Da Silva reconoció que los senadores dieron un "espectáculo paupérrimo" en la sesión que terminó con insultos

Redacción El País
El senador Sebastián Da Silva, del Partido Nacional, reconoció que la sesión del Senado en la que se interpeló al ministro Alfredo Fratti fue un "espectáculo paupérrimo" y que terminó de mala forma. En este sentido, admitió su responsabilidad por haber insultado a su colega Nicolás Viera, del Frente Amplio, con una referencia a su orientación sexual.

Según dijo, quedó con "sensaciones encontradas" tras la sesión porque "fue una interpelación muy preparada" en la que entiende que hizo "apreciaciones que inclusive fueron reconocidas por el nuevo presidente de Colonización, que tiene mucho mejor talante que el anterior". La referencia es a Alejandro Henry Rodríguez, quien suplantó a Eduardo Viera tras su renuncia.

En diálogo con Doble Click (FM Del Sol), pocas horas después de la sesión que lo tuvo como miembro interpelante del ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Da Silva dijo que por el tema de la estancia María Dolores tuvo que "soportar desde el primero de los días todo tipo de acusaciones", como que "estaba en el negocio y por eso pataleaba", hasta que en la madrugada de este jueves fue acusado de "ser parte de Conexión Ganadera".

La sesión terminó cuando el senador Viera vinculó a Da Silva con la estafa del fondo ganadero liderado por Pablo Carrasco (actualmente preso) y Gustavo Basso, a lo que el senador blanco le respondió "puto de mierda" al frenteamplista.

"Estoy amargado por la situación, obviamente que hay que pedir disculpas cuando uno se equivoca", dijo Da Silva.

Leonardo Maine/Archivo El Pais

De todas formas, reiteró —como ya lo hizo en otras ocasiones— que no tiene nada que ver con la estafa de Conexión Ganadera y que lo que dijo Viera "es una mentira, una difamación" ante la que "cualquier hombre o mujer de bien tiene que reaccionar" porque entiende que fue acusado de "estafador".

De todas formas, dijo que tiene los "códigos de antes" y que no denunciará a Viera, y con respecto a una eventual denuncia de parte del Frente Amplio por homofobia, retrucó: "Que me denuncien, es un circo para ocultar el contenido de la interpelación".

"Hay una especie de pedestal moral por el cual Sebastián Da Silva va a ser acusado de homofóbico. Perfecto. Las cosas fueron dichas. Yo me arrepiento de la situación", apuntó, aunque luego agregó que "es jodido que te acusen de ser parte de una estafa de estas características".

"El error mío, existió, obvio. Estoy muy ofendido con Nicolás Viera y entiendo que él esté muy ofendido conmigo", añadió.

Por otra parte, Da Silva cuestionó que la interpelación haya terminado en ese momento, cuando fue suspendida por quien entonces presidía la cámara, el senador frenteamplista Sebastián Sabini. "Nadie se va de una interpelación si tiene la razón", lanzó el dirigente nacionalista, que de todas formas celebró el resultado de la sesión, que "derivó en una comisión investigadora en la Cámara de Diputados" para analizar el procedimiento de la compra de la estancia.

Sabini, en su cuenta de la red social X, explicó: "No vamos a tolerar agravios de odio de ningún tipo. Para el debate democrático hay límites que impone el sentido común y el reglamento. Por ese motivo levanté la sesión. No 'aproveché' nada. Mejor pidan disculpas que es lo único digno que les queda".

Según supo El País, la bancada de senadores del Frente Amplio tendrá una reunión —probablemente este jueves— en la que analizará si toma algún tipo de acción contra Da Silva.