Pacha Sánchez: con el plebiscito “no podemos poner en riesgo la victoria”

El legislador señaló que la campaña por el posible plebiscito puede distorsionar el verdadero debate que tiene Uruguay: la continuidad o el cambio de gobierno en 2024. Habló de por qué su sector se opone al camino elegido por la central y aseguro que el pueblo uruguayo “no perdonaría” si la iniciativa frustra un triunfo de la izquierda.

-¿Esperaba las dificultades que le está planteando al Frente Amplio su posicionamiento en torno a la reforma constitucional que plantea el Pit-Cnt?

-El Pit-Cnt tiene toda la legitimidad del mundo para largar esta iniciativa. Y no creo que el Frente Amplio tenga problemas para procesar esta decisión. De hecho, creo que hay unanimidad en cuanto a que vamos hacia la libertad de acción.

-Pero hay dificultades hasta para determinar los alcances de esa libertad de acción...

-Para mí está claro. Los que piensan y creen que es oportuna una campaña de recolección de firmas, la harán; y los que creemos que no, no lo haremos. Ahora parece que los partidos del gobierno le dicen al Frente Amplio cómo puede ser que no se defina. Yo diría: ¿por qué nos tenemos que definir sobre una decisión legítima de las organizaciones sociales? ¿El Partido Nacional no dejó en libertad de acción con respecto a la propuesta de Jorge Larrañaga de juntar firmas en la pasada campaña electoral? Porque el Herrerismo y la Lista 404 no juntaron firmas y dejaron en libertad de acción a su gente.

-Yo le preguntaba por el debate que existe sobre si se podrá hacer campaña o no, por ejemplo, en los comités de base o en otras estructuras del Frente Amplio...

-Yo creo que la libertad de acción va a alcanzar hasta los comités de base. Habrá algunos que resuelvan que pueden junta firmas y otros que no. Nosotros tenemos la siguiente mirada: tenemos una diferencia táctica con los compañeros que han impulsado esto. Con algunos de ellos, y con el Pit-Cnt, que lo resolvió por mayoría. Estamos de acuerdo en que la ley de seguridad social es mala y que hay que cambiarla. También lo estamos con los desafíos que enfrenta la seguridad social. Pero lo que nosotros pensamos es que debe haber un gran diálogo, y que se debe construir por esa vía una ley de seguridad social distinta, más justa, que atienda los problemas reales que tiene este tema. Para nosotros, colocar ahora un plebiscito distorsiona el debate.

-¿En qué sentido?

-Lo que necesita y reclama el Uruguay es que haya un cambio. En la política económica, en la política educativa... Un cambio de verdad en las políticas de inversión pública y en la seguridad. Ese es el debate de verdad que va a enfrentar el pueblo uruguayo. Yo concuerdo con muchos de los objetivos, pero me pregunto: ¿hay que colocar un artículo en la Constitución o cambiar la política económica? Hay que cambiar la política económica. Y para cambiar la política económica hay que cambiar de gobierno. Colocar en la Constitución cambios en seguridad social puede ser una traba demasiado rígida para reaccionar ante las transformaciones. El camino no es el plebiscito. Además de todo esto, no compartimos la manera en cómo está redactada la papeleta.

-¿Por qué?

-Si yo equiparo las jubilaciones a los salarios mínimos, estoy equiparando dos políticas: una de seguridad social con otra de protección del trabajo. Lo que generará esto es que el que tome la decisión va a tener que pensar en si tiene plata para pagar las jubilaciones. Será una enorme presión para que el salario mínimo no crezca. Estas cosas se tienen que resolverse por ley.

-¿El Movimiento de Participación Popular va a decirle directamente a sus militantes que no firmen?

-Ya lo dijimos antes que lo resolviera el Pit-Cnt, y dijimos que el camino no era el plebiscito. El MPP no va a juntar firmas. Yo no voy a firmar. La otra discusión que se ha colocado es: ¿se van a enfrentar al movimiento sindical? De ninguna manera. Hay que decirle a (Álvaro) Delgado que se va a quedar con las ganas. Que tengamos diferencias con lo que plantea el Pit-Cnt no nos lleva a enfrentarnos con los trabajadores.

-¿A Delgado y también a Oscar Andrade, con el cual usted ha tenido recientemente un contrapunto a través de algunos medios?

-Yo lo que dije fue que el “Boca” se equivoca cuando dice que el Frente Amplio no puede quedar enfrentado a los trabajadores, pero respeto su razonamiento de acompañar lo que resolvió el movimiento sindical. Yo también estoy con los trabajadores, con los humildes, con los de abajo, pero creo que en este caso es un error ir por el plebiscito. Y es legítimo plantearles a los que son nuestra base social que, en esta, están equivocados. Compartimos los objetivos, pero el camino es otro. Creo que en este tema hay que contraponer argumentos sin lastimarnos y sin generar falsas contradicciones, porque no las hay.

-No parece demasiado descabellado que el Pit-Cnt y sectores que apoyan la reforma logren las 270 mil firmas para que haya plebiscito. ¿Cómo se tendría que parar el Frente Amplio ante una campaña en paralelo a la campaña electoral?

-Es parte de las razones por las que pensamos que esto era inconveniente. Va a traer complejidades. Debemos tener la inteligencia y la imaginación para que esas complejidades no pongan en riesgo la victoria. No creo que el Frente Amplio hoy tenga el gobierno ganado. Sí que está en una situación de mucha ventaja. Yo vengo de una tradición capaz de poner en riesgo cualquier cosa. Incluso compañeros pusieron en riesgo su vida detrás de sus ideas. Lo que no podemos poner en riesgo es la victoria. No lo perdonaría nuestro pueblo.

-¿Esta campaña pone en riesgo la victoria?

-Hay que tener la capacidad de que no lo haga.

-¿Usted visualiza que el presidente Luis Lacalle Pou, ante el plebiscito contra una ley que él impulsó, saldrá a defenderla?

-El hecho de que exista una reforma lleva a que el presidente, que no puede participar en la contienda electoral, participe. Y va a participar. Creo que la campaña electoral será entre continuidad y cambio, y en realidad lo que terminará pasando es que más allá de la popularidad del presidente, que ha logrado desacoplarse de todos los escándalos de corrupción y los acomodos que ha generado este gobierno, diría que la gente va a votar por el cambio. Y el cambio es el cambio al gobierno de Lacalle Pou. No me genera mayores problemas que participe. El Frente deberá demostrar que tiene la valentía y la capacidad para hacer los cambios que la gente reclama. Porque la gente quiere cambios.

-Tomando en cuenta esto, ¿es suficiente que el Frente Amplio se limite a decir que hay libertad de acción o debería aclarar que no acompaña la reforma?

-Lo que tenemos que hacer es dejar que los que estén de acuerdo den sus argumentos, mientras los que estamos en desacuerdo explicamos por qué creemos que ese no es el camino y los instrumentos son otros. Después vendrá la verdadera encuesta: si la gente pone o no la papeleta en la urna. Esa es la democracia. Hay que confiar en el pueblo.