ANTE PANDEMIA

En Solís de Mataojo, Agustino Alonso fabricó cuatro lavamanos con agua y jabón para colocar en la vía pública. Ya le han encargado varios más. Y su idea ha comenzado a ser replicada en sitios como Batlle y Ordóñez, Minas, Migues y Piriápolis.

“Mi pareja tiene un instituto de inglés pegado a casa. Antes de que explotara todo hablamos con ella de que íbamos a tener que hacer algo para que los chicos se lavaran las manos afuera. Cuando estábamos encaminándolo, las clases se suspendieron y abandoné el proyecto. Se me ocurrió después hacer esto para colocarlo en el pueblo, frente al Banco República, en unos almacenes y otros lugares muy concurridos”, cuenta Alonso a El País.

“Le comenté la idea a la alcaldesa Verónica Machado (hoy está su suplente al frente del Municipio) y al ratito estaba en casa organizando las cosas. Algunos elementos los compramos y otros los conseguimos donados. Hicimos los lavamanos y los instalamos”, agrega.

Como este emprendimiento, hay cientos de iniciativas solidarias desparramadas por todo el país para enfrentar la pandemia del COVID-19. Muchas de ellas tienen que ver con ollas solidarias, pero también hay quienes se ofrecen, por ejemplo, para hacer mandados a las personas mayores y más vulnerables al virus.

También ha tomado protagonismo la página web involucrateeventos.uy, un portal de voluntariado y donaciones que si bien existe desde 2017, en estos días busca reunir todas las iniciativas de ayuda para el COVID-19.

Allí se puede elegir una acción solidaria y participar. Hay por ejemplo vecinos de Punta Rieles y Villa García que se ofrecen a hacer mandados para comprar alimentos, remedios, o hacer trámites a personas mayores de 65 años. En el mismo sitio, el Grupo de Psicogerentólogos de la Udelar se ofrece a hacer lo mismo en varios barrios de Montevideo y en Las Toscas. Lo mismo viene haciendo la Brigada Solidaria de Maldonado.

En Facebook, es posible encontrar otra vía para hacer donaciones y colaborar con las ollas populares en la página Solidario.uy.

En varios puntos del país se vienen organizando ollas populares. El sindicato de Ancap (Fancap), por ejemplo, formó la brigada “Susana Pintos”, que comenzó a recolectar alimentos para distribuir entre quienes están encarando estas iniciativas.

También se reciben alimentos no perecederos, verduras y productos de limpieza para una olla popular en Malvín Norte a través de los teléfonos 095 425 068 y 093 301 890.

Y los lunes, miércoles y viernes, a las 17:00 horas, vienen entregándose meriendas solidarias en Paso Molino. Esto ocurre en la esquina de Esmeralda y Emancipación, frente a la vía del tren, y sus promotores aclaran que también puede acercarse gente de los barrios Prado Norte y Belvedere.

A partir de hoy, la Asociación Civil Barrio y Cultura estará recibiendo alimentos no perecederos en el Anfiteatro Canario Luna (Dámaso Antonio Larrañaga y José Serrato).

También en Piedras Blancas los vecinos han hecho una olla popular para las familias de bajos recursos. Muchos de los que están detrás de esta iniciativa son feriantes que se han quedado sin trabajo.

Otra iniciativa barrial en Casavalle se puso como primer objetivo ayudar a casi 40 familias de alumnos del liceo Impulso, que recibirán una canasta básica para sobrellevar la situación. En caso de superar las 40 canastas, se brindará ayuda a las familias del Colegio Santa Bernardita del Borro; Colegio Cristo Divino Obrero de Gruta de Lourdes, y a uno de los CAIF ubicado en la zona.