Varias víctimas del 121 llegaron a un acuerdo con Cutcsa, otras arreglarían en horas y una prefiere el juicio

El abogado de la empresa presentó a la fiscal un informe médico que señala que el chofer había sufrido "conductas epilépticas".

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Accidente de transito en la Playa Pocitos
Ómnibus de Cutcsa en el día del siniestro.
Foto: Francisco Flores/Archivo El Pais.

De las 16 víctimas del ómnibus 121 de Cutcsa que atravesó a contramano Avenida Brasil, rompió un muro de la rambla y aterrizó sobre la playa de Pocitos, 10 llegaron a un acuerdo reparatorio, según señalaron fuentes judiciales y abogados de los damnificados a El País. En tanto, otros cinco ya negociaron con la empresa y estarían a punto de arreglar, y uno está decidido a seguir el juicio penal y también en vía civil.

Esto fue lo que expresaron los propios abogados a la fiscal del caso, Sandra Fleitas, en una audiencia que se celebró en la tarde del miércoles, en la que incluso muchos de los representantes no se presentaron, puesto que ya llegaron a poner su rúbrica en los acuerdos.

Gúmer Pérez, abogado de Sandro Márquez, que se fracturó una vértebra, debieron ponerle una chapa de titanio y tornillos, y que aún atraviesa una larga recuperación, sostuvo a El País que él le comunicó este miércoles a Fleitas el acuerdo al que llegó con la empresa.

Semanas atrás, en declaraciones a El País, Márquez había señalado sobre el siniestro y las consecuencias que este le había generado: "Estaba consciente pero no me podía mover. No podía hacer nada, solo movía los brazos. Pensé que no caminaba más. Cuando pude hablar le empecé a gritar al chofer: “Me mataste”, le decía. Enseguida entendí que había sido un atentado. Y un intento de suicidio. Se quiso matar y nos quiso matar a todos".

Sandro, pasajero del 121 que chocó contra la rambla de Pocitos.
Sandro, pasajero del 121 que chocó contra la rambla de Pocitos, durante una entrevista con El País.
Foto: Leonardo Maine/El País.

Pérez sostuvo que todos los acuerdos se llevaron a cabo a través de un criterio por el cual ninguna de las víctimas podía cobrar más que el viudo de la mujer que murió por el accidente, que aceptó unos US$ 28.000. Según pudo saber El País, el pasajero que menos dinero recibió llegó a un acuerdo por US$ 1.500.

La única pasajera que al momento no estaría dispuesta a llegar a un acuerdo es Daniela Barros, puesto que entiende que "el resarcimiento no puede llevarse a cabo solo por el daño físico, que es lo que se está haciendo, sino teniendo en cuenta también el daño moral", según sostuvo a El País su abogado, Diego Moreno.

Semanas atrás, en entrevista con El País, Barros sostuvo al respecto: "Me da bronca. Yo no quiero pensar que a la justicia la podés arreglar con plata. Porque esto no se arregla con plata (...) No puede ser que el chofer quede inimputable. Tiene que haber una condena. Eso es lo justo".

Daniela, pasajera del 121 que se accidentó en Pocitos.
Daniela, pasajera del 121 que chocó contra la rambla de Pocitos durante una entrevista con El País.
Foto: Leonardo Maine/El País.

En tanto, fuentes judiciales señalaron que —como informó Canal 12— el abogado de Cutcsa, Andrés Scavarelli, presentó a la fiscal un informe médico que señala que el chofer del 121 había sufrido "conductas epilépticas" más de una vez en el pasado, lo cual, sostuvo, le quitaría responsabilidad penal y civil. Fleitas pidió un informe al Instituto Técnico Forense (ITF) al respecto.

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