LA NUEVA NORMALIDAD

Uruguay integra una selecta lista de 18 países que la Unión Europea conformó, para permitirles a sus viajeros ingresar al Viejo Continente. Es el único país del continente que, actualmente, tiene esa posibilidad. De hecho Estados Unidos está fuera de ese grupo, y en las Américas solo aparece Canadá en la lista de destinos que tienen las fronteras abiertas con la comunidad europea.

Este domingo el canciller Ernesto Talvi hizo referencia a la noticia y opinó que se trata de un "gran reconocimiento al extraordinario trabajo de control de la pandemia y a una labor de cooperación humanitaria que ha sido ejemplo en el mundo".

La lista está integrada -además de Uruguay- por Argelia, Australia, Canadá, Georgia, Japón, Montenegro, Marruecos, Nueva Zelanda, Ruanda, Serbia, Corea del Sur, Tailandia, Túnez, Andorra, San Marino, Mónaco y el Vaticano. Se suma China, pero solo si también abre sus fronteras a los viajeros de la Unión Europea. Esto se debe a que uno de los requisitos definidos por las autoridades europeas es la “reciprocidad”.

Así lo informó ayer el periódico New York Times, en base a fuentes oficiales de la Unión Europea en Bruselas.

Antes de elaborar esta lista, ¿nadie podía viajar hacia Europa? No, aunque ya algunos uruguayos entraron al Viejo Continente en los últimos meses, puesto que tienen residencia en algunos de esos países.

La diferencia actual, es que la Unión Europea decidió abrir sus fronteras con los países incluidos en la lista, con fines en general, incluyendo los turísticos. Por eso cualquier uruguayo que no tenga residencia en los países de la comunidad europea ahora sí puede viajar.

La decisión de las autoridades europeas se basa estrictamente en aspectos científicos. Por eso monitorean de forma permanente el combate al COVID-19 en este grupo de países, así como del resto para ampliar el número de destinos.

Incluso, los europeos manifestaron que de ver retrocesos en el combate al coronavirus, o rebrotes en algunos de los países que integran el selecto grupo, quitarán al país donde detecten complicaciones de la lista de fronteras abiertas.

El gobierno uruguayo insiste con que no se puede dar por ganada “la batalla” al virus, pero dentro del gabinete ministerial evalúan como más que positiva la evolución que ha tenido.

De todos modos el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, advirtió el lunes pasado que se observó un “afloje”. Por eso el jefe de Estado pidió mantener la “guardia alta” para evitar un rebrote generalizado del virus.

Hoy la atención está en Treinta y Tres. A pesar de eso el Poder Ejecutivo ya trabaja en los planes de contingencia para sobrepasar las consecuencias económicas y sociales que generó la pandemia del coronavirus en el país.

En ese sentido el turismo, así como las actividades de esparcimiento son dos de los puntos que el gobierno pretende impulsar -cumpliendo los protocolos- para activar el consumo interno.

Para las autoridades es vital generar nuevos puestos de trabajo. El viernes a la noche el ministro de Turismo, Germán Cardoso, presentó el protocolo de reactivación de la actividad turística, gastronómica y hotelera con piscina.

“Para los empresarios, este protocolo homologado no es difícil de aplicar y no implica una erogación de dinero que haga alguna diferencia”, dijo el ministro de Turismo en la conferencia que brindó en la Torre Ejecutiva.

Las definiciones del protocolo permiten generar un sistema que en el caso que se detecte un infectado por coronavirus, realizar la necesaria trazabilidad de contactos para evitar nuevos contagios. Todos los centros tendrán que tener a la venta u ofrecer gratis kits con tapabocas, alcohol en gel y en spray.

Los hoteles tendrán que establecer la declaración jurada con la firma del huésped, para así lograr saber si los posibles infectados estuvieron en contactos con terceros.

Si bien la Unión Europea ya abrió las fronteras para la llegada de visitantes uruguayos, el gobierno local aún no definió la apertura de fronteras para extranjeros.

El ministro Cardoso fue consultado por los medios de comunicación y aclaró que no está previsto que lleguen a Uruguay turistas en los vuelos provenientes de Europa, por el momento.

Sí el Poder Ejecutivo mantiene la decisión de que los vuelos habilitados para ingresar a territorio uruguayo sean los catalogados como “casos humanitarios”. Es decir que vengan ciudadanos uruguayos o extranjeros con residencia fiscal o legal en Uruguay, o que justifiquen el interés laboral o comercial.

“Eso no quita que estemos trabajando con las máximas autoridades de las compañías aéreas y aeroportuarias. Hay noticias auspiciosas, hoy la Unión Europea comunicó que con el único país de América Latina que tiene interés de mantener la conectividad aérea es con Uruguay. Es reflejo de cómo se transitó este camino de la pandemia”, declaró el ministro Cardoso.

El gobierno ya resolvió impulsar el desarrollo de complejos turísticos, como forma de potenciar el sector y generar fuentes laborales en la etapa de construcción. Para eso el ministro Cardoso informó que se impulsará un llamado a inversionistas.

En otra línea el equipo de asesores técnicos del Poder Ejecutivo, en conjunto con el Ministerio de Turismo resolvió analizar en setiembre cómo encarar la temporada de sol y playa, punto central de la economía uruguaya.