Redacción El País
La mezquita de Córdoba “está a salvo”, dijo ayer por la noche el alcalde de esta ciudad española, José María Bellido, después del incendio ya extinguido que afectó a una parte del histórico monumento y que hizo temer una destrucción como la que sufrió la catedral de Notre-Dame de París.
“El monumento está a salvo”, dijo Bellido a la radio Cadena Ser, asegurando que el daño ocasionado al edificio “no va a ser una catástrofe”.
Poco después, Bellido escribió en la red social X que el incendio había sido “extinguido”. El daño, prosiguió Bellido en Cadena Ser, “va a ser terrible, porque todo lo que arda en un monumento como la mezquita es terrible, y todo el daño es horroroso, pero no va a ser una catástrofe”, insistió el alcalde.
El fuego, explicó, se originó en una capilla de la mezquita reconvertida en templo cristiano tras la conquista cristiana de la ciudad en el siglo XIII.
En esa capilla hay “material de limpieza, material audiovisual, todo tipo de material y parece que ha podido ser cualquier batería o un contacto eléctrico, pues que haya producido un primer chispazo” que habría originado el incendio.
De ahí, “se ha extendido a parte de la cubierta de las bóvedas y no ha pasado de esa capilla”, aseguró el edil, que dijo que la evaluación exacta de los daños se hará en cuanto se consuman totalmente las llamas.
El incendio se declaró poco después de las 21:00 (hora local) en este monumento declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y visitado por más de dos millones de personas cada año, el testimonio más notable, junto a la Alhambra de Granada, de la presencia musulmana en España.