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Inundaciones desatan una situación crítica en varios puntos del país: arroz sin cosechar y soja bajo agua

El arroz alcanzó un 90% de la superficie total cosechada, pero queda un 10% de trilla por realizar, lo que significa unas 15.000 hectáreas del cereal. Para la soja, el panorama es aún más complicado.

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Crecida: lluvias provocaron que ríos y arroyos crezcan hasta obstruir rutas y espacios públicos
Crecida: lluvias provocaron que ríos y arroyos crezcan hasta obstruir rutas y espacios públicos
Foto: Guillermina Urrutia / El Telégrafo

El escenario establecido por el exceso de lluvias en muchos puntos del país se encuentra en un punto crítico. Si bien ha existido variabilidad en el régimen pluviométrico dependiendo la zona y en muchos casos el panorama aún es reversible, se esperan pérdidas considerables para la agricultura nacional, especialmente en el este del país.

En el caso del arroz, se alcanzó un 90% de la superficie total cosechada, pero queda un 10% de trilla por realizar, lo que significa unas 15.000 hectáreas del cereal. En este caso, las pérdidas aún no se han podido cuantificar, incluso porque todavía no se sabe si esa producción se podrá cosechar o se tendrá que abandonar.

Los problemas son varios: por una parte las afectaciones en calidad o pérdidas en kilos, y por otro lado los daños en la infraestructura y caminería que complican incluso que los productores lleguen a las chacras llegado el caso. El cultivo de arroz tiene una ventaja frente a la soja, y es que una vez que culminen las lluvias y salga el sol, se podrá cosechar rápidamente, pero todo depende de lo que suceda con el clima en las próximas horas y el estado de los caminos.

“En Cebollatí hay pluviómetros que superaron los 400 milímetros, se llenaron y pasaron y no sabemos por cuánto”, comenzó diciendo Freddy Lago, presidente de la Asociación de Cultivadores de Arroz, quien sostuvo que quizás esta no sea la realidad de toda la zona este, pero pensar en promedios de 300 a 350 milímetros generalizados desde el lunes hasta hoy es perfectamente razonable.

“Hay inundaciones importantes y seguramente este sea uno de los episodios mayores de la historia en eso, de esos que quedan en la memoria”, estableció Lago.

A su vez, las complicaciones pueden continuar en caso de que las aguas tarden varios días en bajar, visto y considerando que muchos de los caudales llenos en la zona de Laguna Merín y Laguna de los Patos llegarán algunas horas más tarde a distintos puntos de nuestro país. El panorama no muestra quizás situaciones tan caóticas como las que vive Río Grande do Sul, pero es para estar atentos y preocupa.

“Nosotros estimábamos desde antes de estas lluvias pérdidas de 500 kilos por hectárea en el arroz debido a factores climáticos, pero con este nuevo escenario pueden ser mayores”, dijo el presidente de ACA, agregando que también el tema de la caminería, que ha estado en la opinión pública en los últimos días, incide de forma importante, especialmente en el departamento de Rocha. En Artigas hay algunos productores con arroz volcado y algunas complicaciones, así como situaciones puntuales en el centro del país, pero lo más complicado se sitúa en el este, que además es la zona que más arroz concentra en superficie.

Como contrapartida y a causa de la lamentable situación que acontece en Brasil, donde muchas de las zonas inundadas son zonas arroceras por excelencia, el precio puede tener un fortalecimiento porque no se sabe cuánto arroz menos habrá en el mercado en el tiempo que viene.

Dramático: esperan que el agua baje rápido para retomar labor.
Dramático: esperan que el agua baje rápido para retomar labor.
Foto: Archivo El País

Soja

Para la oleaginosa en el este del país, que suele hacerse en rotación con las chacras de arroz, el panorama es aún más complicado. En primer lugar, se puede afirmar que el porcentaje de cosecha que se lleva realizado es muy menor, y al día de hoy, hay muchas chacras que se encuentran bajo agua, como ilustra la foto que acompaña la nota.

Igual que en el caso del arroz, las pérdidas no se han podido evaluar, pero seguro existirán. Esto se da en un año en el cual las chacras venían preparándose para entregar una buena producción.

Por el lado del precio, en los últimos días se ha visto un repunte. En buena medida, esto se debe también a las importantes pérdidas que habrá en Brasil. Si bien el país norteño tiene una superficie enormemente superior a la de Uruguay, también significa que habrá menos soja en el mercado.

