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El caso Andrade genera un “pase de facturas” en el FA que pega en la Intendencia de Canelones

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El intendente Yamandú Orsi escucha una conferencia de Daniel Martínez. Foto: Fernando Ponzetto (Archivo)
Cristina Lustemberg, Mario Bergara y Yamandu Orsi - Conferencia de Daniel Martinez y Graciela Villar, formula presidencial del Frente Amplio al balotaje de Elecciones Nacionales 2019, para presentar a Mujica y Astori dentro de su posible futuro gabinete de Ministros en caso de salir Presidente, en el Hotel Palladium de Montevideo, ND 20191107, foto Fernando Ponzetto - Archivo El Pais
Fernando Ponzetto/Archivo El Pais

PUJA DE PODER

En la interna frenteamplista entienden que la salida de Casaravilla fue por una “vieja disputa” entre el intendente Yamandú Orsi y el edil Yamandú Costa.

Yamandú Costa, que es adversario político de Yamandú Orsi, el único cargo que tenía dentro de la Intendencia de Canelones era el de Germán Casaravilla, cesado por contactarse con el senador comunista Óscar Andrade para negociar el pago de una deuda de contribución inmobiliaria. En la interna del Frente Amplio entienden que este cortocircuito está asociado a un viejo “pase de facturas” entre el intendente y el edil.

Si bien cada director cuando asume tiene firmada la carta de renuncia -es decir su lugar está a disposición del intendente- el caso de Casaravilla generó ruido a la interna del Frente Amplio, e idas y vueltas de comunicados con versiones contradictorias sobre lo sucedido.

El intendente explicó a Canal 12 que fue él quien le pidió la renuncia el pasado lunes al titular de la Agencia Tributaria, como informó El Observador. Casaravilla, en una nota que hizo pública ayer, dio otra versión al afirmar que el 4 de agosto y después de recibir una llamada de la directora de Recursos Financieros, Laura Tabárez, “en un tono inadecuado e impertinente” (tratándolo de desleal y poco profesional), decidió poner el cargo a disposición de Orsi y pedirle una reunión, que nunca fue concedida.

Al día siguiente, cuando Casaravilla se presentó a trabajar, le habían retirado sus claves del sistema de gestión de tributos sin darle ninguna explicación. “Me llama (Orsi) y me comunica que, ante un informe de funcionarios, elevado por la directora de Recursos Financieros, iba a tener que aceptar mi renuncia en forma urgente para parar no sé qué embrollo que se había desatado, que después nos reuniríamos”, señaló Casaravilla en un comunicado sobre el diálogo que mantuvo con el intendente. Agregó que después se enteró que Orsi había declarado que él fue removido.

Sobre por qué lo cesaron también hay polémica. Casaravilla aseguró que “no hay irregularidad”, ya que “está escrito en los procedimientos de la agencia que ‘se realizan llamadas telefónicas, así como citaciones solicitando los datos personales para la presentación de la persona (que debe) en nuestra oficina o en el municipio que él indique’”. Amparado por la pandemia, el exjerarca señaló que ante la suspensión de la atención presencial al público fue habilitada la posibilidad de utilizar el correo electrónico para resolver ese tipo de temas. “No hubo maniobras ni arreglos”, acotó.

En tanto, Orsi dijo que “el error fue de la intendencia” y no de Andrade. “La intendencia llama e informa mal, de manera incorrecta, el procedimiento no fue el apropiado y no es el que se acostumbra a hacer”, señaló el intendente en el programa Desayunos Informales.

Pero toda la polémica generada tiene como trasfondo una disputa política entre Orsi y Costa, quien en la pasada elección departamental se postuló para competir con el intendente y luego optó por retirar su candidatura.

“Es un tema de pases de factura a la interna del Frente Amplio”, indicó a El País una fuente política de la coalición en Canelones. Esto, en alusión a que la batalla entre ambos no es nueva y la salida de Casaravilla parece tener un origen “más bien político”.

Costa confirmó a El País que renunció a la candidatura “cuando el FA perdió las elecciones nacionales” para apoyar a Orsi y que lo hizo “sin ningún tipo de condiciones”. “Me bajé por la unidad del FA, no soy rencoroso. Si alguien está haciendo operaciones políticas, no somos nosotros”, señaló.

Además, dijo que pese a haber aportado más del 10% de los votos del Frente en Canelones, no tiene cargos en la comuna. “No tenemos directores generales, megadirectores ni subdirectores. Germán Casaravilla de contador general de la intendencia pasó a la Agencia Tributaria, que es una unidad muy menor ”, subrayó.

Yamandú Orsi en su asunción como intendente de Canelones. Foto: Darwin Borrelli (Archivo)
Yamandú Orsi en su asunción como intendente de Canelones. Foto: Darwin Borrelli (Archivo)

Costa dijo que si se lo consideraba a Casaravilla como “director político”, la lista 2040 pasa ahora a tener “cero cargo” dentro de la comuna.

Batalla por el sillón.

Según supo El País, la pelea política entre Orsi y Costa es un adelanto de la puja que a la interna del FA se desatará para elegir al sucesor del intendente. En ese marco, dentro del FA sostienen que Costa busca tener “un alto perfil” para afianzarse como candidato.

“Somos gente de construcción de unidad, no busco perfilismos personales”, aseguró Costa a El País. Consultado sobre la posibilidad de postularse nuevamente a intendente, insistió en que no tiene “apetitos personales” y dijo que no está mirando hacia 2025.

“Deber está mal”, señaló Andrade

El senador comunista Óscar Andrade quedó en el medio de la polémica entre el intendente de Canelones, Yamandú Orsi, y el grupo del edil Yamandú Costa. “Esta semana lo que pasó es bastante raro”, reconoció ayer el legislador sobre el llamado que recibió para hacer el convenio para pagar la contribución de su casa ubicada en el balneario San Luis. “La noticia ayer fue de irregularidades en las que nosotros no tenemos nada que ver”, subrayó el legislador.

Además reconoció que “deber tributos está mal” y dijo que cometió un error a priorizar la donación de su sueldo y no el pago de la contribución.

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