El truco sencillo para que las papas aporten menos calorías y más fibra, según un nutricionista

Las papas son un alimento común y versátil utilizado en varias partes del mundo. Uno de los beneficios no tan conocidos es que favorece a la microbiota intestinal, pero para eso es importante guardarlas cocidas en la heladera.

“El arroz, la pasta o las papas tienen almidón. Pero, cuando las cocinamos y refrigeramos, sucede un proceso que se llama retrogradación del almidón: parte del almidón original se transforma y convierte en almidón resistente”, aseguró el nutricionista Aitor Sánchez.

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El almidón resistente es muy beneficioso para la salud intestinal ya que favorece el buen funcionamiento del sistema digestivo. Además, si se refrigeran las papas con un poco de aceite de oliva, sus propiedades son aún mejores. “Este pequeño truco es fantástico porque podés aportar un extra de fibra, reducir el impacto glucémico y disminuir el aporte calórico del plato”, afirmó Sánchez.

Aunque este consejo suele ser práctico, las personas no pueden tomarlo como una fórmula mágica que resolverá todos los problemas nutricionales. “Como siempre, hay quienes exageran sus beneficios, haciendo creer que es lo más importante que puedes hacer en tu alimentación. Y no es así”, destacó.

Un factor a tener en cuenta es que al sacar las papas de la heladera pueden consumirse con ensaladas o legumbres. “Lo ideal es tomar de base esos productos, y luego añadir una papa refrigerada. Así cumple su función dentro de un orden lógico de alimentación saludable”, concluyó.

Wendys Pitre Ariza, El Tiempo/GDA