Redacción El País
El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) reunió a la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC) y a la empresa en una instancia que, en principio, tenía previsto ser tripartita pero luego de que autoridades de Conaprole se negaran, el gobierno mantuvo diálogo con las partes en encuentros separados. Las reuniones —que por momentos subieron de tono— contaron con la participación de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL), el ministro de Trabajo, Juan Castillo; la directora nacional de Trabajo, Marcela Barrios, y autoridades del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM). El director nacional de Industria, Adrián Miguez señaló a El País que se trata de una negociación en curso y agregó: “No queremos que se cierren fábrica,s pero depende de modelos de negocio de las empresas”.
Miguez hizo referencia a la realidad de la industria láctea en el interior del país y señaló que se observa una importante disparidad en cuanto a la tecnología utilizada para la elaboración de algunos productos. También explicó que se estableció un cuarto intermedio para volver a dialogar con las partes durante los próximos días.
Por su parte, el secretario general de AOEC, Luis Goichea, sostuvo que de no generarse un nuevo ámbito de diálogo se “agudizarán las medidas de la semana pasada” en referencia al paro de 24 horas del viernes último y agregó: “No estamos dispuestos a hablar de un cierre con fecha”. Si bien no especificaron posibles alternativas para salir del conflicto, el sindicalista sostuvo que las autoridades manifestaron la intención de mantener los puestos de trabajo.
Trabajadores
El País accedió a un comunicado interno de Conaprole en el que explica a sus empleados los motivos del cierre de la planta y las alternativas que se evalúan para mantener al personal. La empresa propone un complemento mensual al seguro de paro de $ 8.442, al que se le sumará un aporte adicional solidario de $ 14.000 (un total de $ 22.442 mensuales) otorgado por la Caja de Servicios Sociales y Seguro de enfermedad del personal de Conaprole (Casseco).
Por otra parte, Conaprole propone reubicar al 100% de su personal en otras plantas del país y que accedan a un seguro de paro que podría ser extendido. En el caso de que los trabajadores opten por no mudarse, la empresa ofrece un retiro incentivado con una compensación especial.
Posición
Santiago Rojas es oriundo de Rivera y trabaja en la planta 14 desde 2007. En diálogo con El País, señaló que los 22 empleados que tiene Conaprole en esa fábrica no estarían dispuestos a mudarse debido a que significaría cambiar la rutina de las familias que comparten conexión con la frontera con Brasil. “La distancia juega un rol muy importante”, dijo.
Por otra parte, Rojas coincidió con que existe un cambio de hábitos en los consumidores y un menor consumo de leche fresca. “Hemos trasladado a algunos legisladores la posibilidad de hacer una tarifa en precios de fronteras” sostuvo y agregó que esto ayudaría no solo a aumentar el consumo, sino también a aumentar la producción de la planta. En relación a los incentivos económicos, Rojas sostuvo que no se han considerado ya que los trabajadores entienden que la planta es viable.