Redacción El País
El ministro de Economía argentino, Luis Caputo, anunció ayer un paquete de medidas de “urgencia” para estabilizar la economía. Incluyen una fuerte corrección del tipo de cambio oficial, que pasará de 400 pesos a 800; recortes en el gasto público; disminución de las transferencias a las provincias; paralización de la obra pública -salvo las que están en marcha-; disminución de subsidios al transporte y a la energía y un refuerzo de la ayuda social.

“Vamos a estar durante unos meses peor que antes, particularmente en términos de inflación”, se sinceró el ministro al final del anuncio, que fue grabado y se emitió en el canal de YouTube del Ministerio de Economía.

Caputo comenzó con un duro diagnóstico, en línea con el que hizo el presidente Javier Milei en su discurso de asunción el domingo. “Estamos frente a la peor herencia de nuestra historia, un país en el que somos cada vez más pobres”, dijo. En el video, Caputo está sentado en su escritorio. De momentos, suena una sirena de fondo y se escuchan otros ruidos de ambiente. “Venimos a solucionar este problema de raíz, justamente para no tener que padecer más esas consecuencias. Para no padecer la inflación y la pobreza”, agregó.

Sobre por qué no se está pudiendo frenar la suba de precios, expresó: “En la Argentina se gasta más de lo que se recauda. Funciona igual que en sus casas, si el país tiene que gastar más de lo que recauda, le pide al FMI, a los bancos o al Banco Central. Financiar ese déficit con deuda genera problemas financieros; si se financia con emisión del Banco Central, el valor del peso cae”.

Para justificar el fuerte ajuste que anunciaría a continuación, explicó: “Si uno le preguntara a los argentinos cuál es el mayor problema, siempre se lo llevaba la deuda, la inflación y el dólar. Casi ninguna respuesta respondía el déficit fiscal. La génesis de nuestro problema siempre ha sido fiscal”.

Foto: Archivo El País

El eje central del mensaje fue la devaluación, que lleva el dólar oficial de los 400 pesos del exministro de Economía Sergio Massa a 800.

“El tipo de cambio oficial va a pasar a valer 800 pesos para que los sectores productivos tengan los incentivos adecuados para aumentar la producción”, dijo Caputo. Lo ató a “un aumento provisorio del impuesto País a las importaciones y a las retenciones de las exportaciones no agropecuarias”.

Sobre ese impuesto, advirtió: “Finalizada la emergencia, vamos a avanzar en la eliminación de todos los derechos de exportación, que consideramos un gravamen perverso que entorpece el desarrollo argentino”.

La mayoría de las medidas apuntan al recorte del gasto público. Por ejemplo, la suspensión de la pauta publicitaria por un año. El ministro señaló que se gastaron 34 mil millones de pesos en publicidad en un solo año.

También remarcó la reducción de los ministerios, que pasaron de ser 18 en el anterior gobierno a 9; y las secretarías de Estado, que pasaron de 106 a 54. “Esto va a redundar en una reducción de más del 50% del gasto de la función pública”, enfatizó. En la misma línea, anunció que no se renovarán los contratos con el Estado que tengan menos de un año de vigencia. Según Caputo, esta medida busca evitar la práctica de incorporar familiares y amigos antes de un cambio de gobierno “para mantener privilegios”.

También habrá una disminución “al mínimo” de las transferencias discrecionales del Estado Nacional a las provincias. Son “recursos que, lamentablemente, en nuestra historia reciente, se han usado como moneda de cambio para intercambiar favores políticos, para hacer política”, expresó.

Otra medida cantada era la relativa a la obra pública. No solo no se licitarán más sino que se cancelarán los contratos de las que aún no hayan comenzado. “La realidad es que no hay plata para pagar más obra pública que, como todos los argentinos sabemos, muchas veces termina en los bolsillos de los políticos o de los empresarios de turno”, justificó.

Por otro lado, habrá una “reducción” a los subsidios del transporte y la energía. El ministro consideró que, con estas subvenciones, los gobiernos “engañan a la gente haciéndoles creer que le ponen plata en el bolsillo”, pero dijo que “estos subsidios no son gratis, sino que se pagan con inflación”.

Para explicarlo, ilustró: “Lo que te regalan en los precios del boleto, te lo cobran con aumentos en el supermercado. Y con esta inflación, son los pobres los que terminan financiando a los ricos”.

Por otro lado, tal como había anticipado el presidente Javier Milei en campaña, el titular de Hacienda dijo que se eliminarán los intermediarios entre el Estado y los beneficiarios de los planes y políticas sociales, es decir, las organizaciones sociales y los sindicatos.

“Vamos a mantener los planes Potenciar Trabajo de acuerdo a lo establecido en el Presupuesto del 2023. Y vamos, sobre todo, a fortalecer las políticas sociales que son recibidas directamente por quienes la necesitan, sin intermediarios, como la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Tarjeta Alimentar”. En esa línea, agregó que se duplicará la AUH y se reforzará en un 50% la Tarjeta Alimentar. “Por esta situación de emergencia que vamos a vivir, el presidente nos ha pedido que pongamos el foco fundamental en la gente que más puede sufrirlo”, sostuvo.

También le habló a los importadores. Dijo que reemplazarán “el sistema SIRA de importaciones por un sistema estadístico y de información que no requerirá de la aprobación de licencias”. El SIRA, implementado en el gobierno del expresidente Alberto Fernández, es una barrera que regula la entrada de importaciones. “El que quiera importar, podrá hacerlo y punto”, dijo Caputo.

“De algo podemos estar seguros y es que este es el camino correcto. Si seguimos por el otro camino inevitablemente vamos a ir a un escenario de mucha mayor pobreza, mayor inflación y mayor sufrimiento”, concluyó el ministro.

La expectativa del día por el anuncio se transformó en incertidumbre cuando la emisión del mensaje empezó a retrasarse. Se preveía que el mensaje fuera emitido a las 17:00. Pasado el horario establecido, comenzaron a circular algunas versiones que adjudicaban la demora a una regrabación del mensaje. Finalmente, se emitió el video a las 19:00. (Con información de La Nación)

Foto: EFE

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, calificó en X de “paso importante hacia la restauración de la estabilidad” en Argentina las medidas de austeridad anunciadas por el gobierno. Asimismo, el personal técnico del FMI también expresó su apoyo. “Estas fuertes acciones iniciales apuntan a mejorar significativamente las finanzas públicas de una manera que proteja a los más vulnerables de la sociedad y a fortalecer el régimen cambiario”, indicó en una declaración la directora de Comunicaciones, Julie Kozack. “Su aplicación decidida contribuirá a estabilizar la economía y a sentar las bases de un crecimiento más sostenible y liderado por el sector privado”, añadió la portavoz en su mensaje escrito en español y en inglés.

Kozack recalcó que “el personal del FMI y las nuevas autoridades argentinas trabajarán con celeridad en el período que se avecina”.