En otros puntos del país, las demoras en la cosecha de soja, que a su vez seguramente pierdan kilos por estas complicaciones, enlentecen también las siembras de invierno por falta de piso y condiciones, y esas consecuencias acompañarán a los productores por varios meses y seguramente entreguen su veredicto en la próxima primavera. En pocos meses, Uruguay pasó de una de las peores sequías de su historia a inundaciones que probablemente no tengan precedente en algunos puntos del país, incluso con “rutas cortadas que nunca se cortaron”. Sin entregar conjeturas que no nos corresponden, parece ser de consenso que “da para reflexionar”.

Solidaridad

La cara más dura de estas inundaciones no es la productiva o la de las pérdidas económicas solamente de los productores, sino la de personas que han tenido que ser evacuadas o se auto evacuaron, y perdieron una enorme cantidad de sus pertenencias, con daños en sus casas que les será muy difícil subsanar.

En este sentido, muchas asociaciones y gremiales se preparan para ayudar en lo que se pueda, y de esta forma salir todos juntos de esta triste situación que atravesamos. Pasó en la pandemia, pasó el año pasado en la sequía, y en este no será la excepción.

Es por eso que en las diferentes regionales de la Asociación de Cultivadores de Arroz de Treinta y Tres, Río Branco, Cebollatí, Tacuarembó, Melo y Artigas se están recibiendo artículos de prioridad como ropa de abrigo, colchones, artículos de higiene personal y alimentos no perecederos.

Crecida: lluvias provocaron que ríos y arroyos crezcan hasta obstruir rutas y espacios públicos
Crecida: lluvias provocaron que ríos y arroyos crezcan hasta obstruir rutas y espacios públicos
Foto: Guillermina Urrutia / El Telégrafo

Más de 1.300 desplazados por inundación: el este del país tiene los registros más altos

Estimamos que lo peor ya pasó”, aseguró a El País Santiago Caramés, director del Sistema Nacional de Emergencias (Sinae), tras la jornada de ayer. Las personas desplazadas de sus hogares pasaron a ser 1.347 en todo el país, y los departamentos del litoral continúan siendo los más afectados por las precipitaciones de los últimos días, así como también por algunas consecuencias de las inundaciones en Brasil.

“Se han sentido secuelas de lo que pasa en Brasil, pero también ha llovido muchísimo en nuestro territorio”, señaló Caramés y agregó que si bien estima que “la peor parte ya pasó”, “hay que prepararse para cuidar a los desplazados del descenso de temperatura” que se pronostica para los próximos días.

Las autoridades departamentales de todo el país se encuentran realizando trabajos de prevención y evacuación debido a las copiosas lluvias de los últimos días.

Según datos del Instituto Nacional de Meteorología (Inumet), desde el comienzo de mayo hasta la madrugada de ayer, algunas zonas del país llegaron a registrar más de 300 milímetros (mm) de lluvia acumulados -que equivalen a lo que se espera en dos o tres meses. Los puntos que registraron mayor volumen acumulado fueron la localidad de San Luis, en Rocha, con 347 mm y la ciudad de Treinta y Tres con 332,4 milímetros.

El total de personas desplazadas para la tarde de ayer ascendió a casi al doble con respecto a las informadas por el Sinae el martes. Para las 18:00 horas de ayer se registraban 1.347 personas desplazadas de sus hogares, siendo 404 por evacuación y 943 las autoevacuadas.

El departamento con mayor cantidad de personas que abandonaron sus viviendas continúa siendo Treinta y Tres.

Su intendente, Mario Silvera, dijo en conversación con El País que “el número aumenta cada hora”. “La situación es muy angustiante y complicada”, aseguró el jerarca y agregó que si bien las precipitaciones cesaron ayer, continúan esperando “que lleguen las aguas de la zona alta, de las nacientes del río Olimar”.

Para la noche de ayer, este río se encontraba 9,60 metros por encima de altura normal, y las autoridades departamentales estiman que en los próximos días pueda alcanzar los 10,30 metros sobre sus valores normales, convirtiéndose en la creciente más alta de su historia -superando los 10,10 de 2007.

"Estimamos que la peor parte de este fenómeno ya pasó", aseguró Caramés
"Estimamos que la peor parte de este fenómeno ya pasó", aseguró Caramés
Foto: Guillermina Urrutia / El Telégrafo

Consultado por el estado del puente del río Olimar, Silvera informó que el Ministerio de Transporte y Obras Públicas envió a un ingeniero “para chequear que todo estuviera en orden”, quien no encontró anomalías en su estructura. Por este motivo, únicamente fue restringido el tránsito de las vías laterales -ciclovías.

