Por Sofía Berardi
Un número desconocido llamó al teléfono y aunque Alejo Cruz (22) no suele responder estos llamados, contestó. Pero nadie habló al otro lado. Un rato después lo volvieron a llamar, y esta vez sí respondieron. Fue bajo el nombre de Esteban Conde. La llamada del entrenador de Danubiocuando apenas había finalizado la temporada 2022 motivó al atacante a aceptar la propuesta a su cuarto club tras su paso por Albion, Racing y Peñarol.

Todo esto después de hacer el baby en el Arapey Mendoza, Tacuarembó y Siete Estrellas (donde jugaron Fede Valverde y Palito Pereira). Interrumpió un año su pasión porque estudiar en el Liceo N°7 en la tarde no le permitía entrenar, pero al año siguiente Juan Ahuntchaín lo llamó para ir a Peñarolcuando tenía 13. Entrenó dos semanas y lo ficharon. Hizo todas las formativas, debutó en Primera el 30 de enero de 2022 y ganó la Supercopa. A partir de ahí dejó de sumar minutos, no lo tuvieron en cuenta y al extremo no le quedó más opción que dejar el club.

“No me fui dolido”, afirma sobre su salida quien pertenecía a la camada de Facundo Torres, Brian Rodríguez, Diego Hernández, Rodrigo Saravia y Ezequiel Busquets, y continúa: “Era un año bravo y yo necesitaba jugar. Uno hace todas las formativas y el sueño desde que entrás al CAR con 13 años es llegar a Primera. Yo pude, después las cosas no se dieron”.

Apostó por Racing, que estaba en Segunda, pero en un torneo atípico, con Defensor y Danubio dándole una competitividad distinta. Le costó, pero ese año se destacó y los goles aparecieron y le dio confianza. “Es un cambio muy grande cuando salís de Peñarol, son otras las realidades que encontrás. Creo que me adapté muy bien a los dos (Racing y Albion). Te encontrás con gente humilde, trabajadora, que te hace sentir muy bien. Me dieron mucha confianza, que era lo que yo quería”.

Foto: @SegundaAUF

Danubio está a siete puntos del puntero, que es Peñarol, y Alejo ha conservado la titularidad, disfrutando de la razón por la que vino: jugar. “Es un gran equipo, que ha sabido salir campeón uruguayo, me gustó la propuesta que me hicieron y el interés que demostraron. Estoy muy cómodo, tengo rodaje y se me vienen dando las cosas”.

Desde afuera se ve muy unido al grupo y el atacante lo confirma. “Tiran todos para el mismo lado desde que llegué. Somos muchos jóvenes y es más fácil adaptarse. A varios los enfrenté en formativas, a otros en Primera. Pero también hay referentes: Ribair Rodríguez, Mauro Goicoechea, Leandro Sosa, Sergio Rodríguez, Papelito Fernández...”, explica.

Unirse a la Franja también fue enfrentarse a la primera experiencia de Conde como DT, pero Alejo confió. “Supongo que todos tenían incertidumbre, ser primerizo no es fácil. Pero él me comentó que ya se venía preparando hace un buen tiempo y la va llevando bien”, confiesa. Conde le pide a todos que sean solidarios con el equipo y a Cruz que “del medio para adelante que haga lo que “sabe hacer”, que la confianza “va a estar”.

El extremo, que disputó ocho partidos, marcó dos goles y asistió en cinco oportunidades con Danubio, tiene para elegir en lo que respecta a aliados en el ataque: Sebastián Fernández, Guillermo May o Diego Vera. Pero Kevin Lewis, que se mueve por la banda izquierda, es con quien funciona mejor y se entiende más. Esto tiene una explicación y es que los futbolistas juegan juntos hace muchos años, han hecho casi el mismo trayecto en simultáneo. Ambos se formaron en Peñarol, jugaron en Albion en 2022 y ahora llegaron juntos a la Franja. No tienen el mismo representante, todo ha sido casualidad. “Venimos de un proceso largo juntos. Todo el mundo pregunta si tenemos un contrato firmado para ir a los equipos. Cuando fui a Albion me enteré que firmó el día antes que yo y nos reíamos. Ahora también, cuando llegamos se reían todos. ‘Ustedes andan juntos para todos lados’, nos decían. Con él tengo una relación desde las formativas, pese a que es una generación más grande”, explica Cruz, que agradece llegar a un club nuevo acompañado.

Juan Manuel Ramos/Archivo El Pais

En los últimos partidos también congenió conFranco González, a quien conoce de pequeño. “Jugué con el hermano en Cuarta de Peñarol y el Cepi era una ratita que iba a vernos a los partidos. Tengo confianza, pasamos jodiendo. Creo dentro de la cancha se refleja”, recuerda.

El ‘16’ de la Franja confiesa que el objetivo es “ser campeones uruguayos”, y dice que “de a poco se afianzan a la idea del Coco”.

El equipo de Maroñas tiene por delante la fase de grupos de Copa Sudamericana (el sorteo será el 27 de marzo) y los de Conde vienen con el envión de vencer a Defensor. “Desde el primer momento que supimos que se iba a jugar con Defensor, fue distinto, para el hincha como para los jugadores. Todos tenían en mente que ese partido había que ganarlo como sea, pasar para quedar en la historia”, sostiene Cruz.

Para enfrentar ambos desafíos, Danubio abrochó una alta de calidad: Jonathan Álvez (34). “Le va a venir bien al grupo, ya fue campeón uruguayo (2014) y ya sabe lo que es Danubio, va a venir a aportar al grupo desde la experiencia, a lo grupal. También sirve para la competencia sana interna en el grupo”, opinó Cruz sobre la llegada del nueve.