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La "pecera" a la que ir por inversores, los acuerdos comerciales a apostar y lo que no se sostiene

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Leonardo Isoardi
Nota a Leonardo Isoardi, contador publico uruguayo socio de CPA Ferrere, en su oficina en Montevideo, ND 20210827, foto Marcelo Bonjour - Archivo El Pais
Marcelo Bonjour/Archivo El Pais

ENTREVISTA

En entrevista con El País, el nuevo socio director de CPA Ferrere, Leonardo Isoardi se refirió al clima de inversión, los beneficios tributarios que hay que mantener, la educación como problema y más.

El miércoles 1° de septiembre, Leonardo Isoardi asumió el “gran desafío de ser el socio director de la consultora CPA Ferrere en sustitución de Nelson Mendiburu, uno de los fundadores de la firma, que se retiró al cumplir 60 años (así lo establece CPA para sus socios). “Un concepto marco que tenemos es: tenemos que ser una plataforma de servicios para la región” y “queremos hacer foco en Colombia, México y Estados Unidos, de acá a los próximos dos años. Es el principal impulso que quiero darle”, cuenta Isoardi en entrevista con El País.

Este contador público, de 44 años de edad, ingresó a la firma en 2007 y hace dos años comenzó el proceso de transición en el que compartió la dirección estratégica de CPA con Nelson Mendiburu. De este cambio, de cómo está Uruguay para atraer inversiones, de la estrategia del gobierno en el Mercosur, el empleo y más, Isoardi habló con El País.

-¿Cómo ve el clima inversor en Uruguay?

-Vemos un clima de negocios, donde claramente el éxito del manejo de la pandemia ayuda un montón, lo que está pasando en la región también ayuda. El clima de negocios, no solamente por las inversiones que llegan, sino por las inversiones que están realizando los uruguayos es diferente, totalmente diferente al primer semestre de este año. Vemos tres grandes rubros: real estate por las personas que están viniendo y porque sigue habiendo un déficit de vivienda, el agro con los precios que hay hoy va a seguir siendo un motor de crecimiento y después una cosa que está despertando que es el tema de servicios. Hace un año y medio había un montón de servicios que no estaban, que ahora empiezan a demandar otros servicios. Hay que ayudarlo al clima de negocios en algunos sectores, no bajando los incentivos tributarios y en otros tenemos que ir un poco más rápido. Por ejemplo en cannabis tendríamos que ir urgente al sector alimentos, que es lo que está haciendo el resto del mundo, porque el medicinal que es donde Uruguay está haciendo foco hoy creció, pero el otro crece exponencialmente. Paraguay que pasó a ser el líder de la exportación de cáñamo industrial es alimentos.

-¿Qué falta para desarrollar el cannabis, porque en el medicinal las empresas se quejan de que todavía hay trabas?

-Las trabas para exportar se fueron mejorando, pero faltarían dos cosas. Por un lado, mayores reglas a la hora de exportar. Debería haber un check list. Por ejemplo si vas a exportar soja ya sabés lo que tenés que tener. Que haya un carril donde esto fluya más rápido que lo normal en el cannabis también. Ha mejorado muchísimo, pero podría mejorar más. Lo otro es que la normativa nuestra fue de vanguardia, hoy sigue siendo muy buena, pero la falta la pata alimentos, le falta hacer foco en crear materia prima o alimentos semi elaborados, con cannabis, que aparte es lo que sabemos hacer: materias primas para alimentos. Es el foco que nos falta y el mundo está yendo hacía ahí.

-¿Uruguay podría atraer inversión extranjera en este sector?

-Sí, de hecho hay varios clientes internalizando esto, pero están a la espera. Esto tiene un ciclo, para poder estar cosechando en marzo, hay que empezar a plantar en octubre o noviembre. Entonces, para poder hacer eso, muchos dicen: si no tengo el decreto, hago el cannabis, lo proceso y después ¿a quién le vendo? Uruguay tiene todo para atraer a esos inversores, porque tiene una normativa probada. Lenta, rápida, pero funciona. Necesitamos abrir ese camino.

-Muchos empresarios uruguayos cuestionan que para que Uruguay sea competitivo y poder invertir, únicamente se logra con las condiciones que le dieron a UPM: una zona franca y otros beneficios. ¿Cómo ve eso?

