"Si tuviera que perder entre 5 y 10 kilos, esto es exactamente lo que haría", aconseja nutricionista

Redacción El País
Si el interés es perder entre 5 y 10 kilos, es importante entender que todo es un proceso y que, para no poner la salud en riesgo, los ajustes deben hacerse poco a poco, es decir, la transformación llevará algún tiempo. Según el nutricionista Luis Gil, el primer paso, relacionado con la hidratación, debe realizarse todos los días apenas la persona despierte. 

"Al levantarnos, debemos tomar dos vasos de agua. Fueron siete u ocho horas de sueño, y el cuerpo necesita líquido porque pasó toda la noche sin recibirlo", señala el especialista.

Además, recomienda incluir otras cuatro acciones en la rutina diaria. Como segundo punto, Gil menciona el entrenamiento en ayunas. En esta etapa, es esencial evaluar lo que el cuerpo está apto para hacer. Por eso, los ejercicios no serán iguales para todos. "Hay que hacer lo que la capacidad permita. Si puede hacer ejercicios de fuerza, excelente. Salir a correr también es válido; si no, basta con caminar entre 20 y 30 minutos antes del desayuno", aconseja.

Foto: Unsplash.

Este hábito es útil para señalar al cuerpo que debe buscar energía en las reservas que ya posee, es decir, en la grasa corporal. Por otro lado, el nutricionista destaca una práctica en la que el sol se convierte en un aliado.

El tercer paso es beneficioso para el metabolismo y el humor. Según las recomendaciones de Gil, bastan 15 minutos de exposición al sol para comenzar a notar cambios.

Foto: Rawpixel.

Para el nutricionista, hacer un desayuno con una buena porción de jamón y huevo puede ser fundamental para alcanzar los objetivos de perder peso. Según Gil, lo ideal es incluir un plato con alrededor de 20 gramos de proteínas y complementarlo con grasas saludables. 

Respecto a las bebidas matutinas, el especialista afirma que no es necesario excluir el café e incluso puede consumirse con un poco de leche. "Lo importante es no añadir azúcar, jarabes o coberturas", aclara.

Estas cinco recomendaciones muestran que no es necesario pasar horas sin comer o eliminar los alimentos que más nos gustan para librarnos del exceso de peso que compromete la salud en general.