Publicidad

Partido redondo de Peñarol para volver a ganar en el Parque Central tras 93 años

Compartir esta noticia
Valentín Rodríguez festeja con algarabía el segundo gol de Peñarol en el primer minuto de adición. FOTO: Estefanía Leal.
ESTEFANIA_LEAL

COPA SUDAMERICANA

Los aurinegros superaron a Nacional en todas las facetas del juego y se posicionaron de buena forma en la llave de octavos de final. El gol de Gonzalo Bergessio le puso condimento al juego de vuelta.

Peñarol fue dominador de principio a fin del juego y venció con total justicia a Nacional 2-1 en el Gran Parque Central por el partido de ida de los octavos de final de la Sudamericana.

Los goles de Agustín Canobbio y del joven Valentín Rodríguez sentenciaron el resultado en una noche redonda para Peñarol, que quedó con un sabor extraño por el gol de Gonzalo Bergessio en la última jugada del partido, que dejó la llave abierta de cara a la vuelta del jueves 22 de julio en el Estadio Campeón del Siglo.

ARROLLADOR. Peñarol salió decidido a ganar el partido desde el principio; los aurinegros se pararon en cancha rival y pusieron mucha gente en ofensiva. Mauricio Larriera salió a jugar con un 4-2-3-1 bien marcado, donde la incidencia de los laterales Giovanni González y Joaquín Piquerez fue notoria en el trámite del juego, porque se involucraron constantemente en el ataque y le generaron problemas a un Nacional desconocido en cancha.

En 10 minutos, la visita ya había generado tres situaciones claras de gol, incluyendo un cabezazo en el palo de Fabricio Formiliano.

“Que no vuelva... Que no vuelvaaa”, insistía el DT de Peñarol cuando Nacionalbuscaba que la pelota circulara regresando hacia atrás cuando no tenía opción de pase. El floridense, así como también los suplentes carboneros, insistieron en este tema. A su vez, en la primera parte quedó de manifiesto cómo Peñarol quería que Guzmán Corujo y Nicolás Marichal fueran los que sacaron la pelota desde el fondo y muchas veces obligaron al pase largo de los zagueros, salteando líneas (porque Peñarol impedía que el balón pasara por los volantes, en especial por Gabriel Neves) y ese hecho generó un gran desgaste de Gonzalo Bergessio, sin siquiera generar peligro.

Walter Gargano fue la estrella del clásico. FOTO: Estefanía Leal.
Walter Gargano fue la estrella del clásico. FOTO: Estefanía Leal.

Una de las pocas veces en que el cordobés se pudo escapar de Formiliano y Gary Kagelmacher, le sirvió la pelota a Joaquín Trasante de frente al arco, pero el 14 no le pudo pegar bien y atajó sin mayores problemas Kevin Dawson.

A los 36 minutos, una buena jugada de Walter Gargano terminó con un remate rastrero de Piquerez que tenía destino de gol, pero apareció en toda su magnitud el arquero Sergio Rochet para evitar la caída de su arco.

En la última del primer período, Nacional no cortó a tiempo, Canobbio se asoció con Agustín Álvarez Martínez y colocó el primer gol del partido.

SUPERIOR. Alejandro Cappuccio, que había iniciado el partido con un 4-1-4-1 con Facundo Píriz como volante tapón, con la sorpresa en la inclusión del equipo de Cristian Almeida y colocando a Camilo Cándido como extremo por izquierda, modificó el esquema para el segundo tiempo, sacó a un desconocido Gabriel Neves y a Trasante, y le dio ingreso a Felipe Carballo y a Maxi Cantera, que demostró en el segundo tiempo que debió ser titular. Luego entró Andrés D’Alessandro y Nacional quedó con un 4-2-3-1; aunque amagó con una mejoría se quedó solo en eso y Peñarol volvió a adueñarse del trámite, trabajando el partido, manejando la pelota y generando situaciones claras de gol. Durante todo el juego, los aurinegros complicaron a las espaldas de los laterales, en particular de Almeida, que se vio desbordado.

Maximiliano Cantera tuvo un buen ingreso en Nacional. FOTO: Estefanía Leal.
Maximiliano Cantera tuvo un buen ingreso en Nacional. FOTO: Estefanía Leal

Un par de situaciones de Álvarez Martínez y otra de Formiliano, cuando Rochet perdió la pelota en un centro, fueron las más claras de Peñarol para sacar más ventajas, pero el que lo logró fue el juvenil Valentín Rodríguez en el primer minuto de adición, cuando quedó mano a mano con Rochet y definió de manera estupenda.

Todo era algarabía en Peñarol. Como dijo Larriera, el equipo “recuperó la memoria”, jugó bien y dejaba la llave casi sentenciada, pero el tanto de Bergessio en la última pelota del encuentro dejó la serie abierta, aunque Nacional deberá mejorar ostensiblemente el rendimiento que tuvo anoche si pretende clasificar a los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Así, los aurinegros volvieron a ganar de visitantes un clásico en el Gran Parque Central tras 93 años; el último triunfo había sido el 14 de octubre de 1928 con gol de Pablo Terevint por el Campeonato Uruguayo. 

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad