¿Verano eterno o clases ya? La disyuntiva de las madres cuando se acerca el retorno a las rutinas

Si bien parte de madurar como ser humano es entender que en la maternidad muchas veces nos tenemos que hacer a un lado, eso no significa que debamos sacrificarnos hasta no escucharnos.

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El amor por los hijos es el que más activa al cerebro.
Foto: Pxhere.

Por Mamás Reales*
Llegamos a fines de febrero. Los días se sienten largos, el aburrimiento de los más chicos va tomando temperatura y el tono de la casa se pone un poco denso, pesado.

Así como en diciembre necesitamos romper rutinas, desordenar la vida y volver a lo más básico (abrazos mañaneros, miradas cómplices, risas y juegos sin horarios), a esta altura de febrero es normal que necesitemos poner orden al asunto.

A pocas semanas del comienzo de clases, ya empezamos a escuchar algunas quejas. Madres cansadas y niños aburridos en tardes eternas que se despliegan más lentas que nunca.

Para muchos la espera se hace larga y, para sentir que la acortan, salen derecho a comprar materiales escolares que les apacigüe -aunque en modo placebo- ese tiempo que parece quieto, inmóvil.

Obvio que hay mamás que quieren más verano, sin horarios y actividades. Pero en la cola del súper, en la orilla de la playa y en las redes de cobranza, escuchamos a la mayoría pidiendo organización en sus vidas.

Es que no es fácil, una además de mamá, tiene una vida. Un trabajo, intereses, hobbies o la nada misma. Una tiene derecho a sentarse y descansar, sin que un niño te pida algo, sin que te quite el bocado de la mano o te ruegue que lo liberes del aburrimiento que tiene encima. Los roles como mamá se multiplican en vacaciones pero nadie multiplica la energía.

madre e hija

Si bien parte de madurar como ser humano es entender que en la maternidad muchas veces nos tenemos que hacer a un lado, que nuestros deseos se pueden quitar del medio porque hemos crecido en experiencia y porque podemos esperar (se supone…), eso no significa que debamos sacrificarnos hasta no escucharnos.

Esto significa que es una época de entrega, de generosidad, de redoblar paciencia. Sí. ¿Pero cuánto podemos entregar si no tenemos tiempo de reparar?

Por todo esto, a estas Mamás Reales, ordenar un poco la cancha no les vendría mal…

* Mamás reales es el blog sobre maternidad que impulsan Carolina Anastasiadis y Federica Cash.

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