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Clasificadores reclaman sueldo y la IMM los volverá a censar

Vivir de la basura. Los que trabajan en cooperativas dicen que el negocio no es redituable | La Intendencia los censará por tercera vez, lo cual genera críticas de la oposición

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ANDRÉS LÓPEZ REILLY

La Intendencia de Montevideo realizará un tercer censo de clasificadores. En tanto, desde el sindicato que los agrupa se reclamará que se les pague un salario a aquellos que hacen su tarea de forma cooperativizada.

Óscar González es trabajador de la cooperativa de recicladores "La Lucha". Forma parte de uno de los modelos de gestión de residuos que la Intendencia de Montevideo visualiza como sustituto a los carritos recolectores, que provocan los consabidos problemas en el tránsito y la limpieza de la ciudad. Y en los que -no menos importante- trabajan menores de edad.

Diariamente, camiones municipales llegan hasta esta cooperativa de Burgues y Aparicio Saravia y vuelcan allí lo que otros desechan. Pero en este sitio, la basura de unos lejos está de ser la riqueza de los demás. Esta forma de trabajo, que comparte con otros 8 cooperativistas, es menos redituable que el reciclaje por cuenta propia.

Además de cooperativista, González integra la Unión de Clasificadores de Residuos Urbanos Sólidos (Ucrus), que el 12 de abril se reunirá en asamblea para plantear sus reivindicaciones a la Intendencia. Una de ellas es el reclamo de un salario por tareas que se desempeñan en predios municipales.

"Se va a resolver un plan de lucha reclamando un salario para todos los compañeros que trabajan en las cooperativas, porque ya se ha vuelto inviable el trabajo. En esta cooperativa, `La Lucha`, sacamos unos $ 5.000 por mes, y entre otras cosas tenemos que hacer mantenimiento. Estamos resolviendo empezar a tomar acciones para reclamar aunque sea un salario mínimo", dijo González.

El integrante de la Ucrus señala que hay unos 15.000 clasificadores en Montevideo, cifra que dista mucho de los indicadores que arroja el registro voluntario abierto por la comuna.

LOS NÚMEROS. Las autoridades de la Intendencia anunciaron en la Junta Departamental que harán próximamente un nuevo censo de clasificadores.

El primer censo obligatorio de carritos recolectores fue llevado a cabo durante 2002, el año de la crisis, y registró 5.312 clasificadores en la capital. Para entonces había 52% más carritos que en 1990, de acuerdo a datos oficiales. El censo se hizo entre el 2 de mayo y el 28 de junio de 2002 en el Cilindro Municipal y en el salón comunal Rodolfo Rincón, con la colaboración de la organización San Vicente-Obra Padre Cacho. Dos años después, en 2004, se estimaba que había 7.700 carros circulando por las calles de Montevideo.

En 2009 se abrió el segundo censo que, en rigor, es un registro voluntario. El padrón continúa abierto y no supera los números de hace 10 años, aunque desde la Ucrus se dice que los clasificadores son unos 15.000.

Unas 5.700 personas se han anotado como clasificadores en el registro que continúa abierto en la IMM, pero sobre este número se calcula que el total de personas en los hogares de los recicladores supera las 20.000 personas.

El 22% de los clasificadores utilizan carro con bicicleta, 44% de tracción animal y 28 % de tracción manual. La carga promedio para el carro con tracción animal es de 300 kg.; 90 kg. para tracción manual y 73 kg. para la bicicleta. El 65,5% declaró hacer la clasificación en su propia casa.

Aunque 82% de los registrados son hombres, la participación de mujeres en las tareas de clasificación no puede reducirse al 18%, pues la mayoría de los que proporcionaron sus datos fueron padres de familia.

Según la IMM, la participación de la mujer y de los menores es "muy importante".

A fines del año pasado un grupo de 40 recicladores participó de una experiencia piloto de entrenamiento para trabajar en la Construcción, aunque no todos concretaron el cambio. Como contrapartida, quienes ingresaban al programa no podían pasar sus carros y caballos a otras personas, o a sus hijos.

Acción de amparo por perjuicios de los "carritos"

Frente a los problemas que generan los carritos de recicladores -entre los que destaca la reciente agresión de un caballo a una transeúnte en Ciudad Vieja- y la "inacción municipal" en torno al tema, el edil colorado Andrés Ojeda no descarta recurrir a una Acción de Amparo ante el Poder Judicial (Ley N° 16.011). El legislador departamental pretende que la Justicia tome cartas en un asunto en el que "la Intendencia no logra actuar como debería hacerlo".

"Entendemos que no tenemos otra alternativa que solicitarle al Poder Judicial que proteja los derechos amenazados, sentenciando a la administración a subsanar su omisión en un plazo razonable y determinado, así como a asumir su entera responsabilidad de evitar que se pongan en peligro los derechos de todos quienes viven o tan solo circulan por Montevideo", señaló Ojeda.

"La Intendencia ha afirmado públicamente que no debe ni tiene los medios para ocuparse del `problema de los hurgadores`. De esta manera reconoce categóricamente su -voluntaria- omisión en esta materia. Es más, le endosa la responsabilidad en referencia al `problema de los hurgadores` al Ministerio de Desarrollo Social", dijo Ojeda.

"Desde esa repartición del Estado (el Mides) se expresa que, lejos de ser un problema o representar amenazas a derechos de los ciudadanos, los `hurgadores` realizan un gran aporte desde la clasificación de la basura. Lo único que resulta claro de este cruce de declaraciones es que ninguno de los órganos planea actuar para atacar la situación y los peligros que la misma plantea para los derechos individuales de cada uno de los que integramos el colectivo", graficó el edil colorado.

"TRAGICÓMICO". La realización de un nuevo censo generó cuestionamientos de la bancada del Partido Nacional.

"Es un anuncio tragicómico. Trágico por volver a focalizar la atención en el diagnóstico y no en las soluciones y cómico por la desorientación permanente que se muestra cuando se cuestiona la ineficiencia con la que se lleva a cabo la gestión de la limpieza", declaró el coordinador de bancada, Edison Casulo.

Cooperativas: el cambio buscado

El trabajo en cooperativas y "puntos verdes" es una de las principales opciones que maneja la Intendencia para disminuir el número de carritos en las calles. Aunque los recicladores mejoran las condiciones laborales, en muchos casos pasan a ganar menos. En la cooperativa "La Lucha" perciben unos $ 5.000 por mes.

No pueden usar las avenidas

Un decreto municipal señala que los carros con caballos tienen prohibido circular por 18 de Julio, Av. del Libertador, Av. Italia y todas las ramblas de Montevideo. Además, está parcialmente excluida, en el horario de 5 a 22, la circulación por Agraciada, General Flores y 8 de Octubre.

Niños y mujeres entre residuos

Según la IMM, la participación de la mujer y de los menores en el reciclaje es "muy importante". Hay informes del Mides que lo confirman. Aunque 82% de los registrados son hombres, la participación de las mujeres no puede reducirse al 18%, pues la mayoría de los que proporcionan sus datos son padres de familia.

El 65% clasifica en su propia casa

El 65,5% de los recolectores de Montevideo que participaron del registro voluntario de la IMM (que continúa abierto) declaró hacer la clasificación de residuos en su propia casa. El 44% utiliza vehículos de tracción animal, 28% de tracción manual y 22% carros con bicicletas.

LA CIFRA

15.000

Es el número de clasificadores de Montevideo, según estimación del sindicato que los agrupa. Oficialmente son algo más de 5.500.

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