SEGURIDAD SOCIAL

Uno de los argumentos frecuentes de las delegaciones que visitan el Parlamento para plantear críticas y reparos a la reforma previsional consiste en exponer proyecciones propias. Y muchas de estas muestran un descenso en el monto de las jubilaciones bajo el régimen que propone el gobierno, en comparación con el sistema vigente.

Lo han sostenido los representantes de los trabajadores en el directorio del Banco de Previsión Social (BPS), de esto se ha hecho eco el Frente Amplio, y ahora fue el turno de la delegación de la Caja de Jubilaciones y Pensiones Bancarias que asistió este miércoles a la comisión especial del Senado para brindar su punto de vista.

Allí, tal como expuso el contador Luis Camacho, que presentó un informe titulado “Análisis del equilibrio financiero individual”, se afirmó que la iniciativa planteada por el Poder Ejecutivo provocaría una “pérdida” en las jubilaciones del sector “con relación a las del régimen vigente”.

Los números presentados por esta delegación, no obstante, fueron escuchados con cierto recelo por parte del oficialismo, porque se entiende que se dieron a conocer “cálculos complicados y antojadizos” que deben tomarse “con muchas pinzas”, por lo que la bancada del Partido Nacional ya puso manos a la obra para volver a invitar a representantes del gobierno con el fin de que se dé una respuesta enfocada “en las cajas paraestatales”, señalaron a El País fuentes políticas.

El cálculo de los bancarios determina que habría una “significativa” reducción de las jubilaciones que recibirían estos profesionales al momento de retirarse, “que irían del 48% al 81% para el caso del reconocimiento de 30 años de actividad”, dijo Camacho, que exclamó: “¡Vean la magnitud de pérdida que se produciría!”.

El contador agregó, tal como consta en la versión taquigráfica de la sesión a la que accedió El País, que “para salarios (considerados) inferiores la pérdida aumentaría al 56% por incidencia del mínimo jubilatorio del sistema bancario con relación el subsidio solidario correspondiente”. De hecho, también calificó de “significativo” el descenso de los ingresos en los “salarios bajos”, algo atribuido al “bajo efecto del suplemento solidario”, que es un mecanismo que figura en la iniciativa del Poder Ejecutivo por el cual se compensan aquellas jubilaciones de bajo rango.

“En segundo término -siguió el representante de la caja bancaria-, en los niveles intermedios salariales, la pérdida de los importes de jubilaciones del nuevo régimen es creciente a medida que aumenta el nivel de salarios. Por ejemplo, para 30 años de actividad reconocida, la pérdida va de un 37% a un 63%; para 35 años la pérdida va de un 35% a un 57%; y para 40 años de actividad reconocida, la pérdida bajaría de un 27% a un 48%”.

La situación es más evidente aún en los trabajadores del rubro que hoy cuentan con altos niveles salariales: allí también fueron calificadas como “muy significativas” las pérdidas calculadas por los bancarios.

“Para 30 años de actividad, hay una pérdida de valores absolutos mayor a $ 110.000 mensuales -o sea que las jubilaciones van a bajar más de $ 110.000-; con 35 años de actividad, la pérdida, en valores absolutos, va a ser de más de $ 100.000 mensuales. (...) Y con 40 años de actividad reconocida, habrá una pérdida absoluta de $ 85.000 aproximadamente”, aseguró Camacho, que como “conclusión” atribuyó como causa de estos cambios en perjuicio de los trabajadores a “la baja de las tasas de reemplazo y a que los parámetros para calcular los subsidios solidarios del sistema proyectado se ajustan de acuerdo a la variación de precios al consumo en lugar de hacerlo según el índice medio de salarios”.