Redacción El País
En la Paloma, la Cooperativa de Trabajo de Servicios Sociales capacita a 20 jóvenes en reparación de bicicletas y emprendimientos de alquiler de estos birrodados. La Organización de Mujeres Empresarias, Ejecutivas y Emprendedoras de Uruguay (OMEU) capacita a 120 mujeres en todo el país en desarrollar sus emprendimientos para que logren la autonomía económica con perspectiva de género. La Asociación Down del Uruguay trabajó con 94 personas con discapacidad intelectual de Montevideo, Maldonado, Salto y Durazno para darles herramientas y prácticas de empleo donde prima la digitalización.

Estos son solo algunos ejemplos de los más de 50 proyectos de capacitación que se han llevado a cabo en los dos últimos años bajo el instrumento Respuestas Innovadoras a Desafíos Estratégicos (RIDE), desarrollado por el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop).

Según su director general, Pablo Darscht, el programa tiene como objetivo fomentar la innovación y la mejora en la formación y capacitación profesional del país, y ya lanzó su tercer llamado a organizaciones privadas cuyo plazo vence a mediados de agosto.

“Ahora se presentan ideas, un bosquejo de lo que quieran hacer y porqué responde a alguno de los desafíos estratégicos. Se evalúa y en setiembre se dan los resultados de los que pueden presentar su propuesta completa. Luego un equipo independiente definen los que recibirán hasta $ 12 millones a ejecutar en un plazo máximo de 18 meses”, indicó.

Según datos del Inefop, en la primera edición (2021) se aprobaron 29 propuestas por un total $ 90 millones con un alcance de 7.500 personas y unas 1.000 empresas. En el segundo capítulo (2022) se eligieron 33 proyectos para su ejecución con un alcance proyectado de 8.000 personas y 600 empresas. Esto totalizó una inversión de $ 110 millones. En promedio, agregó Darscht, cada iniciativa obtuvo $ 3 millones.

De acuerdo a las bases del proyecto del Inefop, el objetivo de este instrumento es “impulsar proyectos y cursos innovadores que aborden temas estratégicos y contribuyan al desarrollo nacional”.

Para llevar esto acabo, las propuestas deben detallar horas de capacitación y docentes, desarrollo de material de formación, alquiler de equipos y aulas, promoción y divulgación de los eventos de formación, viáticos para actividades relacionadas con el proyecto, gastos administrativos y de coordinación, entre otros gastos relevantes para su ejecución.

En tanto, las áreas estratégicas a desarrollar deben apuntar a: fortalecer competencias para la transformación digital; formar en nuevos perfiles laborales inexistentes o incipientes en el mercado nacional; atender a poblaciones vulnerables frente al empleo (personas especialmente jóvenes, mayores de 45 años, migrantes, etcétera.) con foco en competencias transversales y en la inserción, adaptabilidad, reconversión y movilidad ocupacional; mejorar la productividad en acuerdo entre trabajadores y empresas; promover la gestión de talento para potenciar las capacidades de las empresas y apoyar iniciativas de formación con foco en la transversalización de la perspectiva ambiental en el trabajo.

Endeavor, Universidad ORT, la Cámara de Industrias del Uruguay, la incubadora Ingenio, Instituto Cuesta Duarte y Enkel Group son algunas de las empresas y organizaciones que han sido apoyadas.