EFE,AFP
El ministro de Relaciones Exteriores de Perú, Javier González-Olaechea, ratificó el fin de semana las críticas contra el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que señaló que hubo un uso excesivo de la fuerza en la represión de las manifestaciones de protesta contra la presidenta Dina Boluarte, que dejaron más de 70 muertos a inicios de año.

El canciller dijo que el informe de la CIDH “había omitido algunas cosas importantes y había dicho medias verdades”, al comentar una columna de opinión publicada antes de ser ministro de Estado, en una entrevista con RPP Noticias.

El segundo canciller en lo que va del Gobierno de Boluarte es un experto en gobierno, catedrático, exasesor ministerial y exdirector de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), entre otros cargos.

En mayo pasado, González-Olaechea escribió una columna de opinión en la que tildó el informe de la CIDH, emitido a raíz de las denuncias de violencia de las fuerzas del orden contra los manifestantes antigubernamentales, de ser un “recuento selectivo e impregnado de apreciaciones políticas”. Agregó que la CIDH viola el principio de inocencia de los uniformados cuando afirma que pudo haber “ejecuciones extrajudiciales” y una “masacre” en la represión de las protestas contra Boluarte ocurridas entre diciembre y febrero pasados.

El canciller pidió que el país esté “absolutamente tranquilo” respecto a una reforzada política exterior peruana para “que tenga el Perú el mayor de los reconocimientos progresivamente como un país serio y que respeta y honra sus palabras”.

El canciller viajará la próxima semana a Estados Unidos con la mandataria peruana para asistir, del 13 al 18 de noviembre, a las actividades en torno a la 30° Reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), donde Boluarte recibirá la presidencia pro tempore del foro para el 2024.

La presidenta de Perú, Dina Boluarte, registra en este mes de noviembre su nivel más alto de desaprobación desde que llegó al poder, hace once meses, con un 83% de rechazo a su gestión, según un sondeo de Ipsos difundido ayer, domingo.

Boluarte, la primera mujer en comandar un gobierno en Perú, obtuvo al inicio del mes una aprobación de apenas el 10%, cuatro puntos menos que en octubre y el nivel más bajo de su mandato. El 7% restante de los encuestados no precisó su respuesta, según Ipsos.

La gobernante, de 61 años, sustituyó en el poder al izquierdista Pedro Castillo luego que éste intentara disolver el Congreso de mayoría conservadora, lo que generó una crisis política que acarreó protestas con más de 70 muertos en choques con la fuerza pública.

Dina Boluarte empezó su mandato con una desaprobación de 68%, a raíz de la represión de las manifestaciones en las que se reclamaba elecciones inmediatas y el cierre del Congreso. Previamente, se desempeñaba como vicepresidenta de Castillo, destituido por el Legislativo el pasado 7 de diciembre de 2022 tras su fallido golpe de Estado y hoy en prisión preventiva.