El expresidente Luis Lacalle Pou dio este martes un mensaje al que los presentes describieron como claro y contundente, en el que aseguró que aún no terminó el ciclo electoral porque quedan los comicios departamentales, que existe una necesidad de reorganizar el partido, y que se debe defender la realidad contra el “relato” que pueda venir del oficialismo. Lo hizo al mediodía en la casa del Partido Nacional ante los ojos atentos del directorio, senadores y legisladores, parte de su gabinete cuando ocupó la Presidencia, y figuras del partido, entre las que estaba su padre, Luis Alberto Lacalle.

"Estoy para ayudar, para empujar el carro", se limitó a decir al salir de la reunión del Directorio del Partido Nacional, ante las consultas de los periodistas y bajo las luces de las cámaras de televisión. Tras observar la placa que se sumó en homenaje a su presidencia en una línea de tiempo en la casa del partido y que le explicaran las reformas que se hicieron, siguió camino hacia la puerta para sacarse selfies con los militantes que se acercaron con banderas a saludarlo.

Minutos antes, puertas adentro, brindó un discurso que la presidenta del directorio, Macarena Rubio, lo definió como una "vuelta a la militancia" en el que se posicionó como el “último de la fila para empujar, ayudar y colaborar”. Y es que, a poco más de dos semanas, el expresidente tiene al menos dos salidas al interior programadas con el norte puesto en las elecciones departamentales: a Minas y a Colonia.

Lacalle Pou aseguró —indicaron— en el encuentro que va a estar para “empujar del carro” pero “no para tirar del carro" en los próximos cuatro años. Ese es uno de los mensajes que llevó a los nacionalistas a aumentar certezas de que no se cierra la puerta a que pueda ser candidato en las próximas elecciones. Es más, tras la reunión, Rubio, ante la consulta de si el exmandatario se postulará en 2030, respondió: “Faltan muchos años. Por supuesto que no lo descartamos. Para nosotros, Luis es un líder natural, más allá de que él decida colocarse ahora en el último lugar de la fila. Es una referencia, tiene una experiencia que hay que aprovecharla”.

Las elecciones departamentales serán en pocas semanas, y este es uno de los puntos en los que se centró Lacalle Pou —según contaron a El País los presentes—, haciendo hincapié en que aún no terminó el ciclo electoral y que está vigente el desafío de ganar la mayor cantidad de intendencias posibles.

Por otra parte, habló sobre las elecciones del directorio, uno de los puntos que genera tensión dentro del Partido Nacional. En la reunión, Lacalle Pou —según reconstruyó El País— marcó la necesidad de reorganizar al partido desde este órgano de la fuerza política. El desafío —graficó uno de los presentes— es que el partido toque como una orquesta y no suene como sonidos individuales. Además, entiende —indicaron nacionalistas— que es natural que haya una elección disputada para el directorio, así como también puso sobre la mesa que, quien lo presida, no puede tener aspiraciones presidenciables y se tiene que dedicar full time.

Lacalle Pou también habló sobre la necesidad de ganar la próxima elección con el agregado de definir cuál será el rol de oposición que van a tomar los nacionalistas. En esa línea, le trasmitió a las bancadas que se puede generar asesoramiento continuo con los exministros para procesar dos momentos clave que se aproximan: las discusiones del Presupuesto y la Rendición de Cuentas.

Otro de los temas que estuvo presente en el discurso de Lacalle Pou fue el gobierno actual. Este es un concepto al que hizo referencia el senador Sebastián Da Silva tras la reunión: “Rescato algo que veníamos hablando: el Frente Amplio muchas veces se preparó para ganar pero no necesariamente para gobernar. En parte, los problemas o velocidades que estamos teniendo es producto de que eran buenos para colocar pasacalle pero no sé si para enfrentar políticas de gobierno. La Rendición de Cuentas va a marcar el enfrentamiento de dos posturas de país: nuestro legado y el proyecto de gobierno del Frente Amplio”.

Por otra parte, en referencia a las críticas que puedan venir desde el gobierno actual sobre la gestión anterior, Lacalle Pou planteó que hay que defender la realidad ante el “relato”. A modo de ejemplo puso el Hospital del Cerro —“que está ahí, se puede ver”, explicó un nacionalista—, el que inauguró en su mandato. Así como también se refirió al libro que se publicó el 27 de febrero, un día antes de que finalizara la administración, con un resumen de los cinco años.

Por último, una de las curiosidades es que Lacalle Pou se refirió a la inteligencia artificial al marcar la importancia de manejarla, incluso para el que tenga aspiraciones presidenciales.