Un libro de afirmaciones positivas para que los niños crezcan seguros, confiados y con alta autoestima

Para la coach de vida e imagen Lola Stapff, la seguridad en uno mismo es “el superpoder del Siglo XXI”. Pero, ¿cómo alcanzarlo en una sociedad dominada por las tendencias, el qué dirán y las redes sociales? Una herramienta sencilla, pero potente, son las afirmaciones positivas, que nos ayudan a creer en nuestras capacidades y cultivar autoconciencia, confianza y autenticidad.

Lo anterior aplica a todas las edades. De hecho, Stapff elige iniciar el día junto a su hija Jasmine, de dos años de edad, con palabras que la hacen sentir amada, fuerte y segura, aunque todavía ni siquiera ha empezado la escuela. “Me di cuenta de que esos mensajes la hacían brillar: la veía más feliz, más curiosa y con más ganas de explorar el mundo a su ritmo”, contó la coach, que se especializa en inteligencia emocional.

Así, surgió la idea de escribir Mañanitas asertivas, un libro que reúne afirmaciones simples y positivas para ayudar a niñas y niños a centrarse en sus fortalezas y capacidades, reforzando pensamientos y comportamientos positivos. Pero no solo impacta en los más pequeños, sino que está pensado para transformar también al adulto que acompaña en la lectura. Por medio de la repetición, se comienza a trabajar el inconsciente de ambos “de una forma casi mágica”.

Stapff agregó: “Quise reunir esas palabras en un libro no solo para Jasmine, sino también para otras mamás, papás y cuidadores que buscan maneras dulces y poderosas de conectar con sus niños desde el corazón”.

Foto: Freepik.

Las afirmaciones —señaló la coach— nos ayudan a reconocer y gestionar nuestras emociones. En Mañanitas asertivas están pensadas como “pequeñas semillas de amor, confianza y seguridad emocional”. Al leerlas, los niños comienzan su día conectándose con lo mejor de sí mismos, fomentando una rutina emocional saludable. Por ejemplo: “Soy fuerte, soy amado, soy valiente. Y nadie externo vendrá a decirme algo distinto a lo que sé que soy”.

Sin embargo, no se trata solamente de lo que lean, sino también de lo que escuchen de sus padres y/o cuidadores, que son sus referentes, su lugar seguro y sus principales guías en los primeros años de vida: “Podés decirle a un niño que Papá Noel existe, que el ratón Pérez vendrá por su diente, que es muy lento, muy llorón, muy quejoso… Y te creerá”.

Aún más: los chicos no solo escuchan, también observan. “Si queremos que se hablen con amor, primero necesitan vernos hablarnos con amor a nosotros mismos y a ellos”, sostuvo Stapff. Por último, expresó: “Cada niño es un universo único, lleno de curiosidades, talentos y formas especiales de ver el mundo. Pero, para que ese universo florezca, necesita ser escuchado. Cuando un adulto se toma el tiempo para observar, preguntar y escuchar de verdad —sin corregir, interrumpir o dirigir—, le está diciendo al niño: Vos importás. Lo que sentís, pensás y amás tiene valor. En ese mismo momento es cuando ellos pueden crear sus propias afirmaciones, que se volverán su estilo de vida”.

El libro Mañanitas asertivas puede conseguirse a través de la web coleccionables.elpais.com.uy a un precio de $350. Por cada libro vendido se donarán $ 40 a la Fundación Niños con Alas.