En base a EFE y La Nación/GDA
En medio de una advertencia por ola de calor, este lunes se registró un nuevo terrible incendio en Argentina, esta vez en uno de sus paraísos ocultos: al sur del Parque Nacional Nahuel Huapi, en Brazo Tristeza, un área protegida.

A raíz de la tragedia, el Parque anunció el cierre preventivo de sus sendas.

Esta noticia se suma al siniestro que arrasó más de 3.500 hectáreas en el parque nacional Los Alerces, en la Patagonia argentina.

Este incendio se inició el jueves 25 de enero en la zona de Bahía Rosales, también en área protegida y se presume que fue intencional.

"El personal continúa trabajando en el área afectada con herramientas manuales y equipos de agua, en algunos sectores lograron anclarse líneas, ensanche de fajas con maquinaria vial y enfriamiento de líneas con equipos de agua. En otros sectores, con el apoyo de autobombas se trabajó sobre el perímetro para evitar el avance del fuego", indicó el Servicio de Manejo del Fuego de Chubut.

Actualmente trabajan en el lugar 271 brigadistas y operan dos aviones hidrantes, tres helicópteros con helibalde y un avión observador provistos por el Servicio Nacional de Manejo del Fuego de Argentina, con un total de 385 personas abocadas al operativo.

Situado en la provincia de Chubut, a unos 2.000 kilómetros al suroeste de Buenos Aires, el parque nacional Los Alerces tiene una superficie de 259.822 hectáreas, que lo sitúa como el quinto de mayor tamaño del país vecino.

En 2017 fue declarado Patrimonio Mundial de la Unesco por, entre otros motivos, "contener fenómenos naturales superlativos o áreas de excepcional belleza natural e importancia estética".

En este caso, se trata del Alerzal Milenario, una selva con ejemplares de alerce que pueden vivir entre 3.000 y 4.000 años de edad y medir más de 70 metros de altura.