El ministro de Trabajo, Pablo Mieres, anunció el viernes 14 en el Consejo Superior Tripartitoque habría una modificación de la ponderación del ajuste salarial por la inflación proyectada para los dos semestres de 2024 y el primer semestre de 2025.
Por ejemplo, si la inflación proyectada para 2024 es de un 10%, en lugar de otorgar un 5% en el primer semestre y otro 5% en el segundo, el gobierno incrementa el ajuste en los primeros seis meses. Esto se debe a que el Poder Ejecutivo entiende que en los primeros semestres hay una mayor presión inflacionaria que en la segunda mitad del año.
Consultado por El País, Mieres explicó que ya transmitió a las distintas cámaras empresariales que habría una variación en la distribución de los ajustes por inflación. “Cada semestre no tiene el mismo peso inflacionario”, aseguró el jerarca.
A juicio del titular de Trabajo, el ajuste previsto para el segundo semestre de 2023 no tiene ninguna variación. Y agregó que el correctivo por inflación se aplicará desde el 1º de julio de este año. “La inflación proyectada para el segundo semestre de 2023 es de 2,8%. El ajuste propuesto por el gobierno rondará ese porcentaje”, explicó el jerarca gubernamental.
Mieres afirmó además que, desde el punto de vista práctico, empresarios y trabajadores podrán acordar en las mesas de negociaciones los ajustes que les parezcan. “El tema es la distribución en los semestres”, insistió.
Según supo El País, el Ministerio de Trabajo ya citó para la semana que viene algunos grupos -sectores de actividad- para discutir los ajustes por semestres en función de la inflación proyectada.
Una fuente empresarial señaló a El País que, a medida que el Ministerio de Trabajo vaya convocando a los “grupos madre” (industria y comercio, industria del cuero, industria de la madera, transporte, servicios de salud y celulosa y industria química, entre otros) les entregará un papel con la ponderación de los ajustes por inflación proyectada a corto plazo. Se conformarán casi 200 mesas de negociación que representan a unos 650.000 trabajadores.

Los cambios
Según supo El País, en un inicio, un técnico del Ministerio de Economía y Finanzas anunció una inflación proyectada para julio-diciembre de 2023 de un 2,8%.
El viernes pasado, como se dijo, se realizó una corrección. Integrantes del Poder Ejecutivo señalaron a las empresas que el ajuste debería ser de un 2,7%. Es decir, un 0,1% menos, una diferencia que no es sustancial para ninguna de las partes (empresarios y sindicatos).
Para enero-junio de 2024, el gobierno propuso a empresas y gremios un ajuste por inflación proyectada de 2,9%. El Ejecutivo consideró ahora que el incremento deberá ser de un 4,4% en el entendido que la presión inflacionaria es mayor en el primer semestre del año.
En un principio, se estableció que para julio-diciembre de 2024, el aumento sería de 2,9%. Ahora el gobierno plantea que la suba salarial debería ser de un 1,3%. Y para enero de 2025 estableció antes un 2,9% de incremento salarial. Ahora propone un aumento de un 4,2%.
Las fuentes gubernamentales insistieron que en el año el aumento salarial es el mismo. Solo cambia la distribución de dicho incremento. Es decir, se modificó la ponderación del ajuste por inflación proyectada al distribuirlo por semestres.
De todas formas y como ya se señaló, empresarios y trabajadores tendrán la última palabra en las próximas rondas de negociaciones establecidas por el Ministerio de Trabajo.
Meta de Lacalle Pou es la mejora salarial
El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, dijo en Bruselas (Bélgica) a El País que su principal meta para lo que resta de este período de gobierno es la recuperación salarial tanto de los trabajadores públicos como de los privados.
A juicio del primer mandatario, los trabajadores de ambos sectores perdieron capacidad adquisitiva respecto a 2019 en gran parte debido a la crisis generada por la pandemia del coronavirus. Ahora, de hecho, está en pleno desarrollo la Décima Ronda de Negociación Salarial en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
Una segunda prioridad de Lacalle Pou es una serie de obras “puntuales” que ya están en curso y que involucran inversiones de infraestructura.
El 30 de junio, el Poder Ejecutivo presentó su proyecto de Rendición de Cuentas 2022 ante el Parlamento. En la oportunidad, la ministra de Economía, Azucena Arbeleche, anunció las previsiones inflacionarias para 2023, 2024 y 2025.
En una entrevista concedida a El País el domingo 16, la ministra Arbeleche se pronunció sobre un crecimiento de la economía por encima de su potencial. “Lo que estamos esperando es que el consumo privado tenga un buen comportamiento. Esto va de la mano de la recuperación del salario real. Estos elementos, conjuntamente con las exportaciones que (pese a las caídas) igual mantienen un dinamismo significativo, nos llevan a estas expectativas de crecimiento”, dijo Arbeleche.