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Los exportadores uruguayos rechazan la propuesta del gobierno de Milei de cobrar la deuda con un bono

Miran con desconfianza al nuevo instrumento que creó el Banco Central de Argentina, para saldar las deudas comerciales que el regulador mantiene con los importadores de su país.

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Puerto de Montevideo
"Estimamos una deuda cercana a los US$ 20 millones", dijo Márquez
Foto: Leonardo Mainé

El sector exportador uruguayo monitorea a diario los cambios normativos de Argentina vinculados a la operativa de comercio exterior, y evalúa con escepticismo el nuevo instrumento del Banco Central del país vecino (BCRA) para cancelar la deuda comercial que mantiene con los importadores de su país: los Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreal).

Según los datos oficiales, hasta la semana pasada, las empresas argentinas registraron ante el padrón de la Secretaría de Comercio y de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) de ese país, una deuda comercial con proveedores en el exterior, cercana a los US$ 26.000 millones.

El registro de esa deuda en el padrón fue un trámite obligatorio para todas aquellas empresas argentinas que acumularon deudas con proveedores extranjeros hasta el 13 de diciembre de 2023, por no haber podido acceder al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), debido a las restricciones del BCRA.

Desde Uruguay, la Unión de Exportadores (UEU) y la Cámara de Industrias (CIU) estiman que de ese total, entre unos 15 a 20 millones de dólares, aproximadamente, corresponden a deudas acumuladas en los últimos 18 meses con proveedores uruguayos.

En diálogo con El País, el presidente de la UEU, Facundo Márquez dijo que algunas empresas argentinas les han ofrecido a sus proveedores uruguayos cancelar la deuda con Bopreal, pero afirmó que “hasta el momento, nadie ha aceptado recibir bonos como forma de pago”. Desde la gremial exportadora entienden que para los uruguayos “lo ideal” es cobrar lo adeudado en dólares y no en bonos.

“Por ahora los exportadores les están diciendo: ‘yo te vendí en determinadas condiciones, espero tus propuestas de pago pero no te acepto bonos’. Así que el importador verá qué hace, que lo negocie o lo descuente (en el mercado), lo que sea, pero no se están aceptando bonos porque es todo muy nuevo y ni siquiera está claro cómo funcionan”, indicó Márquez.

En la misma línea, el presidente de la comisión de Comercio Exterior de la CIU, Washingtón Durán dijo a El País que “no hay disposición a aceptar esos bonos” porque “todavía hay mucha incertidumbre sobre su funcionamiento y principalmente, respecto a quiénes los van a comprar”.

Según Durán, los exportadores industriales uruguayos “están siendo cautos” y mantienen el reclamo de cobrar lo adeudado en dólares. “Hay que ver cómo empieza a funcionar realmente el mercado de esos bonos, ver qué valor efectivo pueden tener o si son bonos que se van a estar depreciando de forma permanente. Por ahora no (aceptan bonos en forma de pago), los exportadores están esperando todavía más detalles”, indicó.

Sin embargo, desde Argentina, el team leader de Corporate de Adcap Grupo Financiero, Javier Soruco, dijo a El País que los importadores argentinos “ven con una expectativa monumental” al Bopreal y que “es muy simple” usar el bono para cancelar las deudas con proveedores del exterior en dólares. “Estamos recibiendo un montón de consultas de importadores argentinos que quieren saber cómo vender el bono para cancelar sus deudas con los proveedores del exterior. Al inicio, la noticia fue muy bien recibida, después hubo cautela y ahora (el instrumento) tiene mucho más potencial”, señaló Soruco.

A su entender, si bien aún el bono enfrenta el desafío de crear un mayor volumen en la operatoria y de conseguir más participantes del lado de la demanda. “De por sí el Bopreal tiene que ser exitoso porque, si no, su fracaso va a seguir sosteniendo el éxito del cepo (cambiario). Si no es exitoso (el BCRA), no puede ordenar el stock (de deuda), entonces no se puede levantar toda la operativa cambiaria y el enriedo que hay con respecto a los diferentes tipos de cambio si primero no le encontrás una solución al stock”, explicó el asesor financiero.

