18 DE JULIO

Sin shows artísticos para evitar la aglomeración, con cánticos detrás de tapabocas y ocupando unas nueve cuadras, los estudiantes universitarios marcharon ayer en recuerdo de sus mártires. Y en reclamo de mayor presupuesto para la educación, en especial para la Universidad de la República (UdelaR).

La de ayer en la tardecita fue la movilización más numerosa desde que COVID-19 aplacó la concentración humana en Uruguay. De hecho, superó a la manifestación contra la ley de urgente consideración que había organizado la central única de trabajadores.

Un cartel de fondo blanco, que abría la movilización, rezaba: “Sin educación pública no hay futuro”. Porque a falta de dos semanas para que el proyecto de Presupuesto ingrese al Parlamento, la proclama estudiantil se centró, sobre todo, en el pedido de más dinero con énfasis en “la necesidad de fortalecer el presupuesto en ciencia y tecnología” que ha sido “clave para enfrentar la pandemia”. Así lo dijo en su oratoria Mauro Conti, secretario de Asuntos Gremiales de la Federación de Estudiantes Universitarios de Uruguay (FEUU).

El 12 de agosto de 1968, el estudiante de Odontología Líber Árce, de 29 años, recibió un balazo de las fuerzas policiales mientras se manifestaba por el boleto estudiantil. Dos días después, falleció.

Por eso el 14 de agosto de cada año, la FEUU conmemora el Día de los Mártires Estudiantiles (incluye el recuerdo de otros alumnos que, entre fines de los años 60 y hasta casi el término de la dictadura, fueron asesinados, torturados o desaparecidos).

Aunque la marcha en cuestión se repite cada año, cobra otra importancia con los cambios de administraciones y la puja presupuestal. Tanto es así que, en la edición 2020, la FEUU se centró en el reclamo del 6% del PIB para la educación, una consigna que había acompañado al gremio durante el quinquenio pasado.

Esta vez, sin embargo, había dos elementos adicionales: una situación de crisis económica (Conti refirió a “más de 800 ollas populares a lo largo del territorio nacional”), y la asunción de una coalición de gobierno que, el presentador del acto de cierre de la marcha tildó de “neoliberal”.

En ese sentido, al reclamo presupuestal se sumó una crítica a la ley de urgente consideración y el rechazo al proyecto de ley presentado por tres legisladores de Cabildo Abierto.

“La derecha busca así reconstruir el pasado reciente a partir de la teoría de los dos demonios, colocando como víctimas a los responsables de cometer crímenes de lesa humanidad”, apuntó la proclama de la FEUU.

El rector de la UdelaR, Rodrigo Arim, participó de la marcha, pero prefirió no hacer comentarios: “este es el momento de los estudiantes”, dijo.