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“Quieren sacar a Donald Trump de la elección”, dijo su defensa en el juicio político

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Escena. Los diputados demócratas que hacen la acusación, ayudados por funcionarios, trasladan las 28.578 páginas de documentos. Foto: Reuters
REUTERS

ESTADOS UNIDOS

Abogados del presidente denuncian en el Senado falsedades que plantean los demócratas.

Después de tres días de argumentos expuestos por los diputados que ofician de fiscales en el juicio político al presidente Donald Trump, ayer sábado los abogados que defienden al mandatario presentaron a los senadores una visión radicalmente diferente de los hechos y de lo que establece la Constitución, buscando refutar las acusaciones de los demócratas y denunciando todo el proceso como ilegal.

“Les piden a ustedes que destruyan todos los votos y le quiten le poder de decisión al pueblo estadounidense”, afirmó el abogado de la Casa Blanca, Pat A. Cipollone, al referirse a los legisladores que presentaron el caso. “Ellos están aquí para perpetrar la interferencia más masiva en una elección en la historia de Estados Unidos. Y, no podemos permitir que eso ocurra”.

“Les están pidiendo que reviertan no solo los resultados de la última elección, sino también les piden que quiten al presidente Trump de unas elecciones que tienen lugar en nueve meses”, denunció Cipollone. “Sería un abuso de poder completamente irresponsable hacer lo que les están pidiendo que hagan: interferir en una elección y excluir al presidente de Estados Unidos de las urnas”.

Otro de los abogados, Michael Purpura, de manera reiterada enfatizó que diversos testimonios recogidos en la investigación que realizó la Cámara de Representantes demuestran que no tiene fundamento la acusación de que el presidente hizo un pedido a su par de Ucrania, Volodimir Zelenski, a cambio de algo, supuestamente, una indagatoria sobre Joe Biden, el posible rival demócrata de Trump en las elecciones de noviembre, a cambio de entregar ayuda militar y concertar una reunión en la Casa Blanca.

“Ya sabemos que no hubo ningún pedido a cambio de algo en la llamada telefónica entre los dos presidentes el 25 de julio. Eso lo sabemos por la transcripción de la conversación”, indicó Purpura. “No hubo nada malo porque los ucranianos no sabían que la asistencia militar estaba frenada”, hasta que un artículo del sitio Politico lo informó, sostuvo el abogado.

Caso: Jay Sekulow, abogado de Trump, habla con los periodistas. Foto: Reuters
Caso: Jay Sekulow, abogado de Trump, habla con los periodistas. Foto: Reuters

¿Amenaza?

“No existe amenaza a una persona cuando esa persona no sabe que es amenazada”, dijo Purpura. En ese sentido, mencionó que varios funcionarios del gobierno reconocieron que no tenían conocimiento de un freno a la ayuda hasta que se publicó el artículo a fines de agosto.

Los abogados del presidente tenían asignadas tres horas, pero solo expusieron durante dos horas para marcar la diferencia con los diputados que argumentaron durante 21 horas en tres sesiones.

Hoy domingo, hay un paréntesis en las deliberaciones y el Senado reanuda la sesión mañana lunes con la continuación de los alegatos de la defensa del presidente Trump.

Ratifican

Los fiscales encabezados por Adam Schiff y Jerrold Nadler concluyeron, el viernes por la noche, sus alegaciones iniciales en el tercer juicio por la destitución de un presidente en la historia de Estados Unidos.

Disponían de 24 horas, repartidas en tres jornadas. Al exponer el caso de principio a fin, detallando los motivos por los que consideran que Trump incurrió en abuso de poder y obstrucción al Congreso, han logrado un evidente dramatismo, potenciado por el hecho de que los abogados del presidente no podían pedir interrupciones.

Ayer, los demócratas fueron protagonistas de un acto destinado a darle dramatismo al juicio. A las 11:45 horas de Uruguay, buscaron subrayar las acusaciones contra el presidente al caminar desde la Cámara de Representantes hasta el Senado con numerosas cajas que contenían 28.578 páginas de transcripciones y otras pruebas recogidas durante las investigaciones. Schiff lideró al grupo que salió del despacho de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.

“Los documentos que entregamos representan una montaña de pruebas que muestran que el presidente incurrió en hechos inapropiados que dan mérito a plantear el juicio político y su destitución”, sostuvieron los legisladores demócratas que ofician de fiscales. Agregaron que los abogados de Trump “se han escondido detrás de teorías legales novedosas y frívolas”.

Trump tiene el camino a la absolución despejado dado que la destitución requiere 67 votos y los republicanos, que son mayoría con 53 de las 100 bancas, han cerrado filas en torno al mandatario.

Los demócratas tienen problemas para conseguir convencer incluso a cuatro de ellos, con los que sumen 51 votos, para poder pedir la declaración de testigos en el juicio.

Fue la mayoría demócrata en la Cámara baja la que ha hecho posible la apertura de este juicio, pero el peso está ahora en la alta, territorio amigo del mandatario. El veredicto del Senado es previsible, el efecto en las elecciones presidenciales de 2020 resulta más incierto.

Adam Schiff. Foto: AFP
Adam Schiff. Foto: AFP

Actuó para que no se investigara

Los fiscales demócratas liderados por Adam Schiff expusieron estos puntos fundamentales en el juicio:

1. La urgencia.

Schiff abordó el miércoles un tema clave: por qué destituir al presidente mediante un proceso tan excepcional, cuando se va a someter a las urnas en solo 10 meses. El motivo, defendió, es que Trump ha emitido señales que sugieren que está dispuesto a trampear las elecciones de noviembre.

2. Abuso de poder.

La investigación, resumió Schiff, “dibuja un cuadro abrumador y condenatorio de los esfuerzos de un presidente por utilizar el poder de su cargo para solicitar de manera corrupta ayuda en su campaña de reelección, y retener actos oficiales y ayuda militar para forzar ese apoyo”.

Su comportamiento, añadió, es precisamente lo que tenían en mente los padres fundadores al introducir en la Constitución este proceso de destitución extraordinario: “Temieron que un presidente pudiera subvertir nuestra democracia abusando del impresionante poder de su cargo en su beneficio personal. Por eso concibieron un remedio tan poderoso como el mal que debía combatir: el impeachment”.

Los demócratas expusieron el caso tratando de apelar a la seguridad nacional que preocupa a tantos republicanos. Schiff les recordó que se acusa al presidente de retener un paquete de ayuda militar de casi 400 millones de dólares (unos 362 millones de euros) a un aliado en guerra con Rusia, una partida aprobada por los propios legisladores a los que se dirigía, para forzar a Kiev a anunciar una investigación con motivaciones electorales y en beneficio político del presidente.

3. Obstrucción al Congreso.

Es el segundo cargo del juicio político, y de particular gravedad para los legisladores, pues apunta directamente a la sacrosanta separación de poderes. El presidente ordenó a su equipo que no atendiera las citaciones para declarar en la Cámara de Representantes, y se negó a entregar documentos que pedían los legisladores.

“La orden de retener todo documento y testimonio”, ha explicado el viernes la congresista Val Demings, “fue categórica, indiscriminada e históricamente carente de precedentes”. Trump pretendía, ha añadido, “impedir la capacidad del Congreso de llevar a cabo su labor constitucional de hacer responsable al presidente”.

El senador demócrata Michael Bennett asciende por la escalera mecánica hacia la sala de sesiones del Senado. Foto: AFP
El senador demócrata Michael Bennett asciende por la escalera mecánica hacia la sala de sesiones del Senado. Foto: AFP

La batalla entre los demócratas y republicanos para sumar testigos

Es la gran batalla de los demócratas y, concluida su exposición, nada indica que estén más cerca de conseguir los cuatro votos republicanos que les darían la mayoría simple para poder pedir la comparecencia de testigos y la aportación de nuevos documentos.

De no lograrlo, el juicio podría concluir sin atisbo de quiebra en las filas republicanas. Los demócratas asumieron un notable riesgo al extenderse sobre el objeto de una de las investigaciones que Trump solicitó al presidente Zelenski: la actividad en Ucrania de Hunter Biden, que se sentaba en el consejo de la empresa de gas Burisma mientras su padre, Joe Biden, hoy precandidato demócrata y posible rival de Trump en las elecciones de noviembre, era vicepresidente de Estados Unidos.

Trump sugiere, aunque las fechas no cuadran y no hay evidencia alguna de malas prácticas, que Biden padre presionó para destituir a un fiscal que se disponía a investigar a la empresa.

Los demócratas defendieron en el Senado que era al revés: que Washington buscó la destitución del fiscal porque era “ampliamente percibido como corrupto”.

Pero al extenderse en la defensa de los Biden, pusieron en bandeja a los republicanos una jugada peligrosa. Algunos ya sugirieron que estarían dispuestos a votar a favor de escuchar los testimonios que proponen los demócratas, en particular el del exconsejero de Seguridad Nacional John Bolton, siempre que se llamara también a testificar a Hunter Biden. Los demócratas han rechazado ese intercambio. 

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