El oficialismo rechazó este miércoles en el Senado una planteo presentado por el Frente Amplio para que la cámara, en forma oficial, le pida al Poder Ejecutivo la adopción de una serie de medidas ante la reciente decisión de OSE alterar la mezcla con la que produce agua potable, lo que hizo incrementar el nivel de cloruro y sodio en el suministro en el área metropolitana.

Entre las propuestas estaba la entrega de vouchers equivalentes al valor de diez bidones de agua embotellada para todas las personas que sean beneficiarias de la Tarjeta Uruguay Social. También a todos los jubilados y pensionistas que perciban mensualmente menos de dos jubilaciones mínimas.

Al momento de presentarse la presidenta de la cámara, Beatriz Argimón, ordenó sin más trámite su derivación a la Comisión de Salud del Senado. Pero la bancada opositora reclamó su discusión inmediata. La vicepresidenta invocó allí el reglamento y advirtió que para eso se necesitaba una moción de orden, que no admitía discusión. La moción fracasó al obtener apenas 12 votos en 27 presentes. Pero la oposición forzó de todas formas el debate a través de la fundamentación.

El senador frenteamplista Eduardo Brenta sostuvo que las propuestas tenían la intención de "colaborar" ante una situación que perjudica a muchos ciudadanos, que "ni siquiera comprenden" la situación que afecta a gran parte del país o qué medidas de cuidado deben adoptar ante el aumento de la salinidad del agua, lamentando la falta de apoyo en el oficialismo.

La coordinadora de la bancada nacionalista, Graciela Bianchi, aclaró que el voto negativo no fue hacia el fondo del asunto. A su entender la declaración "grave y urgente"no correspondía por varios factores. En particular, porque el Poder Ejecutivo ya está tomando medidas. Por ejemplo, suministrar agua a las escuelas.

Bianchi mostró la postura de la coalición: se debe esperar a la próxima semana, cuando en el Senado sean interpelados por el tema los ministros de Salud Pública y de Ambiente. Más allá de no dudar de que las medidas propuestas por el Frente Amplio "tengan la mejor intención del mundo", la senadora señaló que votar la sesión este miércoles sería un ejercicio inútil de "gimnasia legislativa".

Su visión fue apoyada por su colega Sebastián Da Silva, en un tono un tanto más duro hacia la oposición. "No podemos hacer la de Moisés, les pidió a los frenteamplistas. "No podemos agrietar el agua y dividir en estas cosas", advirtió. Da Silva cuestionó a la oposición por "tratar de construir un relato catastrófico" sobre circunstancias que, reconoció, son muy delicadas. El senador llamó a esperar la interpelación de la próxima semana. "Allí discutiremos", prometió.

Jorge Gandini coincidió en la necesidad de esperar la postura de las autoridades, pero aceptó que la situación del agua potable en el área metropolitana es "grave y urgente". El senador admitió tener "muchas dudas" y sostuvo que la información disponible es "muy confusa". El objetivo de Gandini en la interpelación será saber si una situación que ya es complicada "qué tan complicada puede ser" en el futuro inmediato.

La moción del Frente Amplio incluía la exoneración de IVA e Imesi al agua embotellada en todas las presentaciones que provengan de fuentes naturales que no se abastezcan en las que OSE utiliza. También se le pedía al gobierno que analizara una "reducción significativa" en las tarifas de OSE a los usuarios del área afectada por el incremento en el nivel de sodio, y la realización de una campaña de bien público destinada a informar a la población sobre esta situación.

Los pronunciamientos del oficialismo generaron una catarata de reacciones en el Frente Amplio. "Si hay algo que amerite ser ´grave y urgente' es esto", señaló la senadora Amanda Della Ventura. "No sé su hubo antes otra urgencia como la que tenemos hoy".

Mario Bergara, en tanto, sostuvo que las medidas que propone su partido son razonables. "Los ministros vendrán a otra cosa", remarcó. "En todo caso, a explicarnos un montón de situaciones que no conocemos en profundidad". El legislador frenteamplista habló de allí de cierta "contradicción" en la comunicación que las autoridades hicieron sobre la situación y las decisiones que se están adoptando.

"No pasa tanto por la decisión de aumentar el nivel de sodio, sino del impacto y de cómo se ayuda a ciertos sectores a paliar la situación", dijo. Sobre todo, apuntó. en los sectores que "no tienen una Coca-Cola para dejar de tomar y salir a comprar agua embotellada". Bergara se refería a las polémicas expresiones realizadas este martes por la vicepresidenta de OSE, Susana Montaner.

A su turno, Liliam Kechichian se acordó de responderle a Bianchi. "Esto no tiene nada de gimnasia", expresó. La senadora aseguró que los planteos del Frente Amplio responden a "la voz de la gente, que en realidad está muy preocupada". Esperar una semana más a que llegue la interpelación en una situación como la que vive el país, dijo, es mucho. Kechichian admitió que tal vez pecó "de inocente" al pensar que las medidas propuestas irían a ser acompañadas por el oficialismo.

Sebastián Sabini habló por su parte de "alarma pública" y describió los "carritos llenos de bidones" de agua embotellada que se pueden ver en los supermercados ante la situación. Las medidas propuestas, aseguró, son urgentes. Sobre todo, dijo, para la gente de bajos recursos que no puede comprar agua y debe consumir la de OSE. Daniel Caggiani, en tanto, aludió a la falta de reflejos políticos de la coalición. "Cualquier legislador con reacción agarraba esto, le ponía tres o cuatro medidas más y lo votaba", reparó.

En el Partido Colorado, el senador Adrián Peña descartó las buenas intenciones del Frente Amplio, pero planteó sus dudas acerca de lo acertado de las medidas propuestas. "No sabemos si se necesitarán diez bidones o se necesitarán más, o de cuánto son los bidones", dijo. Tampoco, acotó, qué impacto tendrán las exoneraciones planteadas y cómo podrían condicionar el acceso al producto a determinados sectores.

"El valor del agua es muy alto, pero su precio es muy bajo", remarcó. Peña aludió allí al impacto que está teniendo la situación en los "números" de OSE, que ya viene condicionada por las medidas que hubo que tomar ante la sequía que afecta hace varios meses al país. "Esto se podría haber evitado cortando el agua, pero se habría generado un problema sanitario mucho peor al que tenemos hoy", señaló.

En Cabildo Abierto, Guillermo Domenech llamó a discutir la responsabilidad de los que -en alusión al Frente Amplio- tuvieron a su cargo la provisión y el suministro de agua. "Ahora no podemos salir a improvisar medidas para quedar bien con la gente", afirmó.

Domenech dijo dudar que exista la cantidad suficiente de agua embotellada para "repartir generosamente" y agregó que, de todas formas, sería un operativo muy difícil de instrumentar.