Cada vez que termina un partido y el equipo gana, Diego Aguirre se da media vuelta y mira fijo hacia la tribuna de Peñarol para conectar con la hinchada y celebrar. Ese momento que la Fiera define como mágico, se repitió ayer en el Estadio Luis Franzini, donde el carbonero le ganó 2-0 a Defensor Sporting y conquistó el Torneo Apertura a falta de dos fechas para el final.
Y muchos dirán o pensarán que lo del técnico es humo y que lo hace para la tribuna, pero nada más alejado de la realidad.
Esa conexión que el entrenador tiene con la hinchada no es nueva. Se construyó, se afianzó y se reforzó ayer en otro gran resultado para el equipo carbonero.
Y tal parece ser que la palabra éxito está relacionada con la historia de Diego Aguirre en Peñarol porque en su regreso al club, la Fiera ya cumplió el primer objetivo de la temporada: ganar el Torneo Apertura.

El mirasol lo logró con creces y con una gran campaña en la que suma 13 partidos con 11 triunfos y dos empates, y un saldo de 27 goles a favor (promedio de más de dos por encuentro) y solo seis en contra.
Y esa solidez defensiva y el poderío ofensivo fueron dos de los grandes aspectos que mostró Peñarol para adueñarse del titulo del Apertura.
Además, el equipo mostró varios pasajes de juego colectivo, intensidad y sobre todo, jugadores que entendieron el mensaje de la Fiera: no dar una sola pelota por perdida y dejar todo en la cancha.
Pero sumado a todo eso, la consagración mirasol se dio en una cancha siempre difícil para Peñarol y ante un rival de los que venía arriba como el Defensor Sporting de Martín Varini.

El partido que le dio el título a Peñarol
Al Parque Rodó fue el aurinegro, que sin ser un equipo que avasalló a su rival, fue efectivo y pegó en los momentos justos.
Cuando era el violeta el que mejor trataba la pelota y buscaba generar peligro sobre el arco mirasol, Damián García sacó un zapatazo que reventó el horizontal y Maximiliano Silvera —con todo su olfato goleador— la mandó a guardar para el 1-0.

La hinchada cantaba en la tribuna y el equipo respondía en cancha, pero las condiciones cambiaron a los 35’, cuando Silvera salió lesionado. Aguirre mandó a la cancha a Ángel González, el mirasol se quedó sin “9”, bajó la intensidad y sufrió varias llegadas de su rival.
El violeta no supo aprovechar sus chances, un poco por las grandes intervenciones de Washington Aguerre y otro poco por ineficacia.

Fue así que en los descuentos, Nahuel Acosta liquidó el partido y volvió a ser clave para un triunfo que esta vez fue de campeonato.
Peñarol ganó el Apertura con luz y a dos fechas del final le sacó 10 puntos a Nacional —juega mañana—, se metió en la definición del Campeonato Uruguayo 2024 y demostró que hasta ahora, es el mejor equipo del medio y que funciona como tal. Merecido.
-
Más que un título, un desafío: la racha negativa de los campeones del Apertura que buscará quebrar Peñarol
Diego Aguirre, el talismán de Peñarol: la Fiera y su receta mágica para sacar campeón al club de sus amores
Aguirre: la "felicidad" de "lograr el primer objetivo del año" y por qué Peñarol sufrió tantos lesionados
Un gran poderío ofensivo y solidez defensiva: los números de Peñarol en su consagración en el Torneo Apertura