Redacción El País
El Senado brasileño aprobó anoche el proyecto de ley que busca reducir las penas del expresidente Jair Bolsonaro, condenado a 27 años de prisión, y de otros participantes en la supuesta conspiración golpista tras las elecciones de 2022. El proyecto, que había sido aprobado la semana pasada en la Cámara de Diputados, contó con 48 votos a favor y 25 en contra, y ahora será enviado al presidente Luiz Inácio Lula da Silva para su promulgación o veto.
Bolsonaro, de 70 años, fue condenado en septiembre a 27 años de cárcel por intentar impedir en 2022 la asunción de Lula. Entró en prisión a finales de noviembre.
La duración efectiva de su tiempo en prisión se estimaba en unos ocho años, pero la ley votada anoche reduce la pena a dos años y cuatro meses al modificar el tiempo de reclusión para varios delitos, incluido el de golpe de Estado.
La bancada bolsonarista ha insistido con una amnistía al expresidente. Pero ante la proximidad del receso parlamentario de fin de año, los aliados de Bolsonaro aceptaron la reducción de penas como “un primer paso” hacia el perdón total. El autor del proyecto de ley, el diputado Paulinho da Força, defendió la rebaja de penas como “un gesto de reconciliación” en un país polarizado.
Los miembros de la Comisión de Constitución y Justicia del Senado aprobaron ayer por 17 votos a favor y siete en contra el proyecto, que de inmediato fue elevado al pleno de la Cámara alta. “Esta sesión plenaria tiene que abordar esta cuestión de una vez por todas”, dijo el senador Flávio Bolsonaro, hijo mayor del expresidente, y posible candidato presidencial en 2026.
La adopción de la iniciativa por la Cámara baja suscitó manifestaciones el domingo en varias ciudades de Brasil, convocadas por la izquierda.
Al convertirse en ley, la iniciativa dará además libertad condicional a más de un centenar de presos por la asonada del 8 de enero de 2023 contra las sedes de los poderes públicos en Brasilia, una semana después de la asunción de Lula. “Al menos conseguimos sacar a esas personas de la cárcel, que es lo más importante en este momento”, dijo el senador Sergio Moro, exministro de Justicia de Bolsonaro.
El proyecto en cuestión impide, entre otros puntos, que se acumulen las penas de dos de los crímenes por los que fue condenado el exmandatario (2019-2022), el de intento de abolición violenta del Estado democrático de derecho y el de golpe de Estado. Por entender que se trata de tipos parecidos, se aplicaría solo la pena más grave de los dos, en este caso el de golpe de Estado, que prevé hasta 12 años de prisión y que no se sumaría a la pena por intento de abolición violenta, que prevé hasta ocho años de cárcel.
En septiembre el Parlamento frenó un proyecto para amnistiar a Bolsonaro y a sus seguidores luego de protestas masivas.
Lula ha dicho que Bolsonaro “tiene que pagar” su condena y podría vetar la ley en caso de aprobación. “Este proyecto está destinado a ser vetado”, dijo el senador Randolfe Rodrigues, del Partido de los Trabajadores que lidera Lula. El Parlamento no obstante puede votar de nuevo para retirar el veto.
Desde finales de noviembre, Bolsonaro purga su pena en una dependencia policial de Brasilia. Fue trasladado allí de manera anticipada, luego de que intentó quemar la tobillera electrónica que controlaba su prisión domiciliaria preventiva.
Bolsonaro fue hallado culpable de liderar una conspiración para desconocer el resultado de las elecciones de 2022, que perdió con Lula.
Según la denuncia judicial, la trama golpista contemplaba incluso matar al entonces presidente electo, pero fracasó por falta de apoyo de altos mandos militares. AFP, EFE