Si bien hasta el momento el departamento cuenta con 620 desplazados, Silvera prevé que se superen los 1.000 en los próximos días.

La ciudad de Río Branco, en Cerro Largo, es otra de las que está sufriendo el impacto de las precipitaciones.

Según confirmó a El País el inspector de Primaria de Cerro Largo, Marcelo Alvariza, múltiples escuelas rurales se encuentran empleando un método virtual para poder continuar las clases con normalidad.

“Lo importante es que los niños no pierdan contacto con la escuela”, dijo Alvariza y agregó que esto se debe a que en muchos casos las crecidas de ríos y arroyos provocan que tanto los estudiantes como sus docentes no puedan llegar a la escuela.

“El acostumbramiento a algunas herramientas durante la época de pandemia sirvió para momentos como estos”, señaló.

Por otra parte, Montevideo sufrió en la madrugada de ayer la mayor tormenta de los últimos días, junto con fuertes truenos que cesaron sobre el mediodía. También se registraron rachas de fuertes vientos.

Fuentes del Sinae indicaron a El País que durante la jornada de ayer UTE llegó a registrar un pico de 28.000 usuarios sin acceso a sus servicios.

Consultado con respecto a los pronósticos para los próximos días el director del Sinae aseguró que “es necesario dar tranquilidad a los departamentos” con respecto a que “no va a ocurrir lo mismo que en Brasil”.

Preparación

Otro de los puntos en los que hizo especial énfasis Caramés fue en la necesidad de “dar un buen cuidado” a las personas desplazadas de sus hogares.

“Es clave tener en cuenta que se vienen días más fríos, por lo que ya coordinamos para poder brindarles abrigo”, señaló el jerarca nacionalista.

Además de colaboraciones entre el Sinae, autoridades departamentales y algunas empresas que se encargaron de hacer donaciones para mejorar la situación de las familias trasladadas, el Estado aprobó compras por más de $ 3,4 millones en 1.500 kits de limpieza y 800 camas plásticas.

Estos elementos fueron solicitados por el Sinae en noviembre del año anterior, y se aprobaron el pasado lunes tras la firma de la vicepresidenta Beatriz Argimón.

Según supo El País, los productos ya se encuentran en poder del organismo para ponerlos a disposición de los necesitados en las próximas horas.

LULA AGRADECE

Fuerza Aérea brinda ayuda en Brasil

La situación que está viviendo el estado de Río Grande del Sur en Brasil continúa siendo de catástrofe. Según reportes nacionales, casi un millón y medio de personas se han visto afectadas por las tormentas e inundaciones. Más de un centenar de personas están desaparecidas, mientras que ascendió a 100 el número de muertes.

Uruguay se encuentra colaborando con Brasil a través de la Fuerza Aérea. Parte de la ayuda uruguaya consistió en enviar un helicóptero modelo Bell 212 FAU 034 con el objetivo de que realice labores de socorro y primeros auxilios.

El presidente del país norteño, Luiz Inácio Lula da Silva, agradeció a través de redes sociales el apoyo de Uruguay. “Un helicóptero prestado por el país amigo está en funcionamiento. Brasil agradece a Uruguay su ayuda y primeros auxilios”, escribió Da Silva.

Por su parte, el embajador uruguayo en Brasil escribió en su cuenta de X -antes Twitter- “Somos todos gaúchos, hoy en el auxilio humanitario y mañana en la reconstrucción de Río Grande del Sur”.

Hasta el momento, el helicóptero uruguayo ha trasladado a más de una decena de personas, así como también alimentos, medicamentos, abrigo y agua, elementos principales solicitados por las familias afectadas.

Autoridades monitorean constantemente la situación de las familias
Autoridades monitorean constantemente la situación de las familias
Foto: Guillermina Urrutia / El Telégrafo
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Preocupa que cielo cubierno no permita evaporar

Las copiosas precipitaciones tuvieron una pausa en varias zonas del país donde causaron estragos en los últimos días. Sin embargo, el meteorólogo y director de Climatología de Inumet, Mario Bidegain, explicó a El País que se espera cielo cubierto para los próximos días, lo que “significa que no se va a dar la evaporación del suelo”, perjudicando la producción. Además, según han comunicado desde Inumet, pronostican que a partir del próximo viernes se retomen las precipitaciones, lo que agudizaría el problema.

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