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Biden hace llamado a la unidad nacional a horas de ser el nuevo presidente de EE.UU.

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Washington termina las preparaciones para el cambio de mando presidencial. Foto: AFP
WASHINGTON, DC - JANUARY 18: Bria Gibson helps place American flags on the National Mall as the U.S Capitol Building is prepared for the inaugural ceremonies for President-elect Joe Biden on January 18, 2021 in Washington, DC. The approximately 191,500 U.S. flags will cover part of the National Mall and will represent the American people who are unable to travel to Washington, DC for the inauguration. Joe Raedle/Getty Images/AFP == FOR NEWSPAPERS, INTERNET, TELCOS & TELEVISION USE ONLY ==
JOE RAEDLE/AFP

CAMBIO DE MANDO

El presidente electo tiene prontas doce medidas para cambiar el rumbo de EE.UU. con un estímulo de US$ 1,9 billones y la reforma migratoria

Poco antes de convertirse en el 46º presidente de Estados Unidos, Joe Biden impulsó ayer lunes la unidad nacional con tareas de voluntariado, mientras el mandatario saliente Donald Trump sigue atrincherado en la Casa Blanca en una capital repleta de tropas y barreras de seguridad.

En el Día de Martin Luther King Jr., un feriado que los estadounidenses dedican tradicionalmente al servicio comunitario, el futuro presidente demócrata viajó desde su casa en Delaware al vecino estado de Pensilvania para participar en la distribución de alimentos para una organización benéfica en Filadelfia.

“El servicio es una forma adecuada de comenzar a sanar, unir y reconstruir este país que amamos”, dijo Biden en un video en Twitter.

Pero este gesto del demócrata de 78 años, que simboliza sus pedidos de reconciliación tras cuatro años de polarización política, se enfrenta a la dura realidad de múltiples crisis.

La pandemia del COVID-19 golpea sin tregua a los estadounidenses, la distribución de vacunas trastabilla y la recuperación económica sigue incierta.

Y tras el rechazo de Trump de aceptar su derrota electoral, la nación está más dividida y crispada que nunca.

El demócrata centrará su ceremonia de investidura en el tema de “Estados Unidos unido” y prevé rodearse de sus predecesores Barack Obama (2009-2017), George W. Bush (2001-2009) y Bill Clinton (1993-2001) para tender la mano a un país golpeado y dividido.

“Los eventos de las últimas semanas han demostrado cuán dañada ha estado el alma de Estados Unidos y qué importante es restaurarla. Esa labor empieza el miércoles”, dijo a CNN Ron Klain, quien será el jefe de gabinete de Biden. “Estamos heredando un gran desastre pero tenemos un plan para arreglarlo”.

Plan de acción presidencial.

Biden planea comenzar a enterrar la era Trump desde el primer día en la presidencia, firmando una docena de medidas ejecutivas de gran carga simbólica: la vuelta al acuerdo del clima de París, el fin del veto migratorio para un grupo de países de mayoría musulmana, un mandato obligatorio de uso de mascarilla en propiedades federales y el envío al Congreso de un proyecto de ley migratorio. Hereda un país sumido en la peor crisis económica desde la Gran Depresión de 1929, a punto de alcanzar los 400.000 fallecidos por coronavirus y profundamente dividido en la calle.

Algunas de las medidas avanzadas por Klain tienen más de declaración de principios que de cambios efectivos, como la orden de que el público se cubra con mascarillas en los viajes entre Estados, ya que estas ya son de uso obligatorio en los medios de transporte.

Joe Biden, presidente electo de Estados Unidos. Foto: Reuters.
Joe Biden, presidente electo de Estados Unidos. Foto: Reuters.

Entre la docena de medidas del primer día figura también una extensión de la moratoria antidesahucios, así como del pago de los préstamos estudiantiles -una bomba de relojería de 1,6 billones de dólares (1,3 billones de euros) en Estados Unidos- y lo que Klain definió como medidas para “restaurar la humanidad” en el sistema migratorio de Estados Unidos. Este es uno de los terrenos en los que la nueva administración de Biden ha creado más expectativas. Según avanzó el diario Los Angeles Times este fin de semana, la reforma migratoria que el demócrata llevará al Capitolio abre la senda para la ciudadanía de los cerca de 11 millones de extranjeros sin papeles que se calcula viven en el país.

El plan aceleraría este proceso para dos grupos protegidos actualmente por alivios temporales de la deportación: los acogidos al programa DACA, que beneficia a los llamados dreamers (en español, soñadores), que son migrantes que fueron traídos de forma irregular a Estados Unidos siendo niños y han crecido, estudiado y trabajado en este país como estadounidenses).

Al día siguiente de la toma de posesión, el jueves, Biden firmará otra batería de acciones, esta vez dirigidas a facilitar la apertura de escuelas y empresas, y, al día siguiente, otras medidas de estímulos para familias y negocios castigados por la crisis. Seguirá en los siguientes días con otros anuncios para incentivar la actividad fabril en Estados Unidos, asunto que colocó en el centro de su programa económico en la campaña. Su plan de reactivación económica global, que requiere la aprobación del Congreso, suma 1,9 billones de dólares (1,6 billones de euros). También ha prometido vacunar a 100 millones en los primeros 100 días de su gobierno.

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