Detalles de Bopreal

El Bopreal es el instrumento a través del cual el BCRA busca absorber pesos del sistema financiero y cancelar las deudas que los importadores argentinos acumularon en los últimos casi 24 meses, con proveedores del exterior. Estos títulos solo pueden ser adquiridos por los importadores de bienes y servicios con deuda comercial pendiente que se hayan registrado en el padrón comercial. Los bonos se suscriben en pesos argentinos al tipo de cambio oficial mayorista y se pagan en dólares, a plazos que llegan hasta el año 2027.

Desde que comenzó a funcionar el Bopreal, el BCRA ha hecho cuatro licitaciones (hace dos por semana) y hasta el momento, lleva adjudicados un total de US$ 1.644 millones.

El instrumento tiene tres series, de las cuales solo la primera y la tercera podrán ser negociadas en el mercado secundario. Las licitaciones de la serie uno concluirán a finales de enero y la serie dos y tres se licitarán a partir de febrero.

Desde ese mes, “la buena noticia es que quedará abierto el acceso al tipo de cambio oficial, para cancelar compromisos para los cuales no se haya solicitado la suscripción a estos títulos. Por eso vemos una mayor expectativa para las futuras licitaciones”, indicó Soruco. Es decir que los importadores pueden usar el bono y liquidarlos en dólar contado con liquidación (CCL) para ser acreditados en una cuenta en el exterior y saldar así sus deudas.

Nuevo sistema

¿Cómo les pagarán la deuda a los proveedores extranjeros?

En las primeras licitaciones, el Bopreal no había logrado captar demasiado interés por parte de los importadores argentinos. Sin embargo, la semana pasada, el BCRA anunció mejoras en la operativa y nuevos incentivos que llevaron a aumentar la demanda en la última licitación.

¿Cómo es la operativa? ¿Cómo pagarán los importadores la deuda que mantienen con los proveedores extranjeros? “La operativa es muy simple. El importador se anota en el padrón, va a la licitación (primaria), se hace de Bopreales, se presenta en una sociedad de bolsa y le pide que se lo venda contra mercado. Le van a pedir la cuenta bancaria del proveedor en el exterior, la factura por esa deuda, y listo, le depositan los dólares en la cuenta del proveedor. Es así de simple”, indicó Soruco. Es decir que el importador le va a entregar pesos argentinos al BCRA a cambio de los bonos, y si precisa los dólares para pagarle a sus proveedores extranjeros, el importador deberá vender esos títulos en el mercado secundario.

Sin embargo, para que el instrumento realmente sea utilizado por los importadores, la clave está en el precio al que compra y vende en el mercado secundario y por eso es determinante lo que ocurra con la brecha entre el dólar oficial y el CCL. Según las estimaciones, con las condiciones actuales, el proceso de compra y venta del Bopreal le termina dando al importador un tipo de cambio de 1.250 pesos argentinos (por dólar). Si el CCL se ubica por encima de esos 1.250 argentinos, al importador le va a resultar conveniente suscribir al Bopreal, mientras que si cotiza cerca del dólar oficial, se encarecerá y no será tan conveniente. “El Bopreal tiene una cotización CCL. Si yo lo compré a US$ 1 pero la cotización CCL es de US$ 0,50, eso es lo que me van a pagar cuando lo venda y entonces no me sirve porque me sale más caro. Si el CCL me estuviera dando 1.250 argentinos y el Bopreal está por debajo de eso, entonces adquiere sentido ir por el bono” y viceversa, si el CCL no está en una brecha muy alta, no voy por el bono”, dijo Soruco.

Facundo Márquez, Presidente de la Unión de Exportadores del Uruguay
Facundo Márquez, Presidente de la Unión de Exportadores del Uruguay
Foto: Francisco Flores
Además

El debut del nuevo sistema de importación

El gobierno argentino reemplazó el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), por un nuevo Sistema Estadístico de Importaciones (SEDI) -que comenzó a funcionar en diciembre de 2023-, a través del cual se estableció que el pago de las operaciones se hará en cuatro partes iguales y consecutivas, a los 30, 60, 90 y 120 días. A pocos días de vencido el primer plazo, la UEU dijo que si bien hubo exportadores uruguayos que vendieron a Argentina y lograron cobrar el primer 25%, otros no lo lograron.

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