Una mujer de 39 años que habitualmente va a ver a Peñarol sola a la Henderson se fue en ambulancia del estadio a los 20’ por recibir una pedrada desde la hinchada de Cerro. Perdió mucha sangre, quedó asustada, y le dieron ocho puntos de sutura. Ya entrada la noche permanecía internada en un sanatorio de Montevideo.

Antes, miles de fanáticos Carboneros tuvieron que trabajar la paciencia en las inmediaciones del CDS, porque el operativo de seguridad no tuvo reparos en que tres camiones con fanáticos de Cerro llegaran 40’ antes del partido y se mezclaran con los aurinegros, generando disturbios por los que tuvo que intervenir la Policía con violencia, y por lo cual también hubo personas heridas.

Promediaba el primer tiempo y una bomba de estruendo estalló en la Henderson, otra vez lanzada desde la tribuna Güelfi, que estaba vacía, a no ser por 191 hinchas albicelestes que compraron su boleto. En el medio, lluvia de proyectiles, rotura de baños y de las herramientas que los bomberos tienen en la tribuna en caso de que sean necesarias.

Según explicó el presidente Ignacio Ruglio, estaba previsto (luego de observados los líos) que el partido se suspendería en el entretiempo, para que se pudiera evacuar primero a los hinchas de Cerro; para ello, ya se había hablado con el encargado de seguridad de la visita, para que tuviera pronto en las afueras los vehículos. Debido a que la cuestión se “calmó” en el tramo final del primer período, hubo marcha atrás y se decidió seguir jugando.

Foto: Ignacio Sánchez.

Así salieron los equipos al segundo tiempo, se disputaron 17’, pero mientras tanto los hinchas de Peñarol de la Henderson otra vez tuvieron que salir disparados de ese sector para no sufrir heridas, pues nuevamente los de Cerro estaban lanzando cosas. Conclusión: partido suspendido a los 62’ por el árbitro Gustavo Tejera, ya que las garantías no estaban dadas para continuar.

Fue como un triunfo para los hinchas de Cerro, que cantaron como queriendo celebrar la medida, incluso no dándose cuenta que su equipo estaba en el mejor momento, que había descontado 1-3 por el gol de Camacho y que había provocado una gran atajada de Campaña para evitar el 2-3.

Foto: Ignacio Sánchez.

De lado quedó lo que será un 3-1 para Peñarol en la noche en la que Terans volvió a ser el “Rey” poniendo un gol (de penal) y dos asistencias. De lado quedó el buen partido -con gol incluido- de Hernández, como de lado quedaron muchas otras cosas del juego que le permitió a Peñarol conquistar su cuarto triunfo consecutivo en el Uruguayo, pues el partido se lo darán como ganado.

No podemos mirar para el costado. Esos hinchas de Cerro que provocaron los líos no pueden entrar más a un estadio. Los encargados de seguridad tienen que hacer autocrítica. Y no se puede tolerar más seguir escuchando canciones que celebran muertes.