Redacción El País
En plena cuenta regresiva para las elecciones legislativas del próximo domingo, el gobierno de Javier Milei es hoy por hoy un hervidero de versiones vinculadas al futuro gabinete después de conocido el resultado electoral.
“Todo lo va a decidir el Presidente con el resultado puesto, una vez que se sepa quién tiene el poder”, comentó a La Nación uno de los funcionarios al tanto de las versiones que circulan por estas horas.
“De cara al segundo tramo de este mandato voy a reacomodar el gabinete para lograr los objetivos de las reformas de segunda generación. El 26 a la noche, con todos los números, veré qué tipo de entramado necesito para lograr los objetivos”, ratificó este martes el jefe del Estado en la TV Pública. No precisó nombres ni cambios de estructura.
Las versiones más fuertes coinciden en que tanto el canciller Gerardo Werthein como el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, le avisaron al primer mandatario que se irán luego del lunes 27. De hacerlo efectivo, seguirán el camino de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que en diciembre asumirá su previsible banca en el Senado por la ciudad de Buenos Aires, y Luis Petri, ministro de Defensa, que ganaría un escaño de diputado nacional el domingo. Tampoco seguirá Manuel Adorni, el portavoz presidencial, que se irá a fin de año para asumir como legislador porteño.
Ni Werthein, cercano a los hermanos Milei, ni Cúneo Libarona generaron durante la gestión un buen vínculo con el asesor presidencial Santiago Caputo, quien, según Milei, “probablemente” asuma un lugar destacado en el próximo elenco ministerial.
La decisión de darle mayor poder e influencia a Santiago Caputo dependerá en buena medida del resultado electoral, ya que el joven asesor se involucró “el ciento por ciento” en la estrategia de la campaña en los 24 distritos.
Por lo pronto, y para evitar roces, el asesor, que es monotributista y no tiene un rol oficial, dejó trascender que no está interesado en asumir un cargo, pero que lo haría si el Presidente se lo pide.
Santiago Caputo se habría comunicado con Werthein para bajar la tensión, luego de que referentes de Las Fuerzas del Cielo y sus terminales en el exterior la emprendieran contra el canciller por considerarlo “cercano” al Partido Demócrata, y culparlo por las declaraciones del presidente Donald Trump, quien condicionó la ayuda norteamericana a un éxito de La Libertad Avanza en las próximas elecciones.
Cerca de Cúneo Libarona, en tanto, prefirieron no hacer comentarios, sin confirmar ni desmentir los rumores de salida.
La eventual llegada de Santiago Caputo sigue alarmando a la jefatura de gabinete, que encabeza Guillermo Francos. “Que él siga va a depender de lo que haga el Presidente, y las necesidades que tenga”, dijo una fuente que conoce el pensamiento de Francos, y que también se quejó de “movimientos subterráneos” de otros sectores oficialistas para “limar” al ministro del Interior, Lisandro Catalán, del riñón de Francos, que asumió su cargo luego de la derrota libertaria en las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre, con el objetivo de reencauzar el vínculo con los gobernadores.
Los que vendrían
También es extensa la lista de candidatos para los reemplazos de quienes se van. Cerca de Bullrich deslizaron un “compromiso” para ubicar en su lugar a la actual secretaria de Seguridad, Alejandra Monteoliva. Pero todo dependerá, coincidieron distintas fuentes del Gobierno, del porcentaje que obtenga en las elecciones en la ciudad de Buenos Aires, el histórico bastión de Pro.
La fusión entre Justicia y Seguridad es otra de las ideas en danza, al igual que el “ascenso” de Sebastián Amerio (número dos de Justicia y cercano a Caputo) para que esté a cargo por completo del área judicial.
El intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, también podría ocupar esa cartera, aunque cerca suyo rechazaron la versión.
“No hay nada, es todo opereta”, comentaron fuentes vinculadas a Montenegro, un intendente de Pro que dio el salto hacia La Libertad Avanza.
En principio, todo hace pensar que Sandra Pettovello (Capital Humano), Mario Lugones (Salud) y Federico Sturzenegger (Desregulación) continuarán en sus puestos, más allá de que este último perdió buena parte de sus atribuciones con el vencimiento de las facultades delegadas otorgadas por el Congreso.
Una reunión con Macri
En el mosaico de opciones de las que dispondrá Milei también está marcado en rojo un nuevo encuentro con el expresidente Mauricio Macri, quien pide cambios, se muestra reacio a la continuidad del “triángulo de hierro” como modo de conducción del Gobierno y ofrecería dirigentes de su confianza para ocupar casilleros clave.
Si bien nadie lo confirma oficialmente, los equipos que responden al exministro de Transporte Guillermo Dietrich ya trabajan “preparando la cancha” en rubros como ferrocarriles, puertos y aviones, hoy bajo la órbita del ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, el “mejor ministro de la historia” según el Presidente, pero cuyo futuro dependería del resultado electoral y el rumbo que tome el programa económico.
Desde el riñón del macrismo están dispuestos a proponer a Javier Iguacel, exministro de Energía, y a Fulvio Pompeo, exsecretario de Asuntos Estratégicos del expresidente Macri y con un equipo de diplomáticos nucleados en la Fundación Argentina Global.
De todos modos, el asesor Santiago Caputo también tiene sus candidatos para el Palacio San Martín -sede de la Cancillería argentina-, como Nahuel Sotelo, actual secretario de Culto -este martes afirmó que no se moverá de ese lugar-, y a Úrsula Basset, que recaló en la dirección de Derechos Humanos de la Cancillería luego de ser marginada de las decisiones importantes por el propio Werthein. Jaime Rosemberg / La Nación (GDA)
“Desilusionada, pero con temor de que vuelva la inflación”
En las legislativas del domingo, Javier Milei se someterá a su primer gran test electoral de alcance nacional con dos logros en materia económica: la desaceleración de la inflación -que pasó de un pico del 289,4% interanual en abril de 2024 al 31,8% en septiembre pasado- y la recuperación del equilibrio en las cuentas públicas.
Sin embargo, las herramientas para conseguir ambas metas y sus consecuencias son criticadas por sectores políticos de la oposición y, en buena parte, incidirán en el resultado electoral.
Milei, que llegó a la Presidencia a finales de 2023, logró el superávit fiscal gracias a un severo plan de ajuste que incluyó drásticos recortes de gastos y una reducción del tamaño del Estado. Esa política se mantuvo en 2025, a tal punto que Milei vetó varias leyes votadas por el Congreso que le obligaban a aumentar los recursos públicos. “Milei generaba mucha esperanza.
Después de dos años de gobierno, la gente está desilusionada, aunque también con mucho temor a que vuelva la inflación”, indicó a EFE Leonardo Piazza, director de la consultora económica LP Consulting. EFE
“Más que las presidenciales de 2027”
El ministro de Economía de Argentina, Luis Caputo, dijo ayer miércoles que las elecciones legislativas del domingo son “más importantes que las presidenciales de 2027”, en medio de una fuerte volatilidad en la cotización del peso.
Argentina enfrenta una corrida cambiaria que no cesa pese al apoyo financiero de Washington, que el presidente estadounidense, Donald Trump, condicionó a un triunfo del partido de su aliado Javier Milei el domingo. “El mundo está mirando estas elecciones, quiere ver que nuestra gente revalida este curso”, dijo el ministro en la Bolsa de Comercio de Córdoba. Caputo afirmó que el régimen cambiario “se mantendrá exactamente igual”, en un intento de disipar los temores de una devaluación del peso tras las elecciones.
La moneda argentina lleva más de un mes bajo una fuerte presión de los mercados financieros, que la consideran sobrevaluada. El peso se depreció el martes nuevamente pese a la intervención del Banco Central, que vendió 45,5 millones de dólares para frenar su caída.
El ministro aseguró que el sistema cambiario se mantendrá “independientemente del resultado” de los comicios. “Hoy tenés un Banco Central muy bien capitalizado, tenemos unos fundamentos sólidos y un tipo de cambio que está en un nivel absolutamente razonable”, aseguró. La moneda argentina cerró ayer miércoles a 1.515, sin cambios respecto al día anterior. Caputo afirmó además que el precio del dólar podría incluso corregir “entre un 10 y un 20% hacia abajo” tras los comicios.