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Carrasco está cambiando. Muchos argentinos han comprado propiedades y decenas de comercios han comenzado a echar raíces en la zona. ¿Cuánto de esto obedece a la recuperación del emblemático hotel? Expertos analizan el fenómeno.

Inversionistas argentinos han comprado propiedades e instalado distintos tipos de negocios en los alrededores del Hotel Carrasco, que según anunció el concesionario (Carrasco Nobile S.A.), abrirá sus puertas el próximo mes de agosto. Pero también hay capitales de otros lugares -y del propio Uruguay- apostando a la recuperación del barrio y a las utilidades que, de ella, puedan obtenerse.

"Desde que empezó la obra del hotel, una porción importante de casas de la zona ha cambiado de manos. Hay transnacionales y demás. Y casas de viviendas que se están transformando en comercios", señaló a El País el operador inmobiliario Ricardo Frechou, afincado en Carrasco desde 1969.

De todos modos, el agente de bienes raíces aclaró que "empezó a haber más movimiento de oficinas que se están trasladando a esta zona, pero no es solamente por el hotel, sino por un fenómeno que se está dando en varias ciudades del mundo; porque con las nuevas facilidades que hay, como Internet, telefonía y demás, ya no tienen necesidad de estar en la Ciudad Vieja. Surgieron primero edificios como los del World Trade Center y ahora están viniendo oficinas para Carrasco", puntualizó Frechou.

El arquitecto Juan Diego Vecino, director del estudio que lleva su nombre, reconoció que la expectativa por la reapertura del Hotel Carrasco es "muy grande". Pero también opinó que el boom inmobiliario y el fenómeno comercial que se vive en la zona no dependen exclusivamente de la recuperación del ícono hotelero de la rambla de Montevideo.

"Mi visión es que se está transformando Carrasco y que está cambiando la lógica de funcionamiento. Y eso ha generado cosas tanto o más fuertes que el hotel. No se puede saber cuánto es por el aporte del hotel y cuánto por esa nueva modalidad", opinó Vecino.

Distintos operadores consultados por El País advirtieron que muchos argentinos han comprado propiedades y han invertido en distintos negocios, aunque eso también puede obedecer a "necesidades" o "sobrantes de dinero" de inversionistas del vecino país.

El metro cuadrado en el área puede llegar a cotizarse a US$ 2.000, aunque todo depende "del capricho del comprador y la necesidad del vendedor", apunta Frechou. "No se puede generalizar", dijo el agente.

En áreas comerciales de la zona, los alquileres van desde los US$ 23 a los US$ 33 el metro cuadrado.

Ricardo Frechou Propiedades administra un nuevo edificio de oficinas "premium" que se construyó a un costado del Hotel Carrasco, en la rambla y Costa Rica, en el que aún quedan tres unidades disponibles.

El mismo operador tiene otro proyecto ya aprobado por la Intendencia y de próximo lanzamiento: un complejo ubicado cerca del Hotel Carrasco, de ocho apartamentos y dos penthouses, en la esquina de Gabriel Otero y Carlos Federico Sáez (foto superior derecha).

Aquí, se preserva una antigua casona y atrás se construye un bloque de cuatro niveles, con un área comercial abajo, dos pisos con cuatro apartamentos cada uno, y dos penthouses encima.

ROSTAND. En el proyecto de Carrasco Nobile está la transformación de la calle Rostand en peatonal, conectando al hotel por su parte trasera con la Iglesia Stella Maris. Pero hasta el momento, la calle no ha sido intervenida, situación que preocupa a algunos comerciantes y operadores de la zona.

"No nos han dicho nada sobre algo que se debería comunicar para saber cómo van a entrar los autos y demás. Pero lo que es claro es que la peatonalización no va a coincidir con la inauguración del hotel", señaló un comerciante de la zona.

Rostand luce carteles de "No estacionar" en ambos márgenes (foto superior izquierda), pero la falta de lugares de estacionamiento ha llevado a que la señalización no sea respetada.

En el nacimiento de Carrasco, la expectativa era que Arocena fuera "la gran avenida residencial" y Rostand "la calle comercial". Incluso, en la esquina de Arocena frente al hotel había un tambo que vendía leche a los vecinos.

"Luego, por un tema lógico de desarrollo, de las necesidades vehiculares, se empezó a comercializar Arocena", explicó Frechou.

Según el arquitecto Juan Diego Vecino, parte de la expectativa que existe entre los comerciantes "tiene que ver con un cambio muy grande en Carrasco, que dejó de ser un barrio netamente residencial para transformarse en otro con un funcionamiento más de `miniciudad`, en el que hay oficinas, clínicas y otras cosas".

"Dejó de ser ese barrio donde `todo quedaba lejos`, para transformarse en otro en el que hay muchos bancos y empresas. Cada vez hay más firmas y profesionales que quieren instalarse en el entorno de todo esto, es un conjunto de cambios que son más fuertes o quizás que se acoplan al hotel", apuntó el arquitecto.

Vecino recuerda, de todos modos, que "este microbarrio ha sufrido dos años de obras que han sido muy complicados" y que "tienen que empezar a abrirse las puertas, a desatrancarse las calles, para ver cómo se moverá la cosa".

"Para mí, el movimiento inmobiliario está adosado al cambio de Carrasco y al hecho de que el centro histórico va a volver a estar esplendoroso. Pero la gente no se viene a trabajar del Centro a Carrasco porque va a haber un hotel; lo hace por razones de comodidad y se ubica alrededor de la zona céntrica porque están los bancos", apuntó.

EMPRENDIMIENTOS. La lista de locales comerciales que se han instalado en la zona en los últimos tiempos es elocuente.

Entre ellos, destacan MetLife (compañía de seguros de vida y ahorro), Rapsodia (boutique), Engel & Völkers (firma especializada venta y alquiler de viviendas de alto nivel con más de 400 oficinas en 32 países), Club House (ropa para hombres), Prune (carteras y calzado de dama), Bensimón (ropa masculina), Malabia (indumentaria femenina), My Home (casa de decoración), Reebok, Ayres (ropa para dama), Café Martínez (de Argentina) y Desiderata (ropa para damas).

ProCapital (Sociedad de Bolsa) también apostó a Carrasco para proveer servicios financieros a clientes institucionales y privados.

Otro caso es el de Rapsodia, con su nueva casa sobre Arocena, una marca que existe desde 1999 y que pertenece, entre otros, al conocido político y empresario argentino Francisco de Narváez, quien ya ha intentado comprar Tienda Inglesa en Uruguay. La firma, que gestiona otro local en Punta Carretas, tiene presencia también en Argentina, Chile, Colombia, México, Bolivia y Venezuela.

A su vez, hace algunos meses abrió una sucursal el Lloyds Bank en Rostand y Gabriel Otero. Y en el mismo edificio, en las plantas altas, hay nuevas oficinas, aunque no todas han podido ser alquiladas. "Antel amplió su local. Y vinieron un par de ferreterías. Varios comercios que estaban en locales chicos se han ido hacia otros más grandes, como la juguetería Los Reyes Magos", agregó Frechou.