AFP, EFE
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, tenía la llave para el ingreso de Suecia a la OTAN. Pero el mandatario turno primero quería que la Unión Europea le abriera la puerta a su país. Es decir: levantaba el veto al ingreso de Suecia a la OTAN, si la UE aceleraba el proceso para el ingreso de Turquía, un asunto al que el bloque comunitario le estaba dando larga.

El acuerdo llegó ayer lunes, un día antes del inicio de la cumbre de la OTAN en Vilna, la capital de Lituania, que ahora se centrará en enviar un fuerte mensaje de apoyo a Ucrania frente a la invasión rusa y, como espera Volodimir Zelenzki, la prometa de que también ingresará a la Alianza Atlántica una vez terminada la guerra.

El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, dijo que el acuerdo con Turquía implica que Erdogan enviará el Protocolo de Adhesión de Suecia al parlamento turco para su ratificación, y que se asegurará de que sea aprobado.

Erdogan mantuvo este lunes una reunión con Stoltenberg y el primer ministro de Suecia, Ulf Kistersson, y luego con el titular del Consejo Europeo, Charles Michel.

Al final de esa reunión, Michel anunció que había discutido con Erdogan formas de “revitalizar” las relaciones entre la UE y Turquía. “Exploramos las oportunidades que tenemos por delante para volver a poner en primer plano la cooperación UE-Turquía y revitalizar nuestras relaciones”, resumió Michel en su perfil oficial en Twitter.

Turquía presentó su candidatura para sumarse a la UE en 1987, y fue considerado elegible en 1999, aunque en la última década no se registró prácticamente ningún avance en ese sentido.

“Abran primero la vía a la adhesión de Turquía a la Unión Europea y después abriremos la vía a Suecia, como abrimos la vía a Finlandia”, declaró el mandatario turco antes de embarcar en un vuelo hacia Vilna.

El jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, criticó inmediatamente esta condición y aseguró que la candidatura de Turquía al bloque europeo “no está relacionada” con la adhesión de Suecia a la OTAN.

Anadolu, la agencia oficial de noticias turca, afirmó luego de que se anunciara el acuerdo para el ingreso de Suecia a la OTAN que Turquía había recibido “pleno apoyo” para sumarse a la UE.

Según este medio, que basa su información en declaraciones de “un alto funcionario turco”, el presidente Erdogan habría recibido dicho apoyo en la reunión trilateral que mantuvo con el primer ministro sueco y el secretario general de la OTAN.

Anadolu da a entender que Erdogan recibió una respuesta positiva a la aspiración turca de que la UE liberalice el régimen de visados para los ciudadanos turcos.

Especialmente Suecia habría prometido apoyar activamente las negociaciones de adhesión de Turquía, la reactivación de la Unión Aduanera con ese país y la liberalización de visados.

Suecia y Finlandia cambiaron la posición de neutralidad que habían mantenido durante tres décadas y, tras la invasión rusa a Ucrania el 24 de febrero de 2022, solicitaron su ingreso en la OTAN. Finlandia se convirtió en el miembro número 31 en abril de 2023.

Pero Turquía había bloqueado hasta ahora la adhesión de Suecia por considerar que el país nórdico tiene una postura demasiado laxa con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), una guerrilla que inició en 1984 una lucha armada contra el Estado turco y que está considerada como un grupo terrorista por Turquía, Suecia, la Unión Europea y Estados Unidos.

Aunque Suecia ha reformado su legislación antiterrorista, la resistencia turca no había cesado y las últimas declaraciones no hacían esperar que las negociaciones prosperaran.

Sobre Hungría, que tampoco ha ratificado aún la entrada de Suecia a la OTAN, Stoltenberg recordó que el gobierno húngaro había asegurado que no sería el último en dar luz verde al país nórdico.

AFP

La cumbre de la OTAN de hoy martes y mañana miércoles tendrá como asunto central la delicada relación de la alianza militar transatlántica con Ucrania.

Sobre la adhesión de Ucrania a la alianza militar, la OTAN levantará un importante obstáculo en el proceso: el requisito del llamado Plan de Acción para la Adhesión (Membership Action Plan, MAP), un dispositivo que establece una serie de objetivos de reformas.

El ingreso a corto plazo parece, no obstante, descartado.

“No creo que (Ucrania) esté lista para formar parte de la OTAN”, afirmó el presidente estadounidense, Joe Biden, a la cadena CNN, añadiendo que tampoco había unanimidad entre los aliados sobre la integración de Ucrania “en medio de una guerra”. “Estaríamos en guerra con Rusia si ese fuera el caso”, advirtió.

El gobierno ruso considera que el ingreso de Ucrania en la alianza sería “muy negativo” para la seguridad en Europa.

Para contrarrestar esta posición y mostrar su apoyo, varios pesos pesados de la OTAN negocian suministrar armas a largo plazo a Ucrania, máxime cuando las fuerzas ucranianas lanzaron en junio una contraofensiva para recuperar zonas ocupadas por Rusia, pero avanzan lentamente.

Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022, el país ha recibido decenas de miles de millones de dólares en equipamiento militar.

Estados Unidos prometió el viernes el envío de las polémicas bombas de racimo. Estas armas, prohibidas en muchos países, matan indiscriminadamente al dispersar pequeñas cargas explosivas, y pueden causar numerosas víctimas civiles colaterales.