando una invitación a la Casa Blanca, como mecanismo de presión, cuestionan la versión del mandatario. Además, el embajador estadounidense ante la Unión Europea, Gordon Sondland, que también se vio implicado en las gestiones con Ucrania, declaró en la fase previa en la Cámara de Representantes que él mismo consideró las ayudas militares supeditadas al anuncio de esa investigación.

El proceso de juicio político entra en su fase final después de aparecer nuevas pruebas aportadas por Lev Parnas, un socio de Giuliani imputado. Ayer jueves, en una entrevista a The New York Times, Parnas aseguró que el presidente Trump conocía las presiones de Giuliani. “Me juego toda mi vida a que Trump sabía exactamente todo lo que estaba pasando sobre lo que Rudy Giuliani estaba haciendo en Ucrania”, dijo Parnas.

Donald Trump. Foto: AFP
Donald Trump. Foto: AFP

Cada detalle del juicio es un motivo de discusión

Todos los detalles del juicio político son motivo de enfrentamiento y polémica entre los legisladores demócratas y republicanos. Un punto de fuerte discusión es si se permitirán nuevos testimonios. El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, quiere se que se cite a declarar al secretario de la Presidencia, Mick Mulvaney, y al exasesor de Seguridad Nacional, John Bolton, entre otros, porque son protagonistas de la retención de la ayuda militar a Ucrania y sus declaraciones, por tanto, resultan relevantes. Schumer sostiene que Donald Trump no quiere que los funcionarios declaren porque sabe que es culpable. Pero, el líder republicano, Mitch McConnell apunta que los demócratas piden nuevos testimonios, debido a que “saben que el juicio no tiene fundamento. Es el primer juicio sin un acusación verdadera”.

OFENSIVA POLÍTICA
Nancy Pelosi, este jueves en rueda de prensa. Foto: AFP

Nancy Pelosi contra Trump

“Es tan triste y trágico para nuestro país, que las acciones tomadas por el presidente oara socavar la seguridad nacional, violar su juramento y poner en peligro la seguridad de nuestras elecciones, no han llevado a esto”, señaló Nancy Pelosi, quien encabeza la ofensiva del Partido Demócfrata contra el presidente Donald Trump. La legisladora demoró casi un mes en presentar los artículos con las acusaciones ante el Senado.

Dos acusaciones contra el presidente estadounidense.

Los siete diputados designados por Nancy Pelosi para oficiar de “fiscales” en el juicio político presentaron los cargos contra Donald Trump por abuso de poder y obstrucción al Congreso. ¿Cuáles son los fundamentos? La Cámara de Representantes, con los votos demócratas, acusa a Trump de abuso de poder porque Trump condicionó y retuvo la ayuda militar por 400 millones de dólares a Ucrania y la programación de una reunión con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, a que el gobierno de Kiev anunciara públicamente una investigación sobre Joe Biden -su posible rival demócrata en las elecciones presidenciales de noviembre de este año- y su hijo Hunter por supuestos actos de corrupción.

Congreso de Estados Unidos. Foto: AFP
Congreso de Estados Unidos. Foto: AFP

La obstrucción al Congreso, surge del hecho de que Trump impidió que varios funcionarios jerárquicos del gobierno concurrieran a declarar a las comisiones investigadoras y se negara a entregar documentos a los legisladores.

El presidente ha lanzado duras críticas contra los demócratas y difundió la transcripción de la conversación telefónica que sostuvo con su par Zelenski, a la que califica de perfecta.

“Aquí vamos de nuevo, con otra estafa hecha por demócratas que no hace nada”, ratificó ayer en su cuenta de Twitter.

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