Redacción El País
El presidente Donald Trump dijo ayer viernes que “mucha gente se muere de hambre” en la Franja de Gaza, y agregó que Estados Unidos quería ayudar a aliviar el sufrimiento. “Vamos a abordar un par de situaciones que tienen aquí”, dijo Trump en los Emiratos Árabes Unidos, en la última escala de su visita a tres países del Golfo Pérsico esta semana. “Estamos analizando Gaza y tenemos que solucionarlo. Mucha gente se está muriendo de hambre. Mucha gente. Están sucediendo muchas cosas malas”.
Los grupos de ayuda han advertido durante semanas que la población de Gaza está al borde de la hambruna, y algunos funcionarios militares israelíes han comenzado a expresar en privado sus preocupaciones por el riesgo de hambruna en el territorio, 19 meses después de que comenzara la guerra.
Además del asedio total que ha impuesto a Gaza durante más de dos meses, Israel ha intensificado su campaña militar en los últimos días. Los ataques de ayer viernes causaron la muerte de más de 100 personas, según el Ministerio de Salud de Gaza
La administración Trump había guardado silencio durante mucho tiempo sobre la conducción de la guerra de Israel en Gaza.
Los líderes árabes del Golfo que se reunieron con Trump durante su viaje a la región esta semana aprovecharon la oportunidad para abordar esa postura tras lograr un cambio notable en la situación en Siria, cuando el presidente anunció el primer día de la visita que levantaría las sanciones contra ese país.
Trump salió de su viaje a Medio Oriente con un tono más comprensivo hacia Gaza, un cambio notable dada su estrecha relación de larga data con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Al abordar el Air Force One ayer viernes, Trump declaró a la prensa que Estados Unidos debe tomar medidas en la crisis de Gaza. Regresaba de su primera gran visita de Estado de su segundo mandato, que lo llevó a Qatar, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos.
“Creo que sucederán muchas cosas buenas durante el próximo mes”, dijo Trump. “También tenemos que ayudar a los palestinos”, añadió, señalando que Estados Unidos analizaría ambos lados del asunto. “Haremos un buen trabajo”, afirmó.
Trump, quien fue recibido con efusivas bienvenidas durante toda su visita, disfrutó de fuertes aplausos e incluso una ovación de pie en algunos momentos de su primer discurso en Riad, Arabia Saudita, donde se dirigió a una reunión de líderes empresariales.
El único momento en que su discurso fue recibido con un absoluto silencio fue cuando expresó un “ferviente deseo” de que Arabia Saudita se una a los Acuerdos de Abraham, el acuerdo de 2020 en el que dos de sus vecinos establecieron relaciones diplomáticas con Israel. The New York Times