Por Maite Beer
A cuatro días de que volcara el ómnibus de Copsa en la ruta Interbalnearia, por lo menos 10 víctimas ya declararon ante la Policía y en sus relatos todos ellos aseguraron que el ómnibus “hacía ruidos raros”, como si algo estuviera averiado, y se movía “en zigzag”. Esto condice con el audio que grabó el chofer del vehículo, en el que decía: “Acá voy en la Onda 540, todo el mundo se queja, no sabés lo que es esto. Se zangolotea para todos lados. Yo no sé si llevarlo a 80, si llevarlo a 100, llevarlo a 95. ¡Yo que sé!”.

En esta misma línea, Felipe Donagaray, un joven de 19 años que sobrevivió al siniestro, contó a El País que durante el viaje, previo al accidente, notó que el ómnibus “iba demasiado rápido”, que estaba inestable y que sintió un “zarandeo”.

Por otro lado, luego del accidente los tres hermanos de Mia García, la adolescente de 15 años que falleció en el accidente de tránsito -que estaban sentados en la primera fila y resultaron ilesos-, le contaron a su madre que el chofer estaba usando el celular mientras manejaba, según contó ella a El País.

Si bien esto no fue declarado por otros pasajeros, el abogado Rafael Silva, que representa a la familia de la difunta y a otras nueve víctimas, subrayó que el hecho de que el chofer haya grabado un audio mientras conducía podría evidenciar que el hombre estaba usando el celular. “Está la sospecha y por eso se solicitó la pericia de los celulares a los efectos de saber si lo estaba manipulando”, indicó Silva a El País.

Más allá de los imperfectos del ómnibus, ninguno de los pasajeros del coche que declararon a las autoridades tenían conocimiento de cómo sucedió el siniestro, solo dijeron que de repente el ómnibus se descarriló, pero no dieron más detalles.

Con respecto a las denuncias de los pasajeros sobre movimientos y ruidos extraños, Andrés Martínez, integrante de la Asociación de Trabajadores de Copsa (ATC), dijo el viernes pasado en rueda de prensa que el sindicato ya le había solicitado a la empresa que la flota estuviera “en condiciones”, dado que en la temporada iban a aumentar la cantidad de viajes.

“Lo que denunciamos mayormente era el mantenimiento general, que esté en condiciones para preparar la temporada. En setiembre cuando tuvimos el problema importante de la huelga, uno de los temas que se planteó al Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) fue que la flota en la temporada funcionara de la mejor manera”, señaló Martínez ante los medios de comunicación.

Al ser consultado sobre la situación de este coche en particular dijo: “Había compañeros que ya habían denunciado esta situación”.

Desde Copsa, sin embargo, indicaron que el ómnibus había tenido un chequeo general en un taller especializado en carrocería a mediados de diciembre de 2022 y luego del chequeo los mecánicos dijeron que el vehículo “estaba perfecto”, según informó a El País el gerente de Copsa, Javier Cardoso. Además dijo que cuando un ómnibus llega del taller la empresa también hace los debidos controles.

El director de Transporte por Carretera del MTOP, Carlos Flores, también señaló que la unidad contaba con la habilitación técnica para circular.

De todos modos, todavía se está a la espera de la pericia de Policía Científica y el informe del departamento de Accidentología Vial, que sería determinante para concluir cuáles fueron las causas del accidente. La investigación de este equipo establecerá qué fue lo que generó que el jueves pasado alrededor de las 16:45 horas el ómnibus 540 se descarrilara, cruzara la senda contraria y rodara por un barranco hasta volcar. El siniestro dejó a 20 de los 22 pasajeros con heridas, cuatro de ellos de gravedad, incluyendo al chofer que continúa internado.

El País consultó a Silva sobre la intención de las víctimas en cuanto a la demanda civil por daños y perjuicios, pero el abogado dijo que por ahora se quieren enfocar en la demanda penal para que se determinen las eventuales responsabilidades del conductor. “La familia de Mia todavía no cae, están en una pesadilla”, expresó el abogado y remarcó que la chica “tenía toda la vida por delante”.

Foto: Maite Beer

Una camioneta chocó ayer contra un camión que estaba estacionado en la Ruta 1, lo que provocó la muerte de tres pasajeros del primer vehículo, confirmó a El País el jefe de Policía de Colonia, Jhonny Diego. El jerarca informó que en la camioneta viajaban cinco personas, contando al chofer. Este último salió casi ileso del choque, mientras que dos acompañantes fallecieron en el momento. Eran un hombre y una mujer de unos 30 años, indicó.

Además, los otros dos acompañantes resultaron lesionados de gravedad y fueron trasladados a un hospital de Juan Lacaze. Una de las personas hospitalizadas, un hombre de unos 30 años, murió horas más tarde. La otra persona que permanece internada está en estado crítico, informó Diego.

Los implicados en el choque ya fueron identificados: todos son uruguayos y pertenecen a Juan Lacaze y Nueva Helvecia. “La camioneta, que circulaba de Colonia hacia Montevideo, se dio contra el camión, que estaba estacionado por un desperfecto al costado de la ruta”, a la altura del kilómetro 141, señaló Diego, quien añadió que luego la camioneta comenzó a dar vueltas como en una “suerte de trompo” y se desplazó varios metros.

El jefe de Policía afirmó que, de acuerdo a las pericias realizadas, “no hubo una frenada” por parte de la camioneta y resaltó que el camión era visible desde al menos 200 metros de distancia. Basado en esto, Diego dijo que “lo que pudo haber pasado son dos cosas: el conductor se distrajo o se durmió, o capaz que quiso rebasar al camión y venía un vehículo por la senda de al lado”, lo que provocó el accidente.

El chofer del camión salió ileso del siniestro. En tanto, la espirometría del conductor de la camioneta arrojó resultado negativo.