Redacción El País
Este miércoles hubo gala de eliminación en Gran Hermano: Argentina y Uruguay perdió parte de su representación. Como anticipaban todas las encuestas, Selva Pérez quedó eliminada y solo Tato Algorta continúa como cuota charrúa de camino a la definición del reality.

En una placa positiva, Selva, que no fue de las participantes originales de la temporada, acumuló apenas el 2,9 por ciento de los votos y no le alcanzó para colarse a la instancia definitiva. Se fue muy emocionada y con cálidas palabras del locutor que atiende como Gran Hermano, y que elogió su forma de vivir.

El programa de este miércoles comenzó con un singular "Congelados". La casa se paralizó para presenciar el reingreso de Sandra Priore, exparticipante que se hizo presente con el pelo largo y un llamativo atuendo con capa, para devolver algunos objetos que habían sido retirados recientemente.

Luego hizo sonar un silbato rojo y con esa orden entró un plantel de hombres vestidos completamente de negro, con las caras cubiertas, para reintegrar el resto de las pertenencias faltantes. Mientras todo sucedía, los cinco hermanitos permanecían quietos y sorprendidos.

Sobre las 22.27 se cerró la votación y entonces el terreno quedó listo para los anuncios. Por tratarse de una placa positiva, el conductor Santiago del Moro fue informando, por orden al azar, quiénes se convertían en finalistas de Gran Hermano 2025.

La primera en salvarse fue Eugenia Ruíz. "Gracias gente por apoyarme, con lo insoportable que soy", le reconoció al público a través de las cámaras.

Pocos minutos más tarde, el uruguayo Santiago "Tato" Algorta se metió entre los cuatro mejores jugadores de la temporada. Celebró con agitación, saltando con toda su energía, tanto que hasta la propia Selva creyó que su compatriota se iba a caer. "¡No puedo creer, no puedo creer!", aseguró, aunque reconoció que no podía festejar como quería hasta tener la tranquilidad de que su amiga Luz Tito también estaba a salvo.

Foto: Captura de Telefe

Para su preocupación, el tercero en salvarse fue Ulises Apóstolo, que hizo el festejo más extraño de la temporada: improvisó un desfile por el patio y fue quitándose la ropa a medida que avanzaba, hasta quedar solo en ropa interior. El frío extremo no fue un obstáculo.

Pero finalmente Tato tuvo el festejo que tanto quería. Cuando se fue su coterránea, Selva, terminó en la piscina junto con Ulises y con Luz, eufóricos, los tres. Eugenia no se sumó por la cercanía que tenía con Selva, cuya partida le dejó un sabor agridulce.

Como aclaró Del Moro, apenas terminó el programa se retomó la votación, que sigue sobre la base de votos positivos ya acumulados hasta ahora.

Gran Hermano: Argentina está al borde de la definición. Este domingo, Del Moro ingresará a la casa y cenará con los cuatro finalistas, una instancia en la que adelantará novedades sobre la próxima temporada del reality.

El lunes habrá gala en vivo y en directo, y se irá una sola persona, también por voto positivo. El martes 24 será la gran final entre tres, que en Uruguay se podrá ver por Canal 10.