-Depende en qué sector. Creo que Uruguay en el sector tecnológico es competitivo y lo ves. En el sector industrial, depende en qué nicho, hay empresas que se quieren instalar en Uruguay para hacer foco en otro mercado. Hay empresas peruanas que se quieren instalar para vender a Perú, hay empresas argentinas que se han instalado. Ahora, instalarte para vender al mercado local, como siempre somos chicos y muchas veces la escala no da. Si mirás en la región, no lo veo tan así (como dicen). Por supuesto, basándome en los incentivos fiscales actuales. Con el actual régimen podés obtener muy buenas exoneraciones y eso te hace bastante competitivo con respecto a la región. Una cosa que está clara, es que el inversor que va a poner una planta de algo en Uruguay, valora muchísimo más la estabilidad económica, política, el manejo de la pandemia, las reglas claras, que el inversor que viene y compra capaz un apartamento en Punta del Este que quiere que crezca y lo revenda o el que viene y hace una compra o fusión de una empresa chica, está cuatro o cinco años y se va. Entiendo que en algunos sectores pueda haber menos rentabilidad, pero el que viene de afuera valora enormemente lo que damos por hecho. Nosotros hay muchas cosas que damos por hecho, que los inversores no pueden creer: por ejemplo libertad de transferir capitales. Hay muchos países, sin ir más lejos Argentina, donde la transferencia (al exterior) va al Banco Central y es este el que la tiene que liberar, eso acá no pasa. Son cosas, que uno dice “es obvio”, pero para nosotros es obvio. El que viene y pone una planta y da empleo a 300 o 400 personas, valora más eso que tener tres puntitos más de rentabilidad.

Un Contador Polifuncional
Leonardo Isoardi
Leonardo Isoardi
Edad44 años
Hincha dePeñarol y Ferrocarril de Salto
Estado civilCasado, dos hijos: Magdalena (12 años) e Ignacio (8 años) 

Nacido en Salto, Isoardi es contador público por la Universidad de la República. Ingresó a CPA Ferrere en 2007, es socio de la firma desde 2013 y desde el pasado 1° de septiembre es socio director (el principal cargo) en la consultora. "Mi carrera inició en impuestos, después en 2012 me cambié para Business Process Outsourcing (CPA tiene la práctica más grande en Uruguay), en 2014 me hice cargo de la operación de la firma en Paraguay y Bolivia. En 2018 me eligieron como sucesor de Nelson Mendiburu y me empecé a meter más en la consultoría", contó Isoardi.

Como parte de su rol en CPA, Isoardi asesora a organizaciones del sector corporativo, financiero y público en el desarrollo de negocios, estructuración financiera y en el diseño de procesos para la toma de decisiones de gestión.

Es consultor en la tercerización de procesos y consultoría gerencial. Tiene una amplia experiencia en planificación tributaria y en el apoyo a inversores en la región. Asesora a las principales instituciones financieras de Uruguay y a diversos clientes nacionales y multinacionales de todos los sectores de actividad.

Fue docente de Finanzas, Tributaria, Relaciones Laborales y Contabilidades Especiales en la Facultad de Ciencias Económicas y Administración de la Universidad de la República, también fue docente del Postgrado de Tributaria y Finanzas y responsable de la Cátedra de Tributaria III de la Universidad Católica.

-¿Cómo ve esta discusión mundial de un sistema tributario global para las empresas tecnológicas y que las grandes multinacionales paguen un impuesto a la renta mundial mínimo, lo que pone en cuestionamiento los regímenes que tiene Uruguay de zona franca, tributarios?

-Le veo un impacto. A nosotros nos va a llegar. La OCDE nos va a ir llevando hacia ese régimen. Cuándo y cómo es lo que tenemos que ver. Pero veo que nos va a pegar. Nos va a pegar porque no es algo que se le ocurrió a alguien un día, sino es algo que es el futuro. Son reglas claras, por un lado te ponen reglas claras.

-Pero, ¿puede afectar esa llegada de inversiones extranjeras?

-Dependerá. Creo que depende cómo se imponga, es cómo nos va a afectar. Pero damos por sentado muchas cosas, que el resto no tiene y que valora enormemente instalarse en Uruguay. Por eso depende cómo se reglamente. Si se reglamenta para todos iguales, no nos va a afectar. Si no es así, hay que ver cómo quedamos parados.

Leonardo Isoardi, socio de CPA Ferrere
Leonardo Isoardi, socio director de CPA Ferrere. / Foto: Leonardo Mainé

-Pero, ¿cómo se atraen inversiones entonces?

-En las inversiones hay dos peceras. Vos vas con una caña de pescar y en una pecera tenés a los que por ejemplo quieren invertir en un apartamento y el que cae en Uruguay es porque lo usa, o lo disfruta, o porque tiene familia o fue hace mucho tiempo. Esos caen en Paraguay, en Bolivia, en Miami. Esa es una pecera. La otra pecera es la que te genera más empleo, está dispuesta a renunciar a esos puntitos de rentabilidad: los centros de servicios compartidos que se instalaron, las tecnológicas que se están instalando. Ven no solo que las personas están mejor preparadas, ven una estabilidad para su negocio que el resto no les da. Esa pecera es en la que tenemos que pescar.

-Respecto al empleo, Uruguay arrastra un problema educativo desde hace bastantes años y hay otro desafío que es la automatización de puestos de trabajo, ¿qué es lo que falta en educación y por otro lado cómo se recapacita a las personas cuyos empleos corren riesgo de ser automatizados?

-Para Uruguay claramente el principal problema es la educación. Si nos imaginamos un Uruguay creciendo y al mundo, no se sostienen estos niveles. Si no cambiamos la educación, esto no se sostiene. Para mi es el principal problema del país hoy, no minimizo el resto, pero la educación es el foco principal. Ahora ¿cómo se conjuga esto con lo que ocurre en el sector tecnológico donde no hay suficientes trabajadores? La competencia ayuda a que se pague más y muchas veces se complementan, porque las empresas que vienen traen gente del exterior pero no permanente, sino que le enseñen a los que toman. Respecto a la automatización es relativo. Si Uruguay sale al mundo y consigue nuevos mercados, los puestos de trabajo que se podrían perder por automatización, puede ser que algunos lo pierdan, pero hay que apostar a reconvertirlo y que siga en el mercado laboral. Tímidamente algunas cosas están pasando, pero tenemos que acelerarlo más en eso.
CLAVE

Las transformación de una consultora en 25 años

Semanas atrás, la consultora CPA Ferrere cumplió 25 años, en ese lapso, “formamos más de 3.000 profesionales”, remarcó Isoardi. La firma se adaptó a la situación generada por el COVID-19 fácilmente en cuanto al trabajo. Hoy “tenemos un régimen híbrido (presencial y con trabajo en casa), pero flexible. Hoy es viernes y no hay nadie (en la oficina), si rinde que no venga el viernes, que venga el martes, el jueves. Que venga para generar la cultura, pero la gente lo que más valora es su tiempo, la flexibilidad”, explicó el nuevo socio director de CPA Ferrere.

En 25 años la firma ha mutado. “Cuando esto arrancó en 1996, CPA se fijó un objetivo que era ser la representante de Andersen (una de las consultoras más grandes del mundo en ese momento) en Uruguay y lo logró. En 2002 con el caso Enron (uno de los mayores fraudes empresariales de la historia) y cuando Andersen desaparece (era la auditora de Enron), hubo que repensar todo”, contó Isoardi.

“Como toda empresa de este estilo, tenés que tener un departamento grande que sea el ancla: en las big four (Deloitte, KPMG, Ernst & Young y PwC) es auditoría, en nuestro caso es Business Process Outsourcing (BPO.) Empezamos a hacer outsorcing: lo que hace el contador típico, llevar la contabilidad los impuestos y la estrategia que se fijó en ese momento fue que apenas empezaramos a crecer, teníamos que tener un departamento de consultoría fuerte y ahí vinieron en 2006 Bruno Gili y Gabriel Oddone (socios de CPA). Y de la mano de Ferrere Abogados, hubo una estrategia de ir un paso más allá. En 2007 cuando llegamos el resto de los socios, la estrategia fue que consultoría debía diversificarse y especializarse en determinadas áreas. Hoy tenemos 12 áreas especializadas”, relató Isoardi.

Otro hito importante de CPA Ferrere fue en 2003 cuando el fallecido Daniel Ferrere (fundador del estudio de abogados) "dijo que era momento de buscar la regionalización, explicó que teníamos que ser los líderes en los países chicos: desembarcó en Paraguay y luego en Bolivia. Primero era tener el estudio de abogados fuerte para luego empezar con CPA y así ocurrió. En 2012 cuando el estudio en Paraguay era líder, fue el momento de impulsar CPA. En 2014 me dieron la responsabilidad de Paraguay. Lo mismo con Bolivia", explicó el socio director de la consultora.

"En 2012 en Paraguay éramos cuatro y hoy somos 150 personas trabajando. Siempre nos propusimos seguir creciendo para darle oportunidades a nuestra gente", destacó Isoardi.

"Hace tres años que empezamos a prestar servicios en Centroamérica. En el caso de testing, si vas a cambiar tu core (sistema) bancario, necesitás alguien que te ayude a hacer la migración de datos, que es algo muy sensible. Nuestro departamento de consultoría, con herramientas desarrolladas por nosotros, hace esa migración de datos y la hemos hecho en muchos bancos. Por ejemplo, en Colombia GNB compró el HSBC, y nosotros hicimos la migración de datos. Entonces nos dimos cuenta que nuestros productos estaban a la altura de esos servicios. De la mano de partners locales empezamos a prestar esos servicios en la región. Surgió la idea de hacer outsorcing en otros países y de diversificar más y ahí apostamos a Guatemala, básicamente porque había un nicho de mercado y hace tres años estamos y hoy somos 12 personas allí", concluyó Isoardi.

-Mencionó que Uruguay tiene que abrirse al mundo. El gobierno ha optado por una estrategia en el Mercosur de decir que quiere salir a hacer acuerdos comerciales y ha tenido la oposición argentina. ¿Es viable esa estrategia de Uruguay negociando solo?

-La estrategia de Uruguay en el tema Mercosur es buena, más allá que tenga éxito o no. Somos un país chiquito, no podemos quedarnos en esto solo de la región, tenemos que salir al mundo. El Mercosur cuando fue creado, fue básicamente para bienes y si ves todo lo que sucede es bienes, pero falta la pata servicios. Uruguay estoy convencido que tiene que salir a buscar acuerdos comerciales por los bienes, pero debería buscar acuerdos también en servicios. Uruguay tiene que ser una plataforma que le venda servicios a la región y tener acuerdos de servicios. Por ejemplo, le vendo servicios a Brasil y me retienen impuestos, a Estados Unidos lo mismo. Nos compramos el tema de que somos chiquitos y a veces es bueno, pero en esto es buenísimo ser chiquito porque podés brindar ese servicio y podés hacerlo escalable. Las tecnológicas, nosotros en CPA, tenemos un alto porcentaje de nuestros servicios en el exterior con gente local. La pandemia nos trajo algo muy bueno, que es “no importa donde estés, si sos bueno, lo podés hacer”. En CPA tenemos mucha gente en el interior que no viene a Montevideo. Hay empresas tecnológicas de Montevideo que tienen gente trabajando en Guichón, Treinta y Tres, nosotros tenemos gente trabajando en Tacuarembó, Maldonado. Con servicios no tenemos que comprar eso que somos chiquitos. Hay que preparar a las empresas para exportar. Hay que hacer un canal en el Estado para el que piensa exportar tenga facilidad para hacerlo.

-¿En servicios qué más debería hacer el gobierno?

-Lo que debería estar sobre la mesa es buscar acuerdos para servicios, no solo para bienes. Hay mercados que son solo para bienes, hay mercados que son para bienes y servicios, pero hay otros que son solo para servicios y esos mercados también tenemos que atacarlos, hacer foco en ellos. Hay que tener una estrategia diferenciada, entiendo que el gobierno se está preparando para eso. Eso implica que las empresas se preparen, hay que tener un respaldo, un montón de cosas que se evalúan.
Leonardo Isoardi
Leonardo Isoardi, socio director de CPA Ferrere / Foto: Marcelo Bonjour.
CPA Ferrere

Una empresa uruguaya que compite con las cuatro multinacionales más grandes

¿Cómo compite una firma uruguaya con las big four? “Nuestra principal herramienta es la innovación y luego el involucramiento con los clientes: no solamente prestamos el servicio, nos involucramos en la empresa. Y la tercera es nuestro ADN comercial. Tenemos una flexibilidad a la hora de prestar servicios o crear nuevos servicios, que ellos (PwC, Deloitte, KPMG, Ernst & Young) no tienen. Ahí es donde marcamos la diferencia”, respondió Isoardi.

"Hoy tenemos ingenieros telemáticos y es imposible que una de las big four pueda hacer esto por distintos motivos. En consultoría, cuando nadie hablaba de analítica y de inteligencia de datos, nosotros ya empezamos y fuimos formadores. La gran diferencia es estar un paso adelante, innovando", afirmó el socio director de CPA Ferrere.

Cuatro nuevos socios que se incorporaron

Además de que Leonardo Isoardi asumiera como nuevo socio director de CPA Ferrere, el pasado 1° de septiembre se incorporaron otros socios a la firma: Alfonso Capurro, Florencia Etcheverrigaray, Alfredo Poggi y Simón Waisrub. Ellos cuatro son parte del cambio generacional en CPA, es que dos de los principales socios como Bruno Gili y Gabriel Oddone están a unos años de cumplir los 60 y por tanto tener que retirarse.

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