Publicidad

Soriano es azotado por fenómenos meteorológicos: ¿cuáles son las razones?

Compartir esta noticia
Desmanes por la turbonada. Foto: Estefanía Leal.
Luis Lacalle Pou, Presidente de la Republica, recorre con Guillermo Besozzi, Intendente de Soriano, la zona de temporal, destrozos por turbonada, Mercedes, Soriano ND 20220330, foto Estefania Leal - Archivo El Pais
Estefania Leal/Archivo El Pais

36 EVENTOS EN 17 AÑOS

El departamento ha sufrido una treintena de fenómenos climáticos adversos en los últimos años.

Cuando este martes arreció la turbonada en Mercedes, que sorprendió a una gran cantidad de vecinos -pese a la alerta meteorológica que regía desde hacía unas horas- hubo una pregunta que quedó flotando en el aire fresco -que hasta entonces era espeso y caluroso- de la capital de Soriano: ¿otra vez lo mismo?

Porque para la memoria colectiva es común que este departamento del litoral del país sea escenario de tormentas que se llevan techos de chapa, que arrancan árboles, que deja calles sin poder transitar y a las autoridades corriendo de una punta a otra de la ciudad para atender el corte de los servicios y la necesidad de los que se quedaron sin hogar.

Ocurrió esta semana, pero ya había pasado en 2016 con el conocido tornado que mató a cinco personas en Dolores. Sucedió en octubre y diciembre de 2012, con una serie de temporales - que también incluyó un tornado- que generaron destrozos, centenares de familias damnificadas y la destrucción del 80% de la caminería rural; ocurrió en enero de 2011, con una turbonada que produjo daños varios y cerca de 200 familias afectadas; pasó con otro temporal en la madrugada siguiente a las elecciones nacionales de octubre de 2009; se sufrió también con una inundación en 2007, que de hecho fue la segunda más importante desde la histórica de 1959.

Todo en Soriano, y son solo los ejemplos más notorios de un total de 36 eventos climáticos adversos desde 2005 a la fecha, de acuerdo al registro estadístico que lleva Alejandro Gil, secretario de relaciones Públicas de la Intendencia de Soriano e integrante durante varios años del comité departamental de emergencia.

Desmanes por la turbonada. Foto: Estefanía Leal.
Desmanes por la turbonada. Foto: Estefanía Leal.

¿Por qué ocurre esto? Primero que nada, entre los especialistas uruguayos no hay consenso de que necesariamente haya más cantidad de este tipo de tormentas en esta zona específica del país -el litoral oeste-, aunque todos coinciden -esta es una conclusión de la Organización Meteorológica Mundial- que el calentamiento global es el principal causante del aumento de lluvias intensas, inundaciones, cambios abruptos de temperaturas y vientos fuertes.

Algunos, como la investigadora Madeleine Renom, creen que sí hay cambios constatables en esta región de Uruguay en los últimos años.

Pero para Néstor Santayana, director de Meteorología y Clima de Inumet, no está tan claro que Soriano y los departamentos del litoral -Colonia, Río Negro, Salto, Paysandú- estén sufriendo particularmente más cantidad de tormentas en los últimos años.

Lo que cree Santayana es que antes hay que tener en cuenta dos cosas: el desarrollo de las tecnologías de comunicación, que hace que la sociedad sepa al instante si hay una ciudad sufriendo el embate de una turbonada, y el crecimiento de la densidad de población en las ciudades del interior, que hace que los daños sean mayores.

“Antes, estos fenómenos podían pasar y la gente no se enteraba tanto y cuando ocurren en el medio del campo tampoco nos enteramos”, puso de ejemplo, y siguió: “Siempre hubo tornados y en otro lugares, como uno en Fray Marcos (Florida) en 1970, y otro en Treinta y Tres, en 1974”.

Es decir, para este jerarca de Inumet no es una cuestión de esa zona del país, sino de todo el territorio: un área que abarca el sur de Brasil, Paraguay y el centro de Argentina, y que está entre las que generan las tormentas más intensas del mundo. “No es algo lineal como decir que aumentaron ahí las tormentas en los últimos 10 o 20 años”, acotó.

Desde los 90' hasta hoy

Gil dijo que recuerda con nitidez un seminario al que asistió en 1997, en el Edificio Libertad, y que estuvo a cargo de los meteorólogos Daniel Bonora y Mario Bidegain. Según rememoró, entonces habían advertido que los análisis de aquel momento determinaban que el calentamiento global y el cambio climático iba a empezar a impactar especialmente en el oeste de Uruguay en los años siguientes.

“Lo positivo, advertían, era que estos cambios iban a favorecer los ciclos de algunos cultivos, como el de la soja, pero lo negativo era que estos fenómenos extremos iban a ser más recurrentes y más duros”, dijo Gil. Y lamentó que todavía se utilicen materiales livianos para la construcción. En efecto, de la treintena de viviendas que fueron azotadas el martes de tarde por la turbonada, en su mayoría se registró voladura de techos, todos de chapa.

Bidegain afirmó en diálogo con El País que reconoce que esa zona demostró sus particularidades, pero que eso es por estar integrada a toda una región con el mismo problema. “En los últimos 30 años, se ha mantenido en el área una tendencia creciente de las temperaturas y de aumento de las precipitaciones”, razonó.

Mercedes: vecinos pasean por la rambla, llena de árboles caídos. Foto: Estefanía Leal.
Mercedes: vecinos pasean por la rambla, llena de árboles caídos. Foto: Estefanía Leal.

Y que junto con esto, añadió, también se han dado otras alteraciones climáticas, como los recientes saltos de temperatura en todo el país, y especialmente en Soriano: en efecto, minutos antes de que Mercedes se viera en vuelta en una corriente descendiente brutal (ver aparte), el aire estaba espeso y el calor era agobiante; y luego de los casi 10 minutos de turbonada pareció como si el otoño cayera de golpe: en la noche del miércoles había menos de 15 grados, y si uno no se ponía campera sufría un frío parecido al invernal.

“Lo que sucede en estas regiones, como en el oeste y Soriano, es que es una zona bien de tipo continental”, dijo Bidegain en ese sentido.

¿Y esto qué significa? “Que se dan los mayores contrastes térmicos a lo largo del día y del año” producto del choque de una masa de aire de composición opuesta -fría o caliente; húmeda o seca-, y que ello, a su vez, luego desencadenan las turbonadas y tornados.

Como sea que fuere, y si el área que comprende Soriano tiene una historia climática particular o no, sí está en el radar de las autoridades a nivel nacional, tal como publicó ayer el semanario Búsqueda, al dar cuenta de que Mercedes se encuentra dentro de las 11 ciudades o localidades definidas por la Dirección Nacional de Aguas como de “riesgo muy alto” de ser afectadas por inundaciones.

El intendente Guillermo Besozzi sabe de la vulnerabilidad de Mercedes. Aseguró a El País que la infraestructura de la ciudad se desarrolla teniendo en cuenta el problema. “Y cada vez que vamos a hacer realojos ponemos mucha atención” al factor climático e infraestructural, afirmó.

Los detalles de la turbonada de Mercedes

El Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) difundió un informe este jueves con los detalles del temporal que golpeó a la ciudad de Mercedes el martes sobre las cinco de la tarde.

El organismo concluyó que el fenómeno meteorológico fue una “microdescendente húmeda o reventón húmedo”. “Esto consiste en una fuerte corriente descendente convectiva, originada a menudo en el seno de una nube de tormenta, que ocasiona vientos destructores”, explicó Inumet en su reporte difundido ayer por la tarde.

“Tiene una dimensión horizontal inferior a diez kilómetros, y su tiempo de vida puede ir de cinco a treinta minutos”, agregó el Instituto.

Asimismo Inumet profundizó en la diferencia conceptual entre una microdescendente y un tornado y detalló que “las descendentes pueden ser húmedas o secas”, lo cual depende de que “la precipitación asociada a la nube original del fenómeno llegue o no al suelo”.

“En ocasiones, estas corrientes descendentes pueden ser confundidas con los tornados producto de sus efectos destructivos”, puntualizó el Instituto.

“Para distinguir, en caso de duda, los daños producidos por una corriente descendente o reventón de los ocasionados por un tornado, hay que observar el patrón del rastro de los daños”, añadió.

“En el caso de una descendente suele presentar una disposición lineal, o radial respecto a un centro (divergente), mientras que los daños por tornado se presentan en un corredor que deja el tornado en su trayectoria, con objetos abatidos a ambos lados (convergentes), formando ángulos entre sí, a causa de la curvatura del flujo”, finalizó el documento del organismo.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

turbonadaSorianoMercedes

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad