Redacción El País
La cola de caballo (Equisetum arvense) es una planta medicinal muy usada en la fitoterapia, con una larga tradición en Europa y América Latina. No se consume tanto por su valor nutritivo como alimento, sino más bien por sus propiedades terapéuticas y funcionales.
Composición nutritiva de la cola de caballo
- Sílice (ácido silícico): es la característica más destacada; fortalece huesos, uñas, cabello y tejidos conectivos.
- Minerales: contiene potasio, calcio, magnesio, hierro y manganeso.
- Flavonoides: antioxidantes naturales que ayudan a proteger las células del daño oxidativo.
- Saponinas y alcaloides: responsables de algunos de sus efectos medicinales.
- Taninos: con acción astringente y antiinflamatoria.
No es rica en macronutrientes (proteínas, grasas o carbohidratos), así que no se considera un alimento en sí, sino un suplemento herbal.
Usos y beneficios principales
1. Efecto diurético
- Favorece la eliminación de líquidos y toxinas.
- Puede ayudar en casos de retención de líquidos, edemas leves o hipertensión asociada a sobrecarga hídrica.
2. Salud ósea y articular
- El sílice contribuye a la mineralización de huesos y cartílagos.
- Se investiga su utilidad en la osteoporosis como complemento.
3. Fortalecimiento del cabello y las uñas
- Promueve el crecimiento capilar y evita la fragilidad de uñas.
- Muy usada en cosmética natural (champús, lociones, suplementos).
4. Apoyo en cicatrización y regeneración tisular
- El sílice y los antioxidantes aceleran la cicatrización de heridas y favorecen la elasticidad de la piel.
5. Uso digestivo
- Los taninos aportan un ligero efecto astringente, útil en diarreas leves.
6. Otros usos tradicionales
- Infusiones para infecciones urinarias leves (aunque hoy se recomienda acompañar con control médico).
- Enjuagues bucales para inflamación de encías.
- Baños y compresas para aliviar dolor muscular o articular.
Precauciones
- No debe usarse por períodos prolongados sin supervisión médica.
- Contraindicada en personas con insuficiencia renal o cardíaca.
- Puede interferir con medicamentos diuréticos, antihipertensivos o anticoagulantes.
- No se recomienda en embarazo ni lactancia.Relacionadas