Redacción El País
La Unión Nacional de Obreros y Trabajadores del Transporte (Unott) definió convocar a un paro general del transporte por 24 horas para el próximo viernes.
Los trabajadores de la Asociación de Trabajadores de Copsa (ATC) seguirán de paro también este jueves, una medida que iniciaron el pasado lunes de forma sorpresiva y que han ido extendiendo tras no poder solucionar el conflicto con la empresa.
Tras el pedido de un fideicomiso, la empresa prometió a los trabajadores efectuar un pago de lo adeudado el próximo viernes, pero, ante la falta de garantías, la Unott decidió aplicar una medida más drástica.
Así lo explicó en rueda de prensa el dirigente sindical de Copsa, Andrés Martínez, este miércoles, cuando indicó que la deuda a los trabajadores ronda los US$ 800.000.
"Hoy tiene que ser definitorio, tiene que terminarse esta odisea de adeudos con los trabajadores", expresó y dijo que, de no concretarse el paro, continuarán las movilizaciones y más paralizaciones podrían definirse para la próxima semana.
La medida implica una paralización tanto de ómnibus urbanos, como suburbanos e interdepartamentales. También afecta al servicio de taxis.
El conflicto con la empresa
En abril los trabajadores de Copsa habían parado luego de que la empresa informara que no podía pagar los sueldos de marzo.
Tras días de diálogo, llegaron a un acuerdo gracias a las negociaciones en paralelo entre la Dirección Nacional de Transporte y el Banco República, quienes acordaron otorgarle al sector un "préstamo puente" que a Copsa le permitirá "dar cumplimiento a todas las obligaciones salariales adeudadas" hasta ese momento, según indicó en rueda de prensa el gerente general de la empresa, Javier Cardozo.
"Las empresas hemos solicitado la constitución de un fideicomiso financiero, que lleva unos meses para su concreción, que es destinado a renovación de unidades, renovación de tecnología y cancelación de pasivos financieros", detalló
