@|A los vecinos de los barrios de Pocitos y Punta Carretas les decimos: ¡tengan cuidado! Nada bueno saldrá de los genios de la burocracia departamental.

Por experiencia, los vecinos del barrio Colón hace 14 años, debido al proyecto del Corredor Garzón, solicitamos a la IMM una reunión en el Centro Comercial de la zona. De mala gana vinieron unos olvidables representantes, quienes dijeron que debíamos agradecer que ese “corredor” llegara a la zona.

Ehrlich, Ana Olivera, Daniel Martínez todos coincidieron del fracaso de este proyecto ante la prensa y la ciudadanía. Cosse todavía no se dio por enterada de que existe este error sin solución.

Leo que Pablo Inthamoussu declaró sobre Pocitos y Punta Carretas: “... Proyecto que no está escrito ni cerrado”.

En Colón tenemos sobre los 6 km del Corredor Garzón estructuras de hormigón de 3 metros de largo y 0,5 de ancho, 27.000 m2 que alcanzarían para cubrir 5 canchas reglamentarias de fútbol; amén de las paradas (todo en el medio de la calle, hormigón y hierro) creando el caos generalizado en el tránsito del barrio. Y termina en una terminal vacía, a la cual, para llegar desde la plaza Vidiella a la misma deben sortear 12 esquinas con semáforos.
Todo realizado en forma inconsulta; a lo que las fuerzas vivas del barrio Colón parecen haber abandonado la lucha.

Por lo visto, estas administraciones elegidas por el pueblo montevideano tienen una debilidad por el gasto de millones de dólares.