EFECTOS DE LA PANDEMIA

La complicada realidad que atraviesa el sector turístico se refleja en las caras de los mozos en los restaurantes de Punta del Este. Se ve en la falta de filas en la clásica heladería de La Paloma. En los hoteles cerrados. Se grafica en la cantidad de locales por alquilar en el mejor punto de La Barra.

La esperanza de los operadores turísticos estaba puesta en una flexibilización del cierre de fronteras anunciado a mediados de diciembre por el gobierno, pero la conferencia del presidente Luis Lacalle Pou los dejó más preocupados.

“Sin duda, el cierre de fronteras fue un tema que puso a todo el sector a reconsiderar las posiciones, porque aleja totalmente todas las posibilidades de un verano aunque sea parcial”, dijo ayer la presidenta de la Cámara de Turismo, Marina Cantera.

Por eso, la gremial de empresarios del turismo diseña una propuesta concreta para pedirle al gobierno “un rescate” para el sector lo antes posible.

El jefe de Estado inició la conferencia del miércoles a la noche aclarando que lamentaba tener que hacer el anuncio pero que se extendería el cierre de fronteras hasta el 1° de febrero.

Los empresarios entienden que la situación sanitaria es compleja, y si bien no tienen críticas para las autoridades del gobierno, sí creen que se puede generar algún sistema de apertura en las fronteras aéreas.

De todos modos, en el sector se preparan para el peor escenario porque semana a semana la realidad de los emprendimientos vinculados al turismo se va complejizando. El rubro hotelero es el que ha sido más castigado, pero la gremial dice que hoy todas las áreas están muy afectadas, en algunos casos con empresas que no facturan desde que se inició la pandemia, hace 10 meses.

Por eso la Cámara de Turismo pidió una reunión para entregarle al gobierno una propuesta de pedido de ayuda. “Estamos enfocando en diseñar un plan de rescate para el sector, que está en una situación de no vuelta atrás, y realmente tenemos que pensar en cómo lo vamos a salvar. Diseñar una forma para levantarlo, porque la situación ya es crítica”, valoró Cantera, que fue nombrada presidenta de la gremial recientemente en sucesión de Juan Martínez.

Los empresarios sostienen que, además de la necesidad de que ingrese mayor turismo al país, de forma controlada y con protocolos, es primordial bajar los costos para operar. “Hoy las empresas tienen costos muy altos que prácticamente no han sido bajados en este tiempo. Sí ha habido alguna cosa puntual en los costos laborales, pero hay otro montón de costos asociados a la producción que se tienen que seguir pagando”, detalló. El otro punto refiere a la necesidad de mejorar la liquidez de las firmas, ya que en el correr del año han tenido poca o nula operatividad.

En el sector entienden que a la hora de tomar las decisiones oficiales se tiene que poner en la balanza no solo que hay un riesgo sanitario, sino también el “riesgo económico importante” de que se pierdan las operaciones, por ejemplo, de las aerolíneas. La presidenta de la Cámara de Turismo explicó que una vez que estas empresas de transporte aéreo dejan de operar en el país, luego las gestiones para volver a traerlas son muy complejas y llevan mucho tiempo.

“Con los distintos test que hay, y un ingreso segmentado de turistas, es posible hacer pequeñas aperturas de fronteras. Para Uruguay sería fatal terminar con las pocas aerolíneas que todavía están operando en el país. Ese es un riesgo que no está bueno correrlo. Hay que mantener esas operaciones, con ingresos limitados”, advirtió Cantera.

La buena noticia que recibieron en el sector turístico fue la extensión de dos horas para el cierre de los centros nocturnos, restaurantes, bares y afines. Con la excepción de Montevideo, donde la intendenta Carolina Cosse mostró su discrepancia, las intendencias de Rocha, Maldonado, Canelones y San José ya anunciaron la habilitación para operar hasta más tarde.

En el caso de Maldonado, los comercios podrán estar abiertos hasta las 2 de la mañana. El intendente fernandino, Enrique Antía, celebró la decisión del gobierno aunque también aspiraba a una flexibilización del cierre de fronteras.

En concreto, se pretendía habilitar el ingreso de extranjeros con propiedades en Maldonado. Según dos fuentes del gobierno consultadas por El País, la idea no está “en el radar”, para el corto ni para el mediano plazo.

En el caso de Rocha, la extensión es hasta la una de la madrugada, mientras que Canelones resolvió habilitar al sector gastronómico hasta las 2. En San José se resolvió mantener el horario de trabajo hasta las 00 horas de domingos a jueves, pero flexibilizarlo viernes y sábados. Esos días podrán permanecer abiertos hasta la una de la